Capítulo 6

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    P L A N:  F I E S T A   D E  C U M P L E A Ñ OS 


Las personas se mueven a través del dinero, si no tenemos dinero para hacer las compras del super no tenemos compras para cocinar, por lo tanto, no tendríamos que comer.

Siempre vas a necesitar dinero para pagar la comida, la luz, el arriendo, etc. Y para conseguir este dinero necesitamos trabajar.

Ahorita me encuentro en mi cuarto leyendo el periódico en la parte de trabajos. Había un trabajo para una cafetería, para limpiar casas, también como cocinera y para una escuela. No sabía cual escoger ya que ninguno me llamaba la atención, pero necesitaba el dinero.

Ya habían pasado dos semanas desde que me había visto con Alex, las clases se habían suspendido por un mes, ya que en mi colegio había explotado tres tuberías.

Todos mis compañeros de clase se encontraban muy emocionados ya que todos los días se escuchaba que había fiestas en las casas de sus vecinos y también en la casa de las personas que eran adineradas, incluyendo a Alex.

Mi mamá me había castigado por haberme escapado junto con Alex, resulta que le había llegado un mensaje "Anónimo" donde decía que no me encontraba en la escuela y le habían enviando fotos de Alex y yo en el carro.

Me resulto algo extraño, pero no le preste atención, y por eso ahora me encuentro en mi cuarto buscando un trabajo. Mi meta era encontrar un trabajo para así poder tener una fuente de dinero, y poder ayudar a mí mamá a pagar la universidad, y también para poder tener una excusa de poder salir de mi casa.

De repente me entro una llamada de Alex. Agarro el celular y le doy a aceptar a la llamada.

-Hola Karen banana – dice divertido.

-Ash, hola Alex- digo seria.

- ¿A dónde tan seria Karen?

-A colgarte- suelto una risa sarcástica. 

- Mira cómo me rio- dice sarcástico hace una pausa- ¿Cres que pueda hablar con tu mamá, ¿para que puedas venir a mi fiesta de cumpleaños?

-Claro que le puedes decir algo Alex, pero no creo que me deje- digo triste.

-Okey ya voy hacia tu casa.

-Alex espera, no le he dich-

Alex me colgó la llamada.

Rápidamente dejo el celular en mi cama y me dirijo hacia mi armario.

Tego que encontrar algo lindo para ponerme.

Pensé.

Agarro una camisa de color blanco y un pantalón de color negro, me coloco la ropa y saco un zapato debajo de mi cama. No encontraba el otro par así que me puse a buscarlo.

-Mierda, ¿Dónde deje el zapato? - digo enojada.

Me agache para poder revisar si estaba debajo de mi escritorio, y hay estaba, el zapato que no encontraba desde hace tres días.

La puerta de mi casa sonó y me dirigí hacia las escaleras para poderla abrirla.

-Yo voy Karen- dijo mi madre bajando las escaleras.

Baje las escaleras y me senté en el sofá, pude escuchar como mi madre habría la puerta y saludaba a Alex. Escuche unos cuantos pasos acercándose hacia la sala de estar.

Vi como mí mamá y Alex se acercaban hacia la sala de estar, Alex me saludo con un pequeño abrazo y se sentó junto con mi mamá en el sofá.

Todo se quedo en silencio por un momento, un par de miradas cómplices por parte de Alex y mías. Mi mamá decidió romper el silencio y dijo.

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