Hoy he viajado por los montes de roca azuleada
Tan duras como la obsidiana
Y tan resbaladizas como mi concentración.
El cielo negro me condenó a encerrarme en mi mente
Y el viento me exigió seguir adelante
Con lápiz en mano
Y el papel carbonatado.
Recuerdo la vez que mi libreta de dibujos
Cayó desesperada en la arena de la perdición
Cada vez se alejaba más
Y parecía que nunca iba a volver.
Vaya suerte la mía
Que al final la encontré abandonada
Bajo una flor que parecía tener un ojo
Un corazón, y un cerebro.
"¡Hola!" Me dijo
Atónita mi mente se puso
Mi corazón latió rápido
Y mi espíritu se desvanecía poco a poco.
Le respondí nervioso
Pero la flor no parecía un demonio salido de mis peores pesadillas
Nada que ver, nada que decir
La flor vagabunda solo me hizo compañía, y el segundo día había terminado.
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The Sleeper Book
SpiritualHas encontrado el diario galáctico de un niño poeta, perdido en las estrellas de Saturno. Sus más profundos e interesantes pensamientos emergen de las páginas provenientes del árbol de papel, que en conjunto las llamó, The Sleeper Book, un nombre cu...