last month 𔓕 jensoo.

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05:10 p.m.

Jisoo se encontraba sobre su vieja cama de madera, abrazando con fuerza su almohada celeste favorita. mantenía sus ojos cerrados para evitar que las lágrimas cayeran mientras deba pequeños sollozos.

abrió sus ojos con suavidad, dejando caer algunas lágrimas y soltando un suspiro exhausto; a duras penas logró dormir un par de horas. se estiró con delicadeza sobre el colchón de algodón para luego dejar su mirada fija en el techo.

nunca antes había tenido una sensación así, sentir su estómago vacío y un nudo constante en la garganta. por más que se quedará despierta día y noche llorando, y suplicándole a Dios, sabía que ya no lograrían encontrar un donante a tiempo.

comenzaron a llegar recuerdos pasados a su mente; toda su vida había sido tan miserable. siempre la misma rutina, yendo de hospital en hospital, quimioterapias, transfusiones, medicamentos, cuidados, etc, etc. vivió toda su vida con precaución y miedo para mantenerse con vida la mayor cantidad de tiempo posible. pero ¿ahora que? todos esos días desperdiciados para que su vida acabe cuando apenas estaba empezando. ahora que sus días estaban contados, comprendía que nunca había vivido realmente.

la leucemia me quitó todo.

dirigió su mirada a una ventana que estaba junto a su cama, la cual tenía unas bellas cortinas rosas floreadas —amaba esas cortinas—. cuando estaba aburrida solía mirar por esa ventana a las personas que iban a pasar un lindo día en el parque frente a su casa, miraba a los grupos de personas de su edad; cuando jugaban soccer, o hacían picnics, o cuando salían con sus parejas.

siempre se había imaginado allí, con su propio grupo de amigos o con su pareja ideal. pero nunca tuvo alguna relación, ni romántica ni de amistad, su único amigo era su hermano y por más que lo quería mucho, le hubiese gustado hacer por lo menos un amigo antes de morir, y poder salir a pasear a aquel parque como las personas de su edad.

notó que afuera hacía un clima hermoso, tal y como a ella le gustaba, una brisa fresca pero con un cálido sol. perfecto para salir a caminar al parque, o ir a la playa.

miró al reloj color bordo que colgaba en las paredes blancas de su habitación.

05:11 p.m.

el tiempo pasaba tan lento que un minuto se sentía como una hora...

a unos pocos metros de distancia se encontraba Seokjin, en el suelo frío del baño, abrazando sus piernas sobre el escusado, tratando de encontrar consuelo en sí mismo. no quería salir de allí, o más bien, no quería ver el rostro de Jisoo, porque sabía que solo encontraría decepción en su mirada. él no solo era su hermano mayor, también su padre y su amigo; él era lo único que ella tenía, y ella era lo único que él tenía. y como su cuidador, siempre se preocupaba por ella y la cuidaba de una forma exagerada. la amaba demasiado y no estaba dispuesto a perderla de ninguna forma.

Seokjin se levantó desanimado y caminó a paso lento hacia el espejo del baño, —sus piernas aún temblaban— daba asco, sus ojos estaban rojos e hinchados por tanto llorar. abrió el grifo y mojó su rostro repetidas veces, hasta lograr deshincharse por lo menos un poco.

iría a hablar con Jisoo.

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tocó la puerta blanca de la habitación de Jisoo un par de veces hasta recibir el aviso de entrar.

abrió la puerta y se encontró a Jisoo sobre su cama, mirando por la ya antes mencionada ventana, con sus ojos llorosos y sus mejillas aún húmedas. no lo pensó dos veces y se dirigió hacia ella, sentándose a su lado.

── lo siento Jisoo, lo siento mucho.── exclamaba Seokjin, dejando caer su llanto nuevamente.

por más triste que fuera, es algo que ya estaba previsto, algo que inevitablemente pasaría.

── no es tu culpa. no tienes porque disculparte.── Jisoo sujetó la cabeza de su hermano para apoyarla en su hombro.

── debiste quedarte en el hospital.

── ¿para qué? ¿para quedarme ahí sentada, y esperar a morir? no gracias.── dice sin quitar su vista del vidrio.

── ¿y cuál es la diferencia? ── se levanta para mirar a Jisoo.── estás aquí encerrada hace doce horas.

¿doce horas?

¿qué estaba haciendo? lo último que no quería hacer, era quedarse de brazos cruzados y esperar a dejar de respirar…

no moriría de esa forma, siendo nadie, sin haber hecho lo que ella quería por lo menos una vez en su vida.

no puedo permitirme morir así...

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