Subió a su moto para intentar despejarse dando una vuelta, no sabe realmente cuanto estuvo yendo de un lado a otro, Sólo sabe que terminó en otra ciudad. No se preocupó en absoluto.
Paró y bajó en un parque que estaba por ahí. Guardó el casco bajo el asiento, junto a los guantes y comenzó a caminar por el camino de cemento alrededor del lago. Iba completamente perdido en sus pensamientos, en miles de problemas por resolver. Los exámenes, el buscar trabajo, terminar de pagar su departamento y descubrir si realmente le gustan los hombres. Sí, esos que son como él. Los que se les llama por "él".
Claro que no, por favor, a él le gustan las chicas. Claro. Jamás estaría con un hombre. Si familia lo despreciaría, le obligarían a quitarse sus apellidos y lo molerían a golpes. En especial su papá, el hombre que asistió al liceo milirar, mide el doble que él por donde lo mires y se la pasa repitiendo "gay" como insulto.
Como olvidar cuando le dio un golpe a sus 13 por decirle que jamás le había gustado una chica. Mi hablar de cuando a los 17 le dijo que aún era virgen porque ninguna chica le llamaba la atención y no quería hacerlo con alguien desconocido. Jamás comprendió porqué estaba mal querer hacerlo con una persona importante en su vida, así que tuvo su primera vez con una chica de su clase. Luego de ese día no fue más y perdió el año. No quería volver a verla, ni quiere.
También recordó su primera novia... Estuvo con ella dos días y ambos se cortaron mutuamente. Ella le admitió en la cara que era lesbiana y él le deseó lo mejor del mundo. Aún se hablan, no mucho, pero siempre que necesitan un consejero o un confidente, se hacen una llamada... Eso es.
Tomó su celular y buscó el contacto de Amy.
— ¿Hola?—
— Uhm... Amy, hola.—
— Oh, hola, Matty. No vi quien llamaba. ¿Todo bien? ¿necesitas algo?—
— Sí, todo bien. ¿Tú?—
— Perfecta, estoy buscando un vestido y no puedo creer lo caros que son... En fin. Ya suéltalo.—
— ¿Tú como supiste que eres lesbiana? Es que... Un amigo está dudando y quiero ayudarlo.— Se escuchó una risa del otro lado.
— Claro, un amigo. Me di cuenta porque nunca me sentí cómoda en mis relaciones con hombres. La primera vez que me acosté con uno no sentí placer, no me gustó, en mis relaciones estaba incómoda, no me gustaba besarlos. Simplemente no me sentía cómoda viendo a un hombre como mi pareja, jamás podía verlos como más que amigos. Lo confirmé cuando me celenté cuando hice una pijamada con mi mejor amiga y terminamos usando tijeras.— Hizo una pausa.— Para cortar los papeles de una cartulina para clase, claro.—
— Sabía que te referías a eso, claro.—
— Oh, dile a tu amigo que es muy gay y deje de hacerse el pendejo. Te amo, adiós.—
— También te amo. Mis condolencias a tu billetera.— Se escuchó la risa de la chica y colgaron.
Bufó maldiciendo y continuó caminando. Había una alta de probabilidad de que fuera gay y en cierta parte se sentía aliviado de ir conectando los puntos. Pero por otro lado no podía pensar en el infierno que se le vendría encima si su familia se enteraba. Debía terminar de pagar su departamento y mudarse para luego decirles. Sí, eso era un buen plan. Espera... Acaba de admitirse a si mismo que es gay. Eso es un avance.
Chocó contra un cuerpo y regresó a tierra. Era Ittay. Por su ropa deportiva, parecía estar haciendo ejercicio.
— No te vi, disculpa.—
— Ya no es divertido que te metas con mi altura.—
— Está vez de verdad no te vi, venía muy distraído.— El rubio lo notó algo distraído.
— Uhm... ¿Estás bien?—
— Sí, adiós.— Siguió caminando y el rizado se quedó estático unos segundos.
— ¿A éste que le dio?— Se puso sus auriculares y siguió corriendo.
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Mirame A Los Ojos. Dime Que Me Odias. [Angelita Rainbow]
Roman d'amour- ¿Me odias?- - Te detesto.- - Dímelo mirando mis ojos.- - Si te miro a los ojos querré besarte, por eso te odio.