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VIAJE
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Gea caminaba por el gran terreno en donde vivía Ajak, el silencio que había transmitía tranquilidad.
—¿Qué paso con él? —preguntó la líder llegando a su lado.
—Oh, está todo bien, tuvo que quedarse. Últimamente estamos teniendo problemas con los ciudadanos —el sol comenzaba a ocultarse cuando ambas llegaron a la cima de una colina teniendo una increíble vista —No queremos que pase lo mismo que con la cacería de brujas.
—Lo sé —Ajak la observo, podía ver con claridad el nerviosismo en su mirada —Gea... ¿Hay algo que quieras decirme?
La castaña se tomó su tiempo para hablar, intentando ordenar sus ideas. —Hace unos días Druig estaba contándome sus anécdotas en Olimpia, todo antes de ser elegido y... me di cuenta de que por más que lo intentará, los recuerdos siguen sin ser claros —dijo sin mirarla— Es como si hubiese un vacío, algo falta y no logro comprender.
—¿Haz hablado de esto con nadie?
Gea negó —No, no.
La conversación se detuvo y ambas eternas tomaron camino a casa cuando la oscuridad comenzaba. El sonido de la tetera se mezclaba con el relinchar de los caballos, Ajak colocó dos tazas sobre la mesa.
—Toma un poco, te calmara.
—¿Sabes algo sobre los demás?
—No mucho... Ikaris y Sersi aún siguen juntos, se que Kingo esta recorriendo el mundo con Sprite.
—Y Thena ¿Cómo sigue ella?
—Gil sigue cuidando de ella, dice que tiene dias malos pero no es algo que él no pueda solucionar.
—¿Han venido a verte? —dijo la castaña moviendo la taza.
—No, no desde hace mucho tiempo pero eso no significa que no sepa de ellos.
