Todos tenemos secretos que podrían arruinarnos, secretos que podrían acabar con todo lo que tenemos y todo lo que somos pero, ¿Qué sucede cuando alguien los descubre?
SungHoon es un chico admirado y amado por todos pero con un secreto que dejaría s...
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capιтυlo 17: ¿тe gυѕтo?
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-¿Puedo pasar la noche contigo?
Ante sus palabras Isa se da la vuelta para estar frente a frente y muy cerca del otro.
- ¿Pasar la noche? -pregunta anonadada por la propuesta de SungHoon.
El castaño asiente.
- Sí. -susurra.- Tú y yo... juntos.
Ella lo mira con confusión por algunos segundos, mismos segundos en los cuales SungHoon aprovecha para observar nuevamente con atención el aniñado y dulce rostro de la peliazul.
- Park... –lo llama y éste sube su mirada a los grandes ojos de la chica- Te gusto, ¿no es así?
SungHoon se queda atónito por la pregunta y luego frunce el ceño.
- ¿De qué hablas? Por supuesto que no - Habla de mala manera-. Te encanta arruinar los momentos, ¿verdad?
- Yo no estoy arruinando nada, Park, con un simple 'No' me conformo - Isa le vuelve a dar la espalda y apoya ésta en el pecho de él-. Eres tú el que hace un gran problema por una pregunta... Sólo quería confirmar algo.
- No hay nada que confirmar – Dice un poco más tranquilo- Esto lo hago para que te enamores, no hay nada más allá de eso.
- Tienes demasiada iniciativa - Ataca Isa.
- Quiero terminar con esto rápido.
- Te pones celoso de Jake y Jay.
- ¿Celoso? ¿Yo? No digas tonterías, Isa. - Se queja el castaño.- Tu amigo me irrita y a ese tal Jay ni lo conozco. No tiene nada que ver contigo.
-¿Entonces por qué te enoja tanto el hecho de que haya un tercero en ésto? - Vuelve a preguntar Isa sin mirarlo.
SungHoon frunció el ceño ante lo molesto que se estaba poniendo.
- Creí que lo sabías – Habla con irritación. - Soy caprichoso, Isa, si tengo algo, tiene que ser solo mio.
Isa se da la vuelta para encararlo.
-No soy un objeto, Park.
-No, no lo eres. - SungHoon se acerca al rostro de la peliazul.- Yo sé lo que vales y por eso te quiero sólo para mí. Tú me elegiste y por ende sólo yo te puedo enamorar, sólo yo puedo tocarte y solo yo puedo jugar contigo... nadie más.
Antes de que Isa pudiera responder, una voz a lo lejos llama su atención.
