Limerencia

Capítulo 2

Agnes

*música de juego de tronos*

- No me digas que ese va a ser el tono de alarma todos los días. - refunfuñaba Noora mientras nos poníamos en pie.

Hoy es el primer día y estoy muy nerviosa, aunque solo es la presentación, reparto de horarios, asignación de clases, etc....

Mientras ella se planchaba su pelo yo me hacía unas ondas e intentaba arreglar mi especie de flequillo extraño, claro que ella va mucho más rápida que yo.

- Vamos Agnes, pasamos por la cafetería y nos vamos que no llegamos. - dijo saliendo por la puerta.

- Ve bajando y pidiéndome un café, enseguida voy, gracias. - hasta que mi pelo no quede en condiciones no podía irme y sí, me vendría mejor una tila, pero tengo que ser fiel al café. Puso los ojos en blanco y se fue.

Nos encontramos en la puerta de salida y nos pusimos en marcha en dirección a la universidad mientras nos tomábamos nuestra bebida y yo escuchaba música con mis airpods, diez minutos andando, menos mal que hace buen tiempo.

Opté por ponerme unos vaqueros de campana, una camiseta blanca de tirantes con una camisa a modo de chaqueta, unas converse blancas y mi mochila negra de vans, no podía faltar. Noora, al contrario que yo, llevaba una falda larga negra con flores, una blusa blanca, zapatos con plataforma y un bolso en vez de mochila.

Estábamos pasando por el parking de la entrada justo cuando vi algo realmente maravilloso, un coche pasando por nuestro lado, pero no un coche cualquiera, un jeep cj5 azul y negro, mi coche favorito. Lo tenía claro, no sé quién era su dueño, pero se lo quería robar, ya estaba montándome una película imaginándome con un coche así cuando vi quien se bajaba del coche recién aparcado, era un chico alto de pelo negro un poco rizado con unos vaqueros negros ajustados, camiseta blanca, cazadora negra y tenis blancos, por lo visto no le gusta el negro. La verdad, era guapísimo, me quedé embobada hasta que di con el final de la acera y me caí de boca con él mirando, genial el primer día y ya haciendo el ridículo. Noora se dio cuenta que no podía respirar así que empezó a hablarme para distraerme.

- Ese es un tal Isaac Walker creo, es del grupo de mi chico, he oído que es el típico chico malo. – me contaba Noora mientras me ayudaba a levantarme, decidí centrarme antes de que me volviese a caer y nos fuimos a la clase donde nos esperaba el profesor.

Una hora más tarde ya nos habían dado los horarios, que por cierto son una mierda, la lista de libros y material escolar y nuestras respectivas clases para cada asignatura.

Como solo eran las once, aprovechamos para ir a por todo lo que nos habían pedido.

Fue un día largo sin parar de aquí para allá, por suerte ya era por la tarde y estábamos acostadas, lo de irnos a dormir sin cenar ya era un vicio puesto que teníamos demasiado sueño y yo quería olvidarme de aquel chico y del ridículo que hice.