𝗪𝗵𝗲𝗲𝗹𝘀 𝗼𝗻 𝘁𝗵𝗲 𝗯𝘂𝘀 [𝗟.𝗦] - 𝘁𝗿𝗮𝗱𝘂𝗰𝗰𝗶𝗼𝗻

Capítulo 5

El pequeño Harry estaba aterrorizado de que sonara la campana que indicaba el final del día. ¿Por qué había abierto la boca e invitado a Louis a su casa? Se suponía que era su lugar seguro, donde no se permitía ningún niño malo del autobús.

Ahora, gracias a la gran boca de Harry (bueno, pequeña, ya que todavía es muy pequeño), había invitado al niño malo.

Al menos aún estaba Niall, pensó. Él podría protegerlo de las cosas malas. Y Liam, bueno, Liam parecía más simpático que Louis, así que decidió que podía confiar en el otro niño mayor. Sin embargo, no estaba preparado para que Louis se paseara por su casa.

Tal vez había una posibilidad de que los chicos cambiaran de opinión y decidieran hacerlo en otra casa. O tal vez cambiar el día. Eso le daría a Harry algo de tiempo para prepararse a dejar que el Louis malo entrara en su propia casa.

Bueno esos pensamientos no se hicieron realidad ya que el timbre sonó un poco después de los dos minutos y se encontró afuera esperando con Niall a que Louis y Liam salieran de la escuela que los tenía todo el día.

"¡Liam!" grita Niall desde su lugar. Harry entrecierra los ojos para ver de dónde vienen los dos y sus ojos se abren de par en par cuando sus ojos coinciden con los de Louis, que le devuelve una sonrisa diabólica.

Tragó saliva.

"¿Estás seguro de esto?" le preguntó Harry a su mejor amigo mientras seguía mirando fijamente a Louis, cuya sonrisa parecía estar cada vez más cerca.

"Vamos Harry, ellos son buenos", dice Niall sin calmar los temblorosos pensamientos de Harry.

"¿Están listos, muchachos?", dice Liam una vez que el grupo está reunido y listo para salir de los límites de la escuela. Niall asiente con la cabeza y también lo hace Louis, pero Harry no hace ningún movimiento por miedo a lo que la noche le traiga.

"Todavía tenemos que preguntar si nos dejan ir a la casa del munchkin", recuerda Louis al grupo mientras empiezan a caminar, " Yo digo que nos dé su dirección y nos veamos todos allá".

Niall y Liam están de acuerdo en pedirle a Harry información sobre su casa. Una vez que Harry consigue decirles (con los oídos ardiendo y el corazón latiendo muy fuerte), todos suben al autobús.

Louis y Liam se sientan juntos en el extremo más alejado del autobús, mientras que Niall se sienta con Harry unos asientos delante de ellos. Niall se daba cuenta de que algo molestaba a su joven amigo pero no quería mencionar nada. Prefería un viaje tranquilo a casa y no tener a su pequeño amigo divagando sobre lo que fuera que le preocupaba esta tarde.

...

"¡Hiciste nuevos amigos!" sonrió Anne una vez que Harry le contó sobre la pijamada planeada a la hora del recreo.

"Sí", dice Harry tratando de ser feliz y no preocuparse tanto. La preocupación no era buena a su edad, pensó.

"Voy a prepararles la cena entonces", sonríe feliz por su pequeño bebé, " ¿Crees que les gustarán mis macarrones con queso?"

Harry asiente. Obviamente, les gustarían sus macarrones con queso. Son los mejores, pensó. Sus amigos (Louis no contaba) amarían la comida de su madre por lo deliciosa que era.

Decidió pensar en los macarrones con queso de su madre mientras seguía esperando a que aparecieran los mayores. Podía oler la comida desde donde estaba sentado y su barriguita rugía de hambre.

Sólo habían pasado unos minutos cuando de repente suena el timbre. Ya están aquí, piensa.

"¡Yo abro!" grita Harry a su madre desde la cocina. Se desliza y pronto llega a la puerta principal. Abre la puerta y es recibido por tres pares de ojos que sostienen sacos de dormir y una bolsa de libros cada uno.