Transmigración al mundo de Zombie Land Return (BL). Versión Extendida

Capítulo 65: Hielo

Isla de Silk Heart. Centro de la localidad de 'Hidden Treasure'.

Una oleada de ratas gigantes se deslizaba por las calles, como una marea oscura y devoradora, moviéndose con rapidez y furia descontrolada.

Eran una plaga imparable, avanzando en una estampida de chirridos y gruñidos, sus cuerpos color pardo y masivos retorciéndose y entrelazándose como una sola entidad hambrienta.

Desde la seguridad de sus ventanas, los residentes miraban con un terror helado cómo aquellas criaturas invadían las casas vecinas, rompiendo puertas, desgarrando paredes, irrumpiendo sin piedad.

Los destellos de luz de los relámpagos en cielo revelaban colmillos afilados y ojos encendidos por un hambre insaciable.

Algunas personas, paralizadas por el miedo, se aferraban a los marcos de sus ventanas, conteniendo el aliento al ver cómo las bestias emergían de las viviendas con rastros de sangre en sus mandíbulas.

La esperanza de que la plaga pasara de largo se desvanecía con cada grito sofocado, y el silencio opresivo que seguía dejaba una tensión espesa en el aire, como la promesa de que aquella marea volvería.

Inesperadamente la marea de ratas gigantes retrocedió cuando cientos de picos de hielo cayeron del cielo.

"No salgan de sus casas". Dijo una voz que provenía desde la entrada del pueblo.

Un frío congelante convirtió en esculturas de hielo a la marea de ratas que había arrasado con la localidad 'Hidden Treasure'.

Desde las ventanas de sus casas, los pocos sobrevivientes de esta masacre observaron a su salvador limpiarse el sudor de la frente con pañuelo.

Esta persona no perdió el tiempo y se dirigió hacia otra de las diez localidades que estaba siendo el objetivo de la Plaga Insaciable (Carta de Asistencia).

Su misión fue interrumpida al observar un barco acercarse a la isla de Silk Heart.

De alguna forma este barco estaba logrando navegar por el mar hirviente que había surgido de los continuos rayos que caían en el océano.

Solo para confirmar, esta persona se acercó a la orilla de la playa para probar la temperatura del agua.

Estaba sorpresivamente tibia.

De pronto se pudo observar como una bola de fuego salía disparada de ese mismo barco.

La bola de fuego impactó con las nubes de tormenta en cielo y provoco que el número de rayos que caían en el océano se redujera significativamente.

Mientras el humo de la bola de fuego se disipaba, la persona en la orilla no pudo evitar quedarse mirando el barco con una mezcla de asombro y desconfianza.

Aquella embarcación parecía desafiar las leyes de la naturaleza, y quienquiera que estuviera a bordo poseía un poder inimaginable.

El mar, ahora mucho menos turbulento, reflejaba como un espejo oscuro los destellos que aún chisporroteaban en el cielo.

Tomando una bocanada de aire, la persona dio un paso hacia adelante, comprendiendo que este visitante no había llegado por casualidad.

Algo importante estaba a punto de suceder en Silk Heart, algo que, de una forma u otra, cambiaría el destino de la isla para siempre.

............................................................................

Dentro de la cabina, Park Moon apenas tuvo fuerzas para tomar una manzana de la mesa.

Cada mordida le devolvía un poco de energía, pero sentía cómo el agotamiento seguía pesando en su cuerpo. Mientras masticaba en silencio, recordó las palabras de Mukahi Ren.

"El Fuego Sagrado es un poder que exige tanto del alma como del cuerpo. Nunca lo uses sin una razón que lo justifique". Sin embargo, él había decidido arriesgarlo todo para cruzar aquella tormenta, sabiendo que quedarse varado significaría perder la oportunidad de llegar a Silk Heart antes de que el enemigo tomara ventaja.

Después de darle la última mordida a la manzana, Park Moon volteó la mirada a donde estaba el protagonista masculino.

Lee Shion permanecía tranquilo, recostado en la única cama del barco. Sobre su cabeza descansaba una revista vieja, arrugada en los bordes.

La revista se tambaleó un poco cuando Shion giró la cabeza en sueños, como si algo en su subconsciente lo incomodara.

Finalmente se despertó y preguntó si el desayuno estaba listo.

Mientras tanto, Park Moon se encontraba en la proa de su barco, luchando contra los innumerables picos de hielo que se arremolinaban en su dirección, disparados sin descanso desde la costa.

Cuando comprendió que la lluvia de hielo no cesaría, activó Planta Aterradora, desatando la corrupción de la flora en Silk Heart.

En la orilla, el atacante continuaba lanzando proyectiles helados, ajeno a los cambios a su alrededor. A su lado, una palmera comenzó a transformar su aspecto de manera grotesca, desarrollando cientos de ojos humanos que lo observaban con una vigilancia macabra.

De pronto, las raíces de la palmera rompieron el suelo y se lanzaron sobre él, atrapándolo antes de que pudiera reaccionar. Las raíces se enredaron a su alrededor como serpientes, y, cada vez que intentaba utilizar su atributo de hielo, inyectaban toxinas paralizantes en su cuerpo, debilitando sus movimientos.

En ese momento, Park Moon y Lee Shion desembarcaron en la orilla, listos para enfrentar a su enemigo, quien yacía inmovilizado y a merced de la vegetación mutante.

La propia palmera mutante se puso en contra de su creador al instante. Las raíces restantes se arremolinaron contra Park Moon.

Park Moon con un gesto de sus manos deshizo su creación malvada antes que esta lo alcanzara con sus raíces cargadas de veneno.

La palmera mutante volvió a su estado normal en cuestión de segundos.

La persona que antes los ataco, aún aturdido y tambaleante por los efectos de las toxinas, cayó de rodillas al suelo.

Intentó levantarse, pero su cuerpo estaba demasiado debilitado como para resistir.

Park Moon lo observó en silencio, evaluando si era necesario neutralizarlo por completo o si la palmera había hecho suficiente trabajo al inmovilizarlo. Lee Shion dio un paso al frente.

"Dime, ¿por qué atacaste?". Preguntó Shion, con tono autoritario, como si él hubiera hecho todo el trabajo.

El atacante, respirando con dificultad, alzó la mirada y escupió al suelo, reacio a responder. Sin embargo, la intensidad de los ojos de Shion, como si pudieran atravesar cualquier resistencia, finalmente lo hicieron hablar.

"No es por odio a ustedes". Dijo con voz rasposa.

Los atacó porque ellos venían en el mismo tipo de embarcación que había traído la Plaga Insaciable a la isla.

............................................................................

Consciencia mundial: El mundo es más seguro sin la presencia de la deidad.