¿Enojado Styles?

Cap. 1

Louis era un chico de apenas 21 años, se había escapado de su casa, ya que sus padres lo querían obligar a meterse al servicio militar, ellos nunca podrían entender la pasión que Louis sentía por la moda. Se fue a trabajar a una sastrería, donde lo único que hacía era coser ciertas prendas no tan complicadas y planchar la ropa, en sus ratos libres aprovechaba para aprender un poco más sobre diseño de modas. Le tomó cinco meses adquirir práctica, porque el talento lo tenía desde pequeño, así fue como él empezó sus primeros diseños y a la gente le gustaba. Louis cada vez vendía más de sus diseños, pero tristemente donde vivía era un pueblo pequeño, donde sí, era exitoso y le iba bien, pero él aspiraba a más. No fue hasta que un cazatalentos lo encontró y se lo llevó para Londres, donde participaba en exposiciones mostrando sus diseños. Louis se llegó a encariñar bastante con Robert, el cazatalentos, y siempre le agradecía el habérselo encontrado, siempre le agradecía por estar donde estaba, porque si no fuera por Robert, Louis nunca hubiera llegado a Londres por si solo, al menos eso creía Louis. Robert siempre había confiado en su potencial  y lo había tratado como su hijo, él siempre soñó con verlo en la ''Fashion International'' era un sueño que ambos compartían. El día que Robert enfermó lo primero que hizo fue asegurarse de dejarle su herencia a Louis, sabía que estaba mal y que sus días estaban contados, se despidió de Louis no sin antes decirle que en tres días recibiría un sobre y que era ese su regalo de despedida. El día de su entierro Louis lloro mucho, lo iba a extrañar demasiado, Robert fue el único que lo apoyo incondicionalmente y confiaba ciegamente en él, en su potencial. 

A los dos días del funeral Louis recibió una carta y al abrirla se encontró con lo siguiente:

''Mi querido muchachito, mi muchachito estrella, te escribo esto desde el hospital, ya sé que mis días están contados, el doctor me lo dijo, yo le dije que no te dijera nada porque eres muy sensible, hablando de eso, probablemente ya estés botando lágrimas ahorita, pero no hice esta carta para verte llorar, hice esta carta para alegrarte tu día. Antes de decirte la noticia, quiero agradecerte por llegar a mi vida, aún recuerdo el día que te conocí, parecías un pequeño joven asustado, pero muy brillante, recuerdo la primera vez que te mande a hacer un traje, cómo olvidarlo, nuestra primera exposición en Londres, las emociones y risas, me pone un poco triste el pensar que no podré seguir acompañándote en esta vida, tengo tantas cosas por decirte y tanto por aconsejarte, así que haré otras cartas, una para cada ocasión, no las abras pequeño tramposo, no las abras si no necesitas ese consejo, porque se perdería la lección. Así que, mi querido muchachito, te dejaré el mejor de los regalos, mis consejos.

Mentira jajaja, ay querido Louis, te conozco tan bien que estoy seguro de que con solo dejarte mis mejores consejos estarías más que agradecido, pero no Louis, mereces todo y lo sabes, pequeño muchacho terco, no quiero saber que estás dudando de lo que mereces o que te estés sintiendo insuficiente, te jalaré las patas si vuelves a creer que no te mereces lo mejor. Ahora si, a lo que iba, tú sabes que a mis hijos nunca les llegue a importar más de lo material y si bien es cierto son mis hijos y los quiero, pero no son como tu Louis, es por eso que he dejado toda mi herencia a tu nombre, tal como lo lees, el cien por ciento para ti, y no tienes que agradecérmelo, eres una persona grandiosa. Y si piensas que esa es la única noticia buena estás equivocado, hay algo que siempre he querido verte haciendo, brillar, tienes talento y ahora yo te doy una oportunidad, te he inscrito en la ''Fashion International'' me ha costado hacerlo eh, pero estás dentro, todas las indicaciones te llegan a tu correo hoy a las siete de la noche, no quería hacerte esperar tanto, conozco lo impaciente que eres, tienes un mes para preparar todo, usa el anillo de la suerte, ¿Te acuerdas de ese anillo con una rosa que siempre usaba y querías ponértelo? Jajaja aún recuerdo tu cara cuando te dije que no porque me quitarías mi suerte, pero ahora no creo necesitarla así que te la dejo, la guarde en el primer cajón, utiliza bien mi suerte Tomlinson, siempre que uses ese anillo recuérdame diciéndote que mereces mucho porque eres y vales mucho. Te amo como nunca he amado a un hijo, brilla y sé feliz.

Con amor el viejito Robert que estará siempre contigo.''

Después de esas noticias Louis no hizo más que darle gracias, parecía un loco abrazando y hablando solo con una urna, un loco feliz y nostálgico. Desde ese día empezaron los procedimientos para recibir la herencia, el dinero, las propiedades y al mismo tiempo, empezaba a preparar sus diseños para la ''Fashion International''. Louis no podía creer todo el dinero que tenía Robert, todo ese dinero le alcanzaría para vivir unos 30 años feliz y con lujos. Pero ahora su mente era lograr ganar el premio al mejor diseñador de Londres en la ''Fashion International''.

Louis empezaba a dibujar para guardar los mejores recuerdos en su laptop.