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Takemichi miró el reloj impacientemente mientras esperaba a su pareja. Ya comenzaba a preocuparse porque estos días Manjiro no paraba de llegar tarde a casa.
La puerta se abrió y por ella entró aquel peliblanco que Takemichi tanto amaba
-Mikey kun- dijo sonriente mientras corría a abrazarlo, este nisiquiera le correspondió el abrazo y solamente lo empujó de mala manera
- Iré a dormir- dijo quitándose sus chanclas para después irse a su habitación. Takemichi se quedó en el recibidor mientras se preguntaba a si mismo si había hecho algo malo para enojar a Mikey
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Los días pasaban y Mikey cada vez se distanciaba más del pelinegro.
El ojiazul también notó cosas un tanto extrañas a su parecer, aparte de que Mikey venía a casa muy tarde, según el "porque tenía que hacer cosas importantes en bonten" , también notó que habían cabellos largos y rosas en sus camisas negras, descubrió marcas en su cuello que no eran de el, Mikey ya no quería tener relaciones con el, ya no le abrazaba al dormir, ya no le daba besos antes de irse a su trabajo, ya no le decía palabras bonitas y siempre estaba en su celular escribiendo mensajes.
Era más que obvio que lo estaba engañando, Takemichi era ingenuo? si, pero no estúpido
Takemichi entró a su casa después de haber tenido un largo día de trabajo en la veterinaria de su mejor amigo Chifuyu
Al entrar dijo con tono neutro un "estoy en casa" pero Mikey no salió a recibirlo, no se sorprendió ya que se había acostumbrado a que Mikey ya no lo recibiera
