☄️07- Segunda oportunidad ☄️

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La incertidumbre los mataba  cada vez estaban más ansiosos hasta que las personas empezaron a salir del quirófano pero ninguna quiso darles información.

Ino  Salio corriendo aferrándose a Sai con su rostro lleno de lágrimas.

— Ino.....

— no la puede salvar, ella.... murió y.....estaba embarazada — susurro a Sai apenas entendible para sus oídos.

— Sai, que pasa¿ y Sakura? — pregunto Naruto aún abrazando a Hinata.

— ella ya no está en este mundo — soltó sin más.

— ¿De que hablas? — Naruto pregunto en tanto todos entendieron. Hinata llevo sus manos al rostro tapando sus lágrimas, Sasuke simplemente se dejó caer en la pared cayendo de apoco al suelo en cuclillas — Háblame claro — Hinata lo abrazo.

— ella-ella murió — dijo Hinata a Naruto quien no resistió más las lágrimas.

La mirada de Sasuke estaba tan perdida, sin pedirlo y sin sentirlo las pequeñas gotas de lágrimas recorrieron su rostro como un río con corriente fuerte.

En ese momento el pasillo se llenó de sonidos de gritos desgarradores y llanto, habían perdido una gran amiga.

Los policias llegaron interrumpiendo el momento de desgracia.

— Lamentamos mucho su perdida, pero necesitamos que el señor sasuke nos acompañe.

— ¿Que tiene que ver la policía en todo esto? — el asombro de Naruto era palpable.

— El auto en el que se transportaba la señorita no tenía frenos, mis compañeros están interrogando al conductor — miró a Sasuke aún en el suelo — usted es el esposo su testimonio es importante — Sasuke siguió en silencio poniéndose de pie.

Ino se limpio las lágrimas agarrando del brazo a Sasuke y llevándolo a la habitación donde se encontraba el conductor, la policía no pudo hacer ningún movimiento antes de verlos correr, Sai, Hinata y Naruto los siguieron

Sin previo aviso Ino azotó abriendo la puerta de la habitación.

— ¿Dime Por qué carajos el auto no tenía frenos?, ¿¡Te pagaron para que la matarás!? — La rubia se abalanzó a la camilla pero los brazos de Sai la detuvieron — ¿Acaso te hizo algo? — pregunto sollozando.

— señorita no puede estar en este lugar, de echo nadie puede estarlo.

— Eso no me importa — puso a sasuke en frente del chico recostado en la camilla con muchos raspones en el rostro —¡¡ el es su esposo, dile la razón de matará!!

— No sabía que el carro estaba sin frenos, solamente me contrataron como chófer — soltó el chico afligido

— ¿Quien?— fue lo único que pronunció el azabache.

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