Jugando con el Playboy

Comieza el juego

Ring ring ring
¡Maldito despertador!

Oh cierto no me presente.... Me llamo Sierra, tengo 17 años, acabo de mudarme, soy alta y acabo de romper el mugroso despertador

-Sierra te encuentras bien? Escuche un ruido- dijo/grito mi mamá desde la cocina

-Si mamá, estoy bien- dije/grite mientras recogía del suelo los pedazos de mi antiguo despertador, que en paz descanse.

Hoy era mi primer día de instituto. Me dirigí al baño y me di una ducha rápida, luego de eso me coloque la ropa interior, me seque el pelo y comencé a vestirme con una falda color salmón, una blusa blanca con flores y unos tacones, me coloque algo de perfume y me maquille un poco. Al bajar a la cocina me encontré con mi mamá desayunando unos wafles, ahogué un grito y fingí estar ofendida

-Mamá no me esperaste para comer?- pregunte haciéndome la indignada

-Lo siento hija, no me pude resistir- dijo con la boca llena

Luego de desayunar con mi madre me dirigí a la escuela en mi Porsche. Lo sé parezco una Barbie con los tacos, las falda, los autos caros, etc, pero no es así. Soy muy divertida y me gusta ser amiga de todos, pero tengo muchísimo carácter si me provocan y es golpear muy bien, me he metido en muchas peleas, amo las carrera ilegales y me apasionan las motos. Mi madre no sabe nada de esto, cree que soy la niña perfecta, me pregunto que haría sí supiera que en mi armario detrás de todas las faldas hay muchísimas prendas negras y de cuero.

Al llegar a la escuela y bajarme del auto, todas las miradas se posan en mi, seguí caminando y me adentre a la escuela comenzó a caminar por los pasillos y todos me seguí en con la mirada, los chicos me miraban de arriba hacia abajo y me gritaban cosas como "perdí mi virginidad, me prestas la tuya?" Y las chicas me miraban con odio y susurraban cosas entre ellas. De una momento a otro las miradas ya nos estaban en mi, si no que estaban en tres chicos. ¡Por dios eran guapísimos! El de la derecha era Rubio, alto y con algunos tatuajes, el de la izquierda era morocho y estaba el doble de guapo que el primero y por último el del medio.... Era mil verses más sexi que los dos anteriores, parecía el líder

Al pasar por mi lado mi guiñó el ojo y sonrió de costado. Yo conocía esa sonrisa arrogante, estaba segura que el era un imbécil y que se creía mejor que todo el mundo. Yo me voy a encargar de que se entere que el no es el mejor. Ami me gustan los retos y no hay duda que este era uno.

Buena suerte imbécil porque voy a destronarte........