"Llegó el correo"

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Luego de varias noches bajo efectos del alcohol Danielle resignada de haber terminado con Stefania se levantó de la cama, cama de Barret que todo ese tiempo cuido de ella en su casa.
Danielle se colocó los primero que encontró en el armario de Barret, luego de tomar una ducha.

Toma -decía Barret llevándole desayuno a la cama mientras veía como Danielle estaba tirada boca arriba muy pensativa-
No tengo apetito -decía mientras cerraba sus ojos y daba un suspiro-
Venga Dani, tienes que comer recuerda que nos has visto a Ford en días debes ir a tu casa y sacar ánimos recuerda que tenemos un viaje -dijo Barret tratando de animar a la rubia pero ella simplemente se negaba y la morena abandonaba la habitación-

Pasaron minutos mientras que Barret estaba en su cocina cuando Danielle con sus llaves en mano entra.

Tienes razón debo ir a ver a Ford lo haré -decía la rubia mientras se acercaba y daba un abrazo a Barret- gracias por siempre estar... -dijo durante el abrazo acompañado de un suspiro- Esperó que esta sea otra tonta discusión con Stefania que pronto podamos solucionar...
Así será -dijo con una sonrisa la morena mientras se despegaba de Danielle- Y si no es así acá estaré ¿correcto?
Gracias -respondió mientras salía del lugar-

Danielle se dirigió hasta su casa que no quedaba muy lejos de la de Barret al entrar pudo notar a un pequeño ser canino corriendo hasta donde ella estaba, con mucha alegría se le tiro encima.

Ford!!! -dijo la chica con una sonrisa enorme en su rostro mientras se colocaba de rodillas para saludarlo mejor, el can solo movía la cola y jugaba con ella-

Señorita Savre -dijo Amanda su ama de llaves que la ayudaba con la limpieza y cuidados de Ford mientras ella estaba fuera-

Hola Amanda ¿algo nuevo? -dijo Danielle colocándose nuevamente de pie para así poder hablar con su ama de llaves-

Solo la correspondencia y la señorita Jaina la ha llamado esta mañana con motivo de urgencia -respondía mientras Danielle sujetaba su correspondencia la cual era mucha por varios regalos de los fans, más estados de cuenta, y cartas de su familia-

Bien le devolveré la llamada -le dijo mientras Amanda salía de la sala, Danielle sujeto sus cartas y pasando una tras otra hasta que se quedó congelada, pues al estar pasando vio una en especial que decía "Stefania Spampinato" por lo que la tomó dejando las demás en la mesa de la sala y entró a su habitación-

Danielle con mucha curiosidad, con intriga del porque Stefania le había mandando una carta la abrió rápidamente, claro que su rapidez se medía en su delicadez por miedo de romper lo que llevaba dentro, al sacar la hoja pudo notar una hoja impecable, doblada del tamaño del sobre en el que está estaba, una hoja rosada, un rosado claro.
Danielle leía despacio la carta y basto para que con las primeras cuatro líneas de la carta se formara una sonrisa en su rostro, sonrisa que se desvaneció luego del primer punto y aparte pues ya había entendido que no era una carta de reconciliación o de perdón era una carta de despedida, Stefania se estaba despidiendo de ella, y Danielle no podía con aquel dolor y vació que se formaban dentro de ella luego de acabar cada palabra de la carta, Danielle con los ojos llenos de lágrimas logró terminar de leerla, seguía sin poder creer que Stefania la había dejado, pero menos podía creer que pedía que no la buscara después de todo lo vivido juntas, luego de luchar por poder estar juntas ella deja todo eso sin poder siquiera verla a los ojos.

"Perdí al amor de mi vida" fue lo único que pudo decir la rubia así misma, mientras caían lagrimas sobre sus mejillas llegando hasta sus labios, provocando que entre soledad, tristeza y dolor tuviera un sabor salado en ella, entre suspiros volvía a leer la carta sin poder creer que la mujer de la que se enamoró perdidamente la había dejado así cómo llegó a su vida "de la nada", Danielle no podía creer que la misma mujer a la que una noche bajo la luna entre el sonido de las olas del mar le juro que su amor sería tan infinito como el cielo que las envolvía, tan inmenso como el océano y tan puro como los bebés que un día podrían llegar a tener, seguía sin creer que esa mujer había escrito esa carta.
Pensamientos así atormentaban la mente de Danielle que estuvo al rededor de 3 horas llorando encerrada en su habitación sin contestar los llamados de Amanda al otro lado de la puerta, sin contestar las llamadas de su móvil que estaba por encima de la mesa de noche a un lado de la cama en la que ella se encontraba, hasta que Jaina entró como si nada a su habitación, viendo a Danielle entre sollozos aferrada a su almohada.

Ven acá -dijo Jaina acercándose a Danielle abrazándola por encima del hombro, dándole fuerzas y todo su amor por medio de ese abrazo-

Jai... ella me dejo -dijo Danielle casi sin aliento, mientras sollozando se acurrucaba en los brazos de su amiga-

Lo sé, lo sé por eso te he llamado -decía la chica mientras trataba que por medio de sus abrazos su amiga pudiera sentir todo su apoyo- Ella me llamo, me dijo que haría esto, y que me necesitarías no quiso decirle a Barret porque sabía que estabas con ella y tú la buscarías...

¿Cómo es posible que la persona que me está haciendo tanto mal sea la misma que llame a mis amigas para que me consuelen por el daño que me hace? -dijo entre lágrimas mientras veía a Jaina-

Stefania no es una mala persona, solo ya no estaban en la misma sintonía -dijo Jaina mientras acomodaba el pelo de Danielle por detrás de su oreja y le quitaba las lagrimas del rostro-

Stefania es todo... ella es todo lo bueno de la vida -dijo con un suspiro- No quiero dejarla ir...

Paso un tiempo hasta que Danielle quedó profundamente dormida en los brazos de su amiga, la cual estaba destrozada al ver a Danielle de aquella forma, como el brillo de sus ojos celestes estaba apagándose y la forma en la que su voz se escuchaba distorsionada entre tantos sollozos... esa no era Danielle.

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Gracias por llegar hasta acá ¿creen que Danielle y Stef de nuestra historia, sean un verdadero hilo rojo?

El hilo rojo (stefanielle) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora