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𝐌𝐢𝐤𝐞𝐲
-Despiértate idiota o no llegaras a clases-dijo mi hermano entrando a mi cuarto y tirándome un chanclaso.
- Dios podrías dejar de despertarme de esa manera- dije sentandome mientras me sobaba el golpe.
- Esta bien lo dejare de hacer solo si empiezas a despertarte temprano- rio burlonamente.
- A esta bien, bueno ya lárgate y déjame cambiarme- el camino fuera de mi cuarto y cerró la puerta.
Luego de que me cambiara y me bañara, baje las escaleras para tomar una manzana ya que se me hacía tarde, para este momento mis hermanos ya no estaban.
- ¿No vas a comer otra vez?- dijo mi abuelo desde la sala
-Lo siento pero no, se me hace tarde- respondí mientras tomaba mi mochila del sofá- nos vemos abuelo vuelvo en la tarde-dije mientras salía de la casa.
- está bien pero busca algo que comer- grito desde la sala.
- si abuelo si- luego de eso cerré la puerta y corrí para alcanzar un taxi ya que mis hermanos se habían ido con el chofer.
-Hola joven a donde lo llevo- dijo el conductor del taxi.
- A la universidad todai- respondí, el chofer asintió con la cabeza.
Al llegar a la escuela me encontré con dos alumnas Amelia y Yuno, también estaban los directivos.
-Ey Mikey- grito ken-chin que estaba atrás de Amelia y de Yuno, me acerque con ellos.
–Wue hay como están- dije saludándolos
-Bien bien, viste que Yuno y Amelia estaban hablando con los directivos- dijo mientras caminábamos hacia el salón.
- Sí, si las vi pero no creo que estén en problemas ellas no son así- Yuno y Amelia eran de las mejores alumnas del campus para mí era raro que estuvieran hablando con los directivos.
- Quien sabe, se escuchan rumores de que una de ellas fuma y la otra se corta- exclamo mi amigo mientras se encogía de hombros
- lo dudo son muy buenas alumnas y eso no es algo que esperaría de ellas- dije y entre al salón de clases.
Al salir al recreo, fui a la biblioteca a escondidas como siempre, porque no iba a dejar que se arruinara mi reputación de esta manera, la biblioteca es el único lugar seguro para mi desde niño me e refugiado en los libros ya sea para olvidar el caos que vivo o para distraerme o bueno eso digo ahora antes era para no estar pensando en las frecuentes peleas de mis padres; Tome uno de mis mangas favoritos de un estante y me senté en una mesa alejada de los demás para que no me vieran, luego saque de mi mochila una soda de limón y comencé a leer, luego de un rato: la pantalla de mi celular brillo, deje a un lado el manga y vi mi celular, era un mensaje de Baji.
