Fairytale. (Katsudeku-omegavers)

Segundo Acto.

Katsuki ahora tenía ocho años de edad, como era la costumbre revelarían que tipo de segundo sexo tendría, ya sea alfa, beta u omega.

Una campaña de médicos por parte de la familia real fueron mandados al pueblo para atender a los niños y revelar su segundo género.

Katsuki estuvo casi todo el día esperando sus resultados junto a su padre Masaro, que este podía ver lo impaciente que estaba su cachorro.

—Katsuki.- Masaro se agachó hasta quedar a la par con su hijo y mirar lo a los ojos para tranquilizarlo.—Relajate, todo va a salir muy bien.

Katsuki por su parte no contestaba nada, su mirada se veía pérdida, sabía lo que significaba la revelación de su segundo género, estaba seguro de que sería un alfa, pero aún sabiendo eso sus nervios no se fueron, después de todos los resultados son los que darían y hablarían por su futuro como caballero.

Como era de esperarse los resultados salieron con el pequeño Katsuki como alfa, Masaro lo felicito y Katsuki no podría sentirse más que orgulloso por eso.

En la llegada a casa Mitsuki miro como ambos llegaban riendo, la estaban pasando muy bien.

—¿Buenas noticias?.

—Mamá, soy un alfa como quería eso significa que podré cumplir mi sueño de ser un caballero.

Mitsuki miro sorprendida a su cachorro, le indico que se tomará asiento y así lo hizo.

—Escucha bien Katsuki, no por ser un alfa está seguro tu futuro, es verdad que estás en un rango alto en la sociedad pero eso no asegura nada ¿Ok?.

Masaro tomo asiento y estrecho a su Omega paga después mirar a su cachorro y hablarle.

—Nosotros te vamos apoyar hasta donde podamos, queremos que cumplas tus sueños, no olvides eso.

—¡Si!.

Respondió por último esto, la verdad era que ser un caballero era algo de que preocuparse, muchos morían en campos de batalla y eso le preocupaba a los padres de Katsuki, el perder a su único hijo pero no le iban a prohibir nada, después de todo era el sueño de esté.

La campana de la cafetería sonó llamando al atención de todos.

—Buenos días Yumi.

—Buenos días señores Bakugo's.

Katsuki abrió los ojos emocionado al ver a Yumi parada en la entrada de la cafetería eso significaba que Izuku estaba cerca y tenía muchas ganas de decirle que era un alfa y averiguar el género de Izuku.

Se bajó se su banca y corrió hasta donde Yumi, dando pequeños saltos se alegría, Yumi lo miro y después le sonrió al principio se sorprendió pero no dejo de ser adorable a su vista.

—Buenos días Katsuki-chan.

—Yumi, ¿Dónde está Deku?.- dijo el infante buscando a su amigo atrás de la señora, pero no encontró al menor.

—El está en el campo Katsuki-chan.

—¿Porqué no vino contigo?.- Yumi estaba apunto de responder de no ser porque Katsuki estaba preparando sus sandalias para salir corriendo.—No importa iré a verlo, ¡Ya regreso!.

—¡Espera Katsuki-chan!... Se fue.

—¿Pasa algo Yumi?.

Yumi miro resignada a Mitsuki, bueno era algo que tarde temprano iba a pasar y sería mejor que los niños enfrenten eso, es parte de crecer, aunque sean solo un par de cachorros.