— Soo Bin, se supone que debes comer algo— murmuró Yeon Jun.
— Lo comeré después, ya, pero... Tu olor, me calma, quédate.
Yeon Jun se ahorró el suspiro, se quitó los zapatos y se acercó a Soo Bin con lentitud, sus ojos se abrieron de más y su corazón latía con fuerza cuando el Omega lo abrazó, y hundió el rostro en su cuello, llenando sus pulmones de su olor.
Soo Bin quedó sobre él, su mejilla apoyada en su hombro, una pierna enrredaba en la suya, y los brazos rodeando su cintura, su nariz dejaba cosquillas en su cuello.
El olor a tristeza comenzó a bajar a los minutos, el olor a flores y a fresas del Omega aparecieron, y cuando estuvo tranquilo, Yeon Jun se sorprendió de encontrar otro aroma.
— Miel— murmuró—. También hueles a miel...
Soo Bin soltó una débil risa.
— Kai decía que olía a miel sólo cuando estaba feliz... Es raro que lo sientas, ya que me siento como la mierda por dentro.
— Binnie... — Yeon Jun acarició su espalda suavemente—. Tú no te preocupes... Tu alfa te esta cuidando desde un buen lugar, ¿Sabes? Él está velando por tí, y te espera con toda la paz y tranquilidad del mundo, puedes tomarlo con calma que él estará allí para tí. Y hasta entonces, puedes disfrutar del mundo que queda aquí.
Soo Bin permaneció unos cuantos segundos en silencio.
— Voy a extrañar a Beom Gyu— murmuró.
— Puedes pasar todo el tiempo que quede con él, él no tendrá problema.
— Sabes... Antes de todo esto... Con Huening teníamos muchos planes futuros, pero ahora... Ya no quiero hacer nada.
— Es algo normal, Soo Bin, sentirse así después de algo como lo que te está ocurriendo.
— Siempre quise tener un cachorro, Yeon Jun— continuó desahogandose el Omega, el enfermero lo dejó hablar, mientras acariciando sus cabellos suavemente—. Kai nunca fue muy fanático de la idea de tener un hijo, aunque ya lo estaba convenciendo...
Yeon Jun sintió las lágrimas de Soo Bin caer sobre su piel.
— Supongo que ahora él no va a poder conocerlo— murmuró el peliazul, una de sus manos dejó la cintura de Yeon Jun para ir a su vientre.
Las cejas de Yeon Jun se alzaron, se giró hacia él para mirarlo, atónito.
— Soo Bin... ¿Estás embarazado?
El Omega tembló del llanto y el Beta lo atrajo más a su cuerpo como consuelo.
— No importa igual— murmuró Soo Bin—... Ya ni siquiera yo lo voy a conocer.
— Soo Bin sabes... Puedes vivir, por tu cachorro.
— ¿Para qué no tenga padre? ¿Para qué yo no tenga alfa? ¿Para qué estemos sólos? — su tono sonaba algo enojado.
Yeon Jun suspiró mentalmente, era todo lo que un Omega pensaba y sufría, por más que Yeon Jun pudiera darle todos los argumentos y fuerzas para seguir viviendo, simplemente no podría contra la depresión de un lazo roto, así que no lo intentó, lo dejo llorar.
La puerta fue tocada suavemente.
— ¿Choi Yeon Jun? ¿Soo Bin? — Beom Gyu preguntó suavemente—. Yo... Hice la cena y ya se está enfriando, ¿Todo va bien?
— Beom Gyu, pasa— habló Yeon Jun, se irguió un poco, sosteniendo a Soo Bin junto a él—. Pero despacio.
El peliazul entró con duda, la expresión de su rostro fue de pura sorpresa al verlos compartir un nido.
— Soo Bin, escuchame — Tomó sus mejillas y vió sus azulados ojos—. Debes cambiarte e irás a comer, ¿De acuerdo? No puedes dejarte estar.
Soo Bin apenas enfocó su vista en él un momento, su nariz se movió un poco cuando olfateó el aire, se acercó a su cuello para oler su aroma a madera.
— Beom Gyu, no liberes muchas feromonas, podría afectarlo— murmuró Yeon Jun, a lo que el chico asintió—. ¿Le traes algo de ropa?
El castaño fue hacia los cajones, sacando un par de calzoncillos, unos sorts y una remera holgada, que dejó suavemente a los pies de la cama, sin querés acercarse y perturbar el nido de su amigo.
Yeon Jun tomó la pequeña pila y quitó la toalla que cubría la desnudez de Soo Bin, con eso Beom Gyu cerró los ojos, pero el enfermero estaba totalmente normal, ayudo al Omega a pasar la remera y Soo Bin tomó los calzoncillos para colocarselos él mismo, sintiéndose avergonzado de la ayuda.
Apenas terminó de vestirse, se levantó con lentitud sobre sus pies, y Yeon Jun se acomodó a su lado sin dudar, antes de mirar a Beom Gyu para que fueran a la cocina.
El Alfa había cocinado algo de pasta para Yeon Jun y él, y un té de manzanilla que sabía que Soo Bin disfrutaba, había encontrado un mix de frutos secos que seguramente Kai había comprado y eso explicaba la expresión triste del Omega al verlos.
— En verdad no tengo hambre— musitó Soo Bin.
— Tomate al menos la mitad y come algo y te acompaño a la cama de vuelta— dijo Yeon Jun.
— ¿Sabes qué puedo ir sólo, verdad?
— Sabes que quieres que te acompañe— dijo—. Debo acompañarte— se corrigió.
Soo Bin suspiró con cansancio y tomó un sorbo de su té, pensando que debería colocarle más azúcar.
Beom Gyu parecía pensativo, y no habló nada en la cena, apenas si echó unas miradas a alguno de los dos, pero una parte de él no sabía si debía quedarse o irse.
Necesitaba su tiempo también, para llorar con tranquilidad, pero también quería acompañar a su amigo, aunque le parecía absurdo, porque para eso había contratado a Yeon Jun.
•━━━━━━━━━━•Espero estén teniendo un bonito día!!! ❤❤
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OUR LAST DAYS - YEONBIN
FanficChoi Soo Bin es un Omega que perdió a su Alfa en un trágico accidente, con su lazo roto y su lobo deprimido, le quedan pocos días de vida. Choi Yeon Jun es un Beta y enfermero a domicilio, es contratado para cuidar al Omega en sus últimos días. ♤♡◇ ...