Los ojos me pesaban demasiado como para poder abrirlos y mi cabeza daba muchas vueltas. Puse mis manos en los costados de mi cuerpo para poder levantarme del colchón; mis brazos estaban muy débiles y termine cayendo en el mismo. Rendida gire mi cuerpo hacia un lado encontrándome con la espalda de un hombre (o eso parecía)
-¡AHHHHHHHHHH! -grite asustada y con la única fuerza que quedaba en mis piernas empuje al hombre fuera de la cama. Solo escuche un golpe y detrás un quejido
-¿que pasó? -dijo alguien desde la esquina de mi cama, era Danna -¿que hiciste? -dijo al darse cuenta que mis piernas estaban en dirección del desconocido que yacía en el piso
-él estaba acostado aquí conmigo, me asuste y no se quien es -dije rápidamente y asustada
-¡ES ANDRÉS! - gritó y acto seguido se levanto como si hubiera un terremoto, fue al piso para revisar a Andrés -¿te puedes levantar? -agarró su cabeza para ayudarlo. Yo los miraba perpleja esperando que no se haya hecho mayor daño
-soy Andrés, estúpida -dijo él levantado su cuerpo, quedando sentado en el suelo
-Perdóname -Dije dándole un beso en la frente -voy por hielo -busque mis pantuflas de cerdito en el armario y me dirigí hacia las escaleras
-¿que mierda es esto? -me dije a mi misma, viendo todo el desastre desde el ultimo escalón. Habían botellas, vasos, vomito, pizza y los muebles blancos ya no eran de ese color.
Avance con cuidado a la cocina, caminando de puntitas para no pisar el vomito que parecía ser de un zombie; agarré el hielo del congelador y subí a mi habitación
-¿qué pasó ayer? -pregunté a las personas presentes en mi habitación, dos con resaca y una invernando
-que no pasó -dijo Andrés burlón arrebatándome el hielo de las manos
-¿hice algo malo ayer? -pregunté
-Que no hiciste -dijo Danna con el mismo tono burlón
-¡chicos! -dije
-te voy a decir todo con una sola oración -dijo una voz, exaltándonos a todos; provenía de una persona que estaba acostada de espalada en el sofá de la habitación con la cobija tapando gran parte de su cuerpo - tú -se dio la vuelta para apuntarme con el dedo - querías que Samuel durmiera contigo
-¡¿DORMIR DE SEXO?! -grite, sintiendo el calor subir desde mis pies hasta las mejillas
-no, tonta -respondió -dormir de sueño o eso se entendió
miro a Danna esperando a que lo desmintiera, ella sonríe y asienta con la cabeza -es cierto - dice
Andrés suelta una carcajada -Te tiraste al piso y lo agarraste del tobillo -dice.
Pongo la palma de mis manos encima de mi cara cubriéndome
-Pero él fue muy lindo, Nabi -dijo acariciando mi cabeza -te levantó y te calmo, hasta que te quedaste dormida
-si, luego te cargo hasta tu habitación -terminó Fabio
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Tengo 17
Teen Fictionsi, lo acepto esta es otra historia cliché de una chica tonta que se enamora del vecino imposible, pero es mi historia y por lo menos aquí no hubo un final feliz, hasta ahora