Before You (Editando)

Cap-3

6 años después ...

Génesis

Siento la melodía de un amanecer, el canto de las aves, el murmuro del movimiento de las hojas de un árbol, ligeros rayos de sol iluminan mi rostro, intento abrir mis ojos, pero no puedo << ¿Qué me pasa? >> Mi mente quiere abrirlos, pero mi cuerpo me lo impide, intento hablar y solo puedo murmurar, mis piernas tampoco puedo moverlas, no sé qué me sucede << ¡Ayuda! >> Mi mente habla como si quisiera que me escucharan.

De una manera muy sutil y delicada mis ojos dando entrada al fuerte resplandor del ventanal, miro hacia mi alrededor sin mover mucho mi cabeza << ¿Dónde estoy? >>
De repente siento la apertura de una puerta y se acerca a mi una mujer con bata blanca << ¿Una doctora? ¿Estoy en el hospital? >> Ella al verme se sorprende como si hubiese visto a un fantasma y comienza a dar altas voces llamando a un doctor.

***

ꟷ ¿Dime como te sientes? ꟷ El médico se encontraba justo a mi lado.

ꟷ No puedo moverme mucho y me duele un poco la cabeza ꟷ Le dije con palabras pausadas pues no podía mover muy de prisa mis labios ꟷ ¿Por qué estoy aquí? ꟷintentando buscar respuestas, no recordaba nada.
ꟷTranquila, es normal que te sientas así, es un milagro que hallas despertado ꟷ Los pequeños hoyuelos se hacían notar en su rostro.

ꟷ ¿Eh dormido mucho? ꟷ Dije pensativa ꟷ No suelo dormir tanto doctor.

ꟷ Srta. Génesis usted ha estado en coma durante 6 años ꟷ Mi mundo cayó abajo, esas palabras fueron como un volcán, se repetían constantemente en mi mente como un bucle, mis ojos se humedecieron sin poder procesar lo que el doctor me decía.

***

Pasaron los días, me fui recuperando, se me hacía un poco más fácil moverme gracias a las fisioterapias, sin embargo aún no era capaz de procesar que en lo que a mí respecta en una noche hubiera saltado de tener 14 años a 21. El notar mi reflejo en los espejos del hospital se hacía raro, evidentemente mi cuerpo y mi rostro habían madurado, ya no era una niña como mi mente recordaba. Escasos recuerdos vagaban en mi memoria, un niño, juegos, risas, alguien que colgaba de mi cuello una cadena con un diamante rojo, laxos de extrañas escenas venían a mi frustrándome , ni siquiera sabía si tendría familia, solo recordaba mi nombre y a un dulce niño.

Llevo mi mano hacia mi cuello, pero no hay rastro de ningún colgante, aun así, decido preguntar a mi enfermera cuando la veo entrar a dejar mi desayuno.

ꟷ Hola, buenos días ꟷ Trae en sus manos algo delicioso.

ꟷ Buenos días, necesito preguntarte algo ꟷ Estaba impaciente ꟷ En mis pertenencias... ¿no hay ningún colgante?

ꟷ No lo sé pero prometo que lo buscaré ꟷ Me dijo dejándome una sonrisa, era una chica muy cálida y amable.

ꟷ ¿Mi familia no viene a verme? ꟷLe dije y sentí su rostro tensarse por mi pregunta y en ese instante sin siquiera hablar le dio respuesta, baje mi cabeza con un semblante de tristeza y ella no supo que decir ꟷ Entonces quién ha estado pagando las cuentas del hospital.

ꟷ No lo sé, lo hacen de manera anónima ꟷ Supe que estaba perdida, sola, forzaba a mi mente para intentar recordar algo intentando encontrar una esperanza.

***

La enfermera traía en sus manos el colgante que recordé, al mirarlo tuve tantas sensaciones, sabía que detrás de esto se encontraban las respuestas a todas mis preguntas, de repente el recuerdo invadió mi mente, solo su nombre << Mateo >> retumbaba en mi interior como un fuego inquebrantable << un lago detrás del instituto y un beso >> fue ahí entonces cuando recordé al gran amor de mi vida. Tenía que salir del hospital y buscar a Mateo, era la único que tenía.