Diferente -Timothée Chalamet-

[7] Es pura envidia

🐉Abigail🐉

Entonces, después de limpiarnos y seguir con otras dos actividades; volvimos a los sillones y le mostré la llamada que habíamos grabado para él. Después de que lo viera y de que me diera más ternura; empezamos la sección de preguntas en la audiencia en vivo

Para Timothée. ¿Hay algo que te guste más que actuar?—preguntó tímidamente una chica castaño-claro

Antes solo una, pero ahora mismo dos—inquirió con una sonrisa traviesa—una de ellas es cantar...

—¿Y la otra?

Seguramente burlarse de mi perfecto francés—me mofé—es pura envidia

Negó divertido—Me la guardo para mí—sonrió angelicalmente antes de que la siguiente chica tomara el micrófono

Esta es para ambos—comenzó una chica rubia de no más de veinte años—¿Qué opinión tenían el uno del otro antes de conocerse?

Timothée me miró esperando a que contestara primero

Creía que era un chico en extremo tierno y muy caballeroso—sonreí—pero ahora me doy cuenta de que es bastante gracioso... y más guapo de cerca—dije aquello último en español, a modo de broma

La audiencia que entendió mi frase gritó con emoción, haciendo que mi invitado se descolocara brevemente

¿Qué ha dicho?—preguntó con una sonrisa curiosa

Negué poniendo un dedo sobre mis labios, si tanto quería saberlo; que lo averiguara él mismo

Me sentí bien cuando todos guardaron silencio con sonrisas llenas de picardía y complicidad

Hizo un puchero—Bueno, me enteraré de todos modos—suspiró para proseguir a contestar la pregunta—realmente no sabía que pensar. Como dije; me invitaron a una entrevista y supuse que sería aburrido y tedioso, pero me di cuenta de que realmente es divertido pasar tiempo con esta chica—me señaló con una sonrisa—en plus c'est beau à l'intérieur comme à l'extérieur

Los chicos gritaron como si su equipo favorito de futbol hubiera ganado y me sentí bastante curiosa al respecto

Ahora soy yo la que pregunta que está diciendo—escudriñé con una risita

—¡Dice que...!

LALALALALA—cantó torpemente por el micrófono el chico a mi lado, haciendo que no pudiera escuchar la traducción de la gente

¡Timmy!—chillé para que me dejara escuchar

Timmy...—repitió pensativo—es lindo

Era eso o llamarte Doug—reí

Ambos suenan bien—me dedicó otra sonrisa

Suspiré inevitablemente y vi la hora en el reloj del set

Oh no, ¿enserio quedaban siete minutos de programa? ¿Tan rápido?

Lo averiguaré, Chalamet—entrecerré los ojos con suspicacia—pero antes de eso—hice un puchero—tengo que avisar que el programa ha terminado

Los quejidos del público se escucharon de inmediato, incluso el famoso a mi lado abucheaba en contra

Que más daría por tener media hora más, pero es lo que hay—sonreí con tristeza y me dirigí hacia Timothée—Fue un placer haber compartido una entrevista contigo. Solo me queda decirte que eres un gran actor y que admiro mucho tu trabajo. Gracias de parte mía y mi equipo de trabajo por aceptar esta invitación. Las puertas de este programa siempre estarán abiertas para ti

Me la pasé increíble, gracias a ti por la invitación, enserio disfruté este tiempo contigo—sonrió

Le devolví el gesto—y a usted que me está viendo en casa le deseo una semana llena de helado y unicornios. No se olvide de ver las transmisiones y recuerde que si está triste, es mejor no estarlo—guiñé un ojo a la cámara—nos vemos en la próxima transmisión. Esto fue La noche de las estrellas con Abi ¡Un beso hasta el cielo!

El público aplaudió con entusiasmo y ahí; ese preciso segundo donde la mirada de Timothée y la mía se cruzaron y escuchaba de fondo el cariño de los fans me hizo sentir completa y querida

También fue entonces cuando recordé lo que me atormentaba desde antes de comenzar el programa, sentí mi mirada oscurecerse un poco y la corrí del alcancé del chico a mi lado

—¡Y... corten!

Realmente me había hecho olvidar mis preocupaciones durante dos horas seguidas

Me quité el micrófono con poco cuidado y lo dejé botado en la mesa mientras caminaba torpemente hacia mi camerino, recibiendo felicitaciones por el programa en el trayecto

Llegué y me encerré en aquel pequeño espacio, empecé a quitarme aquel vestido negro que de repente se me antojaba demasiado apretado y lo aventé hacia alguna parte del lugar. Agarré mi celular con las manos temblorosas y abrí el mensaje que tanto había evitado desde la mañana. Después de leerlo torpemente una lágrima corrió libremente por mi mejilla, luego otra salió como si persiguiese a la anterior

Comencé a ponerme mi pantalón de chándal y mi playera casi cuatro tallas más grandes mientras seguía llorando. Me encontraba a mí misma jodida por dentro y patética por fuera, sentí lejos aquel sentimiento de alegría que estuvo conmigo durante todo el programa

Todas mis emociones abrumadoras se disiparon cuando escuché como llamaban a la puerta

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