•No respires•

~noche loca~

Hebe.

Me sorprendió mucho escuchar aquellas palabras de mi guapo y decente jefe,por un segundo creí que diría algo tipo "que rara eres" o "eso de romper las reglas está mal" pero fue todo lo contrario,pero pues ¿Quien lo diría? Acá estoy entrando a escondidas a una licorería  para robar alcohol,Eros está delante de mi.

- haremos lo siguiente,yo pediré tres botellas de whisky y te las pasaré,luego saldremos corriendo y fin,nos largamos a beber- yo me reí tanto que casi me hago pipi.

- que Plan más malo- seguí riendo.

-¿Porque te ríes?- pregunta con cara de "pero que diablos contigo mujel" 

- tú solo observa y ni se te ocurra detenerme- su cara de confusión da muchísima risa, gracias a los cielos elegí un vestido corto muy pegado al cuerpo,unos zapatos de tacón no muy altos ni muy bajos,no me impedirán correr, empecé a caminar hacia la barra,movía mis caderas mientras caminaba,mi corto cabello rozaba mi cuello,me senté y un tipo a mi lado empezó a tirar piropos,yo sonreí malvada.

- hola guapa¿Que deseas tomar?-me hablo aquel hombre a mi lado,yo le sonreí.

- ¿me harías el favor de pedirme tres botellas de whisky? Es que mi hermano mayor le dijo al mesero que no me vendieran alcohol y ya ves- lo último lo dije en un susurro.

- por supuesto querida,te haré el favor¿Pagarás en efectivo o cheque?- yo miré por encima de mi hombro,Eros estaba parado justo en la barra de brazos cruzados.

- cheque- le afirme al hombre,este asintió y se levantó a pedir las tres botellas,al regresar las trajo consigo.

- aquí tienes- dijo Con una sonrisa.

- gracias.....

- Diego- dijo el tipo cuarentón.

- Daniela- mentí.- bueno iré a por el cheque y a esconder esto antes de que mi hermano vuelva- dije levantandome,el hombre frunció el ceño.

- pensé que traías tu chequera contigo- zanjó,yo reí.

-¿Si mi hermano no dejo que comprara alcohol,crees que me dejaría portar mi chequera?- le dije con obviedad,oh valla Hebe eres malaaa.

- tienes razón,te espero aquí Daniela,no tardes mucho de lo contrario te iré a buscar- dijo con severidad,yo asentí con una sonrisa y caminé hacia la salida meneando mis caderas, puffffff que fácil,al salir subí al coche de Eros,a los minutos él llegó.

- sigo pensando que mi plan era mejor- dijo empezando a conducir, yo me reí.

- salud- dije bebiendo un poco de la botella,le daría pero está conduciendo,llegamos al puente y bajamos yo llevo una de las botellas de whisky y Eros dos cartones de huevos,a esta hora no transitan muchos autos así que no habrá problemas,nos sentamos en la orilla, tomé un huevo y lo lancé lejos.

- gracias de verdad- confesé.

-¿Porque?- me preguntó.

- por lo de esta noche.

- falta la parte final- confesó

-¿Cuál?

- pintar la pared de una empresa reconocida con grafiti- dijo y yo lo mire con una sonrisa en el rostro.

- si no fuera porque estamos en la orilla de un puente me lanzaría hacia ti y te abrazaría- confesé, él río.

-¿Y quien dijo que estar en la orilla de un puente impedía un abrazo?- yo reí como tonta y luego lo abrace,sus cálidos brazos me recibieron, sentí un cosquilleo recorrer todo mi cuerpo y por un momento quise permanecer así,el mundo a nuestro alrededor se detuvo y en lo único que pude pensar fue en cómo sería besarlo,si lo sé soy una lanzada,pero es que por Dios¿Quien no desearía besar a Eros Cavaliers? Pinche dios griego lleno de perfección,a los minutos nos separamos.

- ¿Te puedo hacer una pregunta?- dije rompiendo el silenció.

- ya la hiciste- dijo con un ademán para que siguiera.

-¿Porque no tienes novia? Digo ¿como es posible que un chico como tú,de veintitrés años no tenga novia?

- para que tú veas,bueno pues no tengo porqué,no me eh parado a pensar en eso ¿sí me entiendes? Cuando empecé a trabajar con mi padre solo me enfoque en la empresa y así sigo hasta ahora que llegaste tú y te hiciste mi amiga,tal vez sea porque nunca nadie comprendía mi vida y tú si pudiste hacerlo, quizás fue tu forma de ser que me llevo a querer ser algo cercano a ti,en realidad no lo sé del todo, solo se que te aprecio- yo sonreí,era la primera vez que alguien me decía palabras tan lindas,joder Eros Joder.

- y prometo nunca irme de tu lado, pasé lo que pasé allí siempre estaré- lo volví a abrazar,quizás el tenga razón y simplemente nos necesitamos uno del otro y es que Eros logra comprender cosas de mi que nadie más.

-¿Ahora yo te puedo preguntar algo?- yo lo mire y asentí-¿Porque no me dices la verdad?- yo lo mire confusa.

-¿Cuál verdad?

- tu padre,osea no se qué ocultas o que no quieres contar pero se que hay algo- yo baje la mirada,si quería que nuestra Amistad funcionará tenía que decirle la verdad.

- mi padre.....no está muerto- tragué saliva- está en la cárcel,fue.....por violación- confesé y baje la mirada.

- tranqui.....- lo interrumpí.

- ese hombre me violó y no una si no, miles de veces,desde que cumplí quince,solo se sometió a dañarme la vida,yo....yo quise detenerlo...pero no pude- confesé con lágrimas en mis ojos,hasta que fueron saliendo,uno y luego otra y otra y otra,hasta que no pude para de llorar,Eros me abrazó y acarició mi cabello.

- de verdad lo siento,nunca pensé que.... habrías pasado por algo tan horrible- confesó acariciando mi cabello.

- la verdad ya no me importa,ya él está donde tiene que estar y aunque sea mi padre lo odio con todo mi ser- confesé.

- ey,shhh,no odies,el odio es dañino,mejor nos vamos a dañar la pared de alguna empresa- dijo levantandose ¿El odio es dañino? ¿Acaso tú alguna vez has odiado a alguien?.

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- mierda Eros- dije mirando el feo dibujo de la pared de la empresa de ropa y accesorios,le habíamos dibujado un vestido que usualmente salió horroroso y un escrito que decía "ladrones" bueno si nos pasamos,pero por dios¿Saben cuánto cuesta el vestido más sencillo de allí? Pues 900$ eso cuesta el vestido más sencillo,se podrán imaginar los más extravagantes.

- se lo merecen- dijo riendo,ya estábamos pasados un poco de alcohol,bueno yo más que Eros pues el conduce,son las 3:15am si tardísimo pero bueno,el ruido de unas patrullas nos alarmaron.

- oh mierda,vámonos de aquí- grité y empezamos a correr,al llegar al patio caí gracias a los tacones,Eros me ayudó y seguimos corriendo,sentí tanta adrenalina que ufff, llegamos hasta el auto y subimos para luego salir disparados de allí,por el retrovisor pude ver como las patrullas llegaron a la empresa,oh valla de lo que nos salvamos.

- espero siempre ver esa sonrisa en tu cara- escuché el susurro de Eros.