23.

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Abrí la puerta de mi casa cansada, ahora tocaba entrenar sola pues el sexto está entrenando a Boruto con un nuevo rasengan. Apenas y me dió tiempo de ir y ver a Denki quien no se molestó si no fue todo al contrario, se propuso ayudarme con mi avance con aquella técnica especial que me menciono Kakashi. La verdad agradezco mucho su apoyo, incluso me acompañó a ver a mi difunta amiga.

Talle mis ojos cansada y con ansias de tomar un baño caliente para relajar mis músculos. Al darme la vuelta ahí vía Sasuke, sentado en la mesa como si estuviese esperando a alguien. Lo ignore y camine hasta el baño.

—_____, necesito hablar contigo.— Habla prontamente acercándose a mi.

—¿Que quieres?

—Sakura se ofreció a entrenar a Sarada el día de mañana.

—¿Y eso que tiene que ver conmigo?

—Kakashi me dijo que sueles entrenar con el diaria mente y como ahora está entrenando con Boruto pensé que podría...

—Escucha. Es lindo que quieras ofrecerte ayudarme, pero no gracias, puedo entrenar sola.— Bueno no tan sola, tengo a Denki ayudándome.

—Sakura me contó lo que hicieron tu y Mitsuki. Abandonaron la aldea sin el permiso de Naruto.

Genial, mis esperanzas de tomar una ducha caliente se fue a la basura, volteo a ver a Sasuke seriamente. 

—Han pasado dos meses y ¿hasta ahora te vas enterando?— Me burle. Sasuke pareció tomarlo muy mal pues su expresión sería no cambiaba.

—Tenía asuntos que atender.

—¿Porque tanto interés en lo que haga?— Interrogó fastidiada.

—Solo me preocupas.

—¿Preocuparte? te fuiste durante 12 años y vuelves como si nada, sin dar una explicación del porque te fuiste, sin siquiera escribirnos o llamarnos. Técnicamente nos abandonaste para tu dichoso viaje.

—Sabes que no fue así.

—¿Entonces como fue? nos hiciste esperar durante toda nuestra niñez para verte, ahora vienes a decir que te intereso a si como si nada.— Volví a caminar no sin antes de mostrarle mi dedo de enmedio.—Vete a la mierda, Sasuke.

Le di fin y me fui al baño molesta. Ahora sí le importaba, después de 12 años de abandono sin saber nada de él. ¿Que? ¿Acaso cree que lo voy a perdonar como Sarada? ¿actuar como si no hubiese pasado nada? realmente lo odio. Abrace mis rodillas molesta haciendo burbujas bajo el agua. Pronto mi celular sonó, indicando que alguien me había enviado un mensaje. Lo leería más tarde.

Salí del baño ya puesta la pijama. Mire a Sarada salir de muestra habitación, si "nuestra", desde que nos mudamos a este departamento solo habían dos habitaciones. Ahora Sarada y yo compartíamos cuarto, pero claro, con camas separadas. Ella solo me miró fijamente lo que me hizo fastidiar un poco.

—¿Tengo algo en la cara o que?— Rompí el silenció.

—Se que es algo repentino, pero. ¿Cómo tuviste tu Sharingan?

Su pregunta me sorprendió mucho, bueno, no tanto ya que sabia muy bien que algún día se atrevería a preguntarme algo así. Mire mi teléfono y me encamine a la habitación.

—Secreto.

—Eso no responde a mi pregunta...

Le cerré la puerta sin nisiquiera responderle. Nunca contaría lo que hize, nunca dejaría de tener este pesar dentro de mi. Lo único que me mantenía al tanto era Denki, gracias a el sentí más tranquilidad, gracias a el ya no me siento sola incluso con amigos... ya nunca me sentí así. Cómo había pensando, fue el que me envió un mensaje, bueno fue una llamada perdida.

Marque al número con la intención de escuchar su voz, al menos algo para que me animase. Contesto después de los tres tonos.

«—¿Hola?»

—Hola, lamento no haber contestado la llamada. Estaba tomando una ducha.— Me senté sobre la cama.

«—Esta bien, solo quería saber cómo estabas.»

—Bueno... Estoy cansada y con ansias de dormir. ¿Y tú? ¿algo nuevo?

«—¿Nuevo?, Si nos vinos hoy, técnicamente sabes todo lo que hize el día de hoy.»

—Lo decía sarcásticamente. En fin, mañana no hay misiones... ¿tienes planes?

«—Tengo pensando hacer un misión secreta con Iwabee y Metal, pero es solo los tres, lamento que no puedas venir.»

—Esta bien, visitaré a Kaori mañana, ya es momento de cambiar las flores.

“—Puedo acompañarte cuando regrese, incluso le llevaré flores también.»

—Que considerado...— Me calle al oír unos pasos fuera de la habitación

“—¿_____-san?

—Me tengo que ir, mañana hablamos.

Sin dejarle despedirse de mi colgué rápido y fui abrir la puerta, topado con la sorpresa de ver a Sasuke apunto de tocar. Lo mire fríamente.

—¿Que se te ofrece?

—La cena ya está lista.

—No tengo hambre.— Le cerré la puerta en la cara.

No quería tener ningún involucramiento con el. Tampoco quería escuchar sus excusas o disculpas por haberse ido. Lo odio, lo odio tanto, lo odio por haberse ido. Volví a mi cama y dejé el celular en mi escritorio ya lista para dormir.

Mañana será otro día.

ANNOYING |Denki Kaminarimon.|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora