꧁𝓔𝓁 Príncipe 𝓓e Corea Del Sur꧂ (SoonHao)

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─ Hola Kwannie, ¿Qué pasó?

─ Tengo un mensaje de tus padres, dicen que vuelvas a casa pronto.

─ ¡¿Se enteraron?!

─ No, pero dicen que es importante que vuelvas rápido

─ Está bien, me tengo que ir, gracias.

─ Sí, espero que no sea nada grave, cuidate.

─ Sí, cuidate, adiós ─ colgó.

Minghao volvió a la mesa donde Soonyoung y los reyes estaban hablando de lo que parecía ser "cuidados para bebés" y sonrió de ternura al ver que el mayor estaba muy atento, se sentó de nuevo.

─ Perdonen por interrumpir pero, me tengo que retirar, surgió una situación y tengo que volver a casa ─ le devolvió su teléfono a Soonyoung y se paró ─. Si me disculpan.

─ No te preocupes, cuídate. Soonnie, acompaña a Hao a su casa ─ dijo Jisoo.

─ Ve con él, nos vemos pronto Hao ─ se despidió Jeonghan ─ y nos avisan cualquier cosa que pase.

─ Vamos Hao, nos vemos ─ se despidió Soonyoung.

─ ¿No es mucha molestia que me lleves? Puedo tomar un taxi.

─ No es una molestia, paso tiempo contigo y eso me gusta ─ Soonyoung le dio un beso en la mejilla.

─ Bueno, adiós ─ dijo Minghao sonrojado y salieron del jardín.

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Salieron del salón y se dirigieron a la salida del palacio en donde estaba el auto, con rapidez se subieron a este y de inmediato se dirigieron a la casa del menor.

Soonyoung vio a Minghao en silencio, por lo que intentó animarlo ─ No te preocupes, tal vez no sea nada grave, puede que te digan que van a China, después de tu graduación ─ dijo con una sonrisa.

─ No hemos vuelto a China desde que tenía ocho años ─ dijo Minghao bajando la mirada, quería ver a sus familiares de China, los extrañaba.

─ ¿Por qué no han vuelto? ¿No tienen tiempo? ─ preguntó Soonyoung extrañado.

─ Mi padre es arquitecto, papá trabaja de productor musical, por lo que pueden trabajar en la casa, también tienen vacaciones y les pagan bien, por lo que el dinero y el tiempo no es un problema, pero cuando les dije que en vacaciones quería ir a China me dieron un rotundo "no" ─ hizo un puchero.

─ Eso es muy extraño ¿No se llevan bien con la familia de China? Si es muy personal no respondas ─ se disculpó Soonyoung.

─ No, no se llevan mal, de hecho, en las llamadas que tienen, siempre dicen que los extrañan y que quieren verlos, es extraño ─ Minghao se preguntaba la razón desde pequeño.

─ Debe de ser una buena razón por la cual no han vuelto a China, pero tal vez no sea grave, mejor pensemos en positivo ─ le animó Soonyoung.

─ Tienes razón ─ sonrió.

─ ¿Es aquí? 

─ Sí, vamos.

Se bajaron del vehículo para dirigirse a la casa del menor, iban agarrados de las manos, llegaron a la entrada de la casa y Minghao tocó el timbre, ya que había olvidado las llaves.