𝘈𝘵𝘳𝘢𝘱𝘢𝘥𝘰 𝘦𝘯 𝘦𝘭 𝘮𝘦𝘥𝘪𝘰 ᵐᵒⁿˢᵗᵃ ˣ

03. Declaración

Tras haber elegido una película para ver, la paz regresó al dormitorio de monsta x.

MinHyuk fue el encargado de la propuesta y desde luego todos accedieron aunque luego de ver que el tiempo corría y no podían estar de acuerdo con cuál película ver, sólo 5 de ellos terminaron en la sala.

Mientras KiHyun y HyunWoo veían otra film en la habitación, los demás miembros compartían en la sala la misma emoción por ver Avengers: infinity war; JooHeon mantenía entre sus brazos a ChangKyun, HoSeok había ido por la botana, y él junto a HyungWon buscaban la película aunque no pasó mucho tiempo hasta que todo estuviese listo.

—¡Mueve el trasero, HoSeok! Con lo que costó robarla de cuevana y tu que no te apresuras. ¡No la voy a regresar!— anunció el segundo mayor de los presentes.

A los pocos segundos WonHo estaba allí y curiosamente no se ubicó junto a HyungWon como de costumbre, sino al otro lado, dejando a MinHyuk en medio de ambos.

Si no estaba confundido diría que hasta vio una mirada lastimera al pasar pero según él entre ellos todo estaba bien ¿Entonces qué demonios ocurría?

Un suspiro escapó entre los labios de HyungWon y no pudo evitar mirarlo en busca de una respuesta. Por el contrario, el menor sólo miró a la pantalla y allí Min supo que serían unas largas 2 horas.

La película era interesante, pero saber qué ocurría entre sus amigos cautivaba por completo su atención. HyungWon comía palomitas mientras apoyaba su cabeza sobre su hombro, HoSeok, al otro lado, recostó su cabeza sobre la palma de su mano teniendo el brazo flexionado y con un semblante serio, casi aburrido.

Dirigiendo un vistazo rápido a los maknaes y luego a la pantalla supo que era el momento exacto para actuar, nadie estaba viéndolo por lo que en un movimiento brusco hizo saltar el bote de palomitas regando la mayoría en el piso mientras se ganaba una mala mirada por parte de Chae.

—¿Y eso qué?

—Escalofrio.— se excusó.— Sé bueno y ve por más.

—Tiene que ser una broma.— rodó los ojos HyungWon— ¡Tú los tiraste!

—Y tú comías, anda. Busca más.

HyungWon, desde luego, murmurando cosas indebidas, se alejó a la cocina.

Uno de dos, pensó MinHyuk. Ahora sólo tenía que deshacerse de HoSeok y su plan estaría en marcha.

Pero el mayor le hacía las cosas realmente difíciles, pues no tenía cómo movilizarlo sin llamar demasiado su atención.

A menos que…

—¡HoSeok creo que se cayó tu ramen en la cocina!— exclamó Min mirando hacia atrás preocupado.

Entre los sonidos de la película y HyungWon preparando más palomitas sería extraño decir que podía oírse algo, pero WonHo estaba tan distraído que desde luego lo creyó y corrió hacia allá.

—Mi trabajo aquí está hecho.— murmuró recogiendo palomitas del piso para seguir con su noche de cine, ahora sólo quedaba esperar.

—Min, podrías quitar el cartel de "Juana te envió 5 fotos" comienza a molestarme.— pidió el maknae. Y no era para menos, pero que se le iba a hacer, de todos modos si no era ella era alguna otra página indebida que le avisaba que una como se llame estaría a un par de kilómetros. El precio de ver películas en páginas ilegales.

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—... No estoy listo para una relación.- dijo HyungWon junto al microondas.

—Ya lo sé, Wonnie. Lo dejaste en claro varias veces y repetiré cuanto sea necesario que no quiero apurar las cosas, iremos de a poco, sólo quiero saber si sientes algo por mí.

—¿Es una broma?— rió sin gracia, típico de telenovela— Por supuesto que sí.

HyungWon miró al piso jugando con sus manos mientras HoSeok se acercaba a él hasta tomar su barbilla y dejar una leve caricia allí con ayuda de la yema de sus dedos.

—Yo te quiero, Wonnie.— susurró HoSeok.

—Yo también lo hago, WonHo.— agregó el otro antes de unir sus labios.

El beso hubiese durado más si MinHyuk no se ahogaba con una palomita, se maldijo mentalmente por eso, pero agradeció ver como sus amigos se alejaban y se preocupaban por él.

—¿Estás bien?— preguntó HyungWon golpeando su espalda.

—Sí— tosió— todo bien.

—¿Hace cuánto estás aquí?— HoSeok estaba realmente curioso al respecto.

—Mis movimientos son tan lentos que puedo ser invisible.— explicó comiendo otra palomita.

—Hola, Min.— saludó ChangKyun de pasada al ir por algo de beber.

—Déjenlo así.— musitó rodando los ojos antes de salir con su botana.

Era invisible, de lo contrario no habría oído la declaración más tierna de su vida.

Y todo gracias a él.

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