< Te salvaste por esta vez >

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¿La víctima? Diana Escobar
Déjame decirte querido lector, que si pensaste que estaban asesinando brutalmente a Delfi, estabas equivocado. Ahora te estarás preguntando como es que Diana llegó ahí, la respuesta es simple, el asesino la traía con el, ¿estaba secuestrada? ¿fue por voluntad propia? eso no lo sabrás, porque después de todo, nadie lo sabia. ¿Y Delfi? Ella se encontraba con los demás en todo momento, simplemente que no dijo palabra alguna, estaba en un shock que parecía interminable, una parte de ella saltaba de alegría, después de todo, seguía viva, pero la otra, estaba viendo como una joven se desangraba el suelo, no sabía que mierda hacer.
Para cuando reaccionó, Manon estaba llorando junto al cuerpo muerto de Diana, Bri consolaba a su prima y Mati estaba hablándole haber si reaccionaba de alguna forma.

D: Por que mierda no fue a mi?

Mg: No es momento de pensar en eso, tenemos que concentrarnos en encontrar a ese mal nacido

D: Tuve que haber sido yo, la D tendría que haber sido de Delfina -la joven sentía una culpa más grande que la deuda argentina-

Brian que escucho ese intercambio de palabras, añadio:

B: No es momento para que te sientas culpable, el ya lo tenía planeado, Diana era la siguiente y ninguno podía hacer nada para evitarlo

Mc: Ellos, tienen razón -dijo mientras se limpiaba las lágrimas con sus manos manchadas de sangre-

Delfi se tranquilizo, lo que decían era verdad, pero aún así, temía, ya que el asesino conocía sus movimientos, el asesino sabía quiénes eran, y peor aún, la próxima letra en la lista era la B.. B de ¿Brian?
El viaje de vuelta al pueblo, fue horripilante, no se puede describir lo que todos sentían, habían visto morir a una joven y no habían podido hacer nada para salvarla, eso fue lo malo, no tenían ni sobreviviente, ni asesino capturado, ¿su plan? había fracasado.
Cada uno volvió a su casa, y ninguno pudo dormir, al dia siguiente, se reunieron en la mañana, querían atar cabos, ver si alguno había visto algo, si tenían otra pista, ahí es cuando Mati, sirvió de algo

Mg: MYA 509 -dijo en seco-

Mc: Que?

Mg: La patente de la camioneta de el tipo, MYA 509

B: Todo esto no tiene sentido, por que no taparia su patente? el quiere que lo encontremos

D: No quiere que lo encontremos -termino de decir y le dio una pitada al cigarrillo que había en su mano- quiere que vayamos atrás de el, quiere jugar con nosotros y luego, tarde o temprano, va a matarnos

Mc: Eso tiene más sentido del que me gustaría creer

Mg: Del tiene razón, el no se está entregando, el quiere que nosotros nos entreguemos a él

D: Exactamente -siguio fumando, eran las 9 de la mañana y era su cuarto cigarrillo-

B: Reza porque el psicópata te mate antes de que el cáncer de pulmón lo haga -dijo mirando de reojo a la fumanchera-

D: Si, creo que prefiero morir por la segunda opción

Mg: No es momento de hablar de Delfina y sus pulmones, tenemos que rastrear esa patente

¿Como lo harían? Ni ellos sabían, pero nada que YouTube no resolviera. Así que luego de unos 10 tutoriales y unos 65 intentos, lo vieron..
Propietario de "MYA 509": Carlos Mazzoni
El grupo no lo podía creer, no podía ser verdad, nadie de esa familia sería capaz de matar a una mosca, o bueno, quizá si, Marcos y Mateo, los hijos del dueño de esa camioneta, se habían metido en peleas por mucho tiempo con muchas personas, ellos habían demostrado poder ser asesinos. Pero Brian, se rehusaba a esa idea, Marcos era como su hermano mayor, siempre los ayudaba con las motos y Ñeñe, el era su mejor amigo, además que alguno de ellos haya matado a Lautaro no tenía sentido, nada encajaba, absolutamente nada.
La pregunta ahora era.. ¿que iban a hacer con esa información? La respuesta, ni ellos mismos lo sabían.

El asesino de las flores amarillasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora