Lena y Kara no habían estado saliendo por mucho tiempo, todo era bastante nuevo para ambas, solo un cambio más en su relación desde que Lena compró CatCo.
Lena estaba de pie cerca del balcón de la antigua oficina de Cat, observando fascinada cómo la lluvia bañaba la ciudad debajo de ella. Kara entró en la oficina y se contuvo justo a tiempo; estaba a punto de decir algo cuando vio a Lena allí de pie, con los brazos cruzados sobre el pecho, apoyada en el marco de la puerta, relajada y en paz. La vista de su novia le robó el aliento a Kara.
Caminando más cerca, Kara envolvió sus brazos alrededor de la cintura de Lena y apoyó la barbilla en el hombro de Lena, instantáneamente sintió que la joven directora ejecutiva se relajaba y se recostaba contra ella.
Permanecieron así por un momento, disfrutando en silencio del sonido y olor de la lluvia, y del calor del otro. Pero de repente, algo cruzó la mente de Kara, haciéndola sonreír. Sabía que Lena era una gran fanática de las películas clásicas y siempre aprovecharía cualquier oportunidad para hacer sonreír a su novia.
Moviéndose para quedar de pie frente a Lena, Kara ajustó el cuello de su novia y dijo: “Tienes que cuidar esa garganta, querida. Ahora eres la voz de un imperio multimedia, ¿recuerdas? El rocío de California es un poco más pesado de lo habitual esta noche”.
Lena se había sentido confundida momentáneamente, pero al instante reconoció las líneas y no pudo evitar derretirse ante las payasadas de Kara. Inclinando ligeramente la cabeza y mirando a Kara como si fuera el mismo sol, Lena respiró hondo y respondió: "¿En serio? Desde donde estoy, el sol brilla por todas partes”.
Kara no sabía lo que había estado esperando, pero la respuesta logró tomarla con la guardia baja, y en ese mismo momento sintió que se enamoraba aún más de Lena Luthor. Ella la atrajo suavemente hacia sí, besando a Lena lentamente, con la esperanza de poder verter en el beso cuánto ama a Lena.
Era normal que Lena se quedara sin aliento cuando Kara estaba cerca de ella, pero cuando se besaban así, Lena se olvidaba por completo de cómo respirar. Con el corazón latiendo con fuerza y la cabeza dando vueltas, Lena rompió el beso de mala gana y apoyó la frente en la de Kara, queriendo estar lo más cerca posible de ella.
Y fue entonces cuando ella lo escuchó.
Kara tarareando suavemente su canción favorita de todos los tiempos.
Lena no era de las que cantaban, encontraba su voz espantosa, pero en ese momento, no le importaba no poder interpretar una melodía; su corazón estaba demasiado lleno para que las preocupaciones importaran. Humildemente, comenzó a cantar: “Estoy cantando bajo la lluvia, solo canto bajo la lluvia. Qué sentimiento tan glorioso, y estoy feliz de nuevo. Me estoy riendo de las nubes, tan oscuras arriba. El sol está en mi corazón y estoy listo para el amor …”
Así como Lena había estado fascinada por la lluvia, Kara estaba completamente cautivada por Lena; Dejando que la voz de su amante llegara tímidamente a su corazón, Kara sonrió y sacó a Lena al balcón mientras cantaba: “Deja que las nubes tormentosas persigan a todos del lugar. Vamos con la lluvia, tengo una sonrisa en mi cara. Caminaré por el camino con un estribillo feliz. Solo cantando, cantando bajo la lluvia”.
Lena no pudo evitarlo, se echó a reír, preguntándose si esto podría sentirse más como una película. "¡Kara!" dijo entre risas, tratando de limpiarse las gotas de lluvia de la cara. "¿¿¿Qué estás haciendo???"
"¡Bailando en la lluvia!" respondió Kara, riendo junto con Lena; sosteniendo la mano de su novia y haciéndola girar suavemente para bailar con ella. "Estoy feliz de nuevo". Kara seguía cantando, pero las palabras la golpearon con fuerza; ella es verdaderamente feliz de nuevo y todo fue por la increíble mujer en sus brazos; la única persona que siempre parece saber cómo mantenerla con los pies en la tierra, mantenerla con ganas de ser un mejor ser humano. “Simplemente cantando y bailando bajo la lluvia”.
La forma en que Kara dijo las palabras... la mirada en sus ojos... Lena la escuchó, la entendió.
Acunando la mejilla de Kara, Lena asintió con la comisura de los labios curvándose en una brillante sonrisa y le susurró: "Solo bailando y cantando bajo la lluvia..." antes de acercar a Kara para darle otro beso.
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