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— De acuerdo, ya es hora de descansar un poco, el día de mañana será muy cansado que el día de hoy. — Shadow se acomodó en su bolsa de dormir y así poder descansar un poco.

Todos miraron a el moreno que con tan sólo cerrar los ojos se quedó profundamente dormido, era ver a un oso gigante que estaba inbernando por lo que los jóvenes soltaron una pequeña y casi silenciosa risa.

— El poder de Shadow es interesante. — Opinó Liron.

El poder de Shadow era muy práctico en situaciones de emergencia, su poder consiste en crear objetos que el imaginaba desde objetos pequeñas hasta objetos grandes que salían desde su espalda, pero como todos los poderes tienen sus desventajas, su desventaja que tenía el mayor son dolores de cabeza y dolores de espalda.

— ¡Es bastante increíble! Es bueno tener a Shadow con nosotros. — Deleitó Rizzo.

— Mi poder es envidiable ¿No lo creen? Todos desearían tenerlo. — Presumió Shadow que seguía acostado y mantenía los ojos cerrados.

Los abucheos se habían hecho presentes en el pequeño refugio provocando risas al mayor.

— Sí, sí ya entendí chicos, deberían dormir también porque ya es tarde. — Dijo el mayor abriendo los ojos para mirar a cada uno de los jóvenes.

— Con tan sólo ver a Shadow, es raro entender que el tenga ese tipo de poderes. — Comentó Midori

— Todos me dicen lo mismo. — Añadió Shadow, en pocos segundos se sentó en el lugar en que se encontraba para poder tener la atención de los jóvenes — Quiero decirles algo importante a ustedes, yo se que no debería hacerlo pero quiero llevarlos a Australia, es un buen lugar para ocultarnos entre todos los habitantes del país, tengo conocidos que nos pueden ayudar pero quiero que sepan que es un camino muy arriesgado ¿Aceptan la propuesta? —

El país de Australia estaba mejor desarrollado que los demás países en el presente, ya que tristemente los demás países habían caído gracias a la tercera guerra mundial que seguían viviendo.

Los hermanos gemelos de inmediato aceptaron la propuesta que Leroy debido a que ellos confiaban bastante a Shadow, la asiática dudaba mucho estar en aquel país sintiendo al llegar a Australia podría ser sumamente peligro para ellos. Midori y Liron se miraban entre sí como si se estuvieran comunicándose con la mirada, en un momento a otro, la asiática se sentía indecisa de aceptar la propuesta pero con tan solo sentir como Liron estrechaba su mano junto con la de su amiga le hizo entender que estaban seguros con ellos y que no debía preocuparse de nada por la razón de que la pareja de amigos estaban juntos.

— Estamos de acuerdo contigo. — Dijo Liron muy seguro de lo que respondía.

— Se que es muy arriesgado para ustedes que son jóvenes y no tienen la suficiente experiencia con las peleas con el ejército de los Anderson pero se que cada uno de ustedes son fuertes para las peleas. — Comentó Shadow.

Era la única opción para poder sobrevivir en esta guerra, pelear era lo único que era necesario, incluso matar a los enemigos también era necesario.

Los hermanos Aksel y Rizzo se miraron entre sí,  como si los dos estuvieran hablando sin mencionar una sola palabra, ambos volvieron a ver a Shadow.

— Creemos en ti, estamos confiados que llegaremos lejos contigo. — Dijo Aksel.

— Yo también confío en ustedes.— Comentó Midori. — Mi padre confió en ti Leroy, estaré con ustedes pase lo que pase. —

Tan sólo escucharlos habían hecho a Shadow sonreír, estar feliz que los hijos de sus amigos lo siguieran o confiaran en el (los hermanos Rizzo y Aksel siempre estuvieron con Shadow), eso le motivaba bastante a él. Leroy observó a Liron como si estuviera pidiendo su respuesta que era tan obvia.

Guardianes de la libertad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora