La historia que no debe ser contada

Capitulo 10

Los aullidos se escuchaban cada ves ma cerca, el bosque empezaba a perder su encanto y se volvía como el bosque que conocia

—Oye ¡sueltala!—Tom apunto a Regulus con la varita a lo que Regulus solto a Isabella y saco su varita—¡Baja tu varita ahora mismo!

—¿Porque lo haría? No te conozco, me estás apuntando con una varita y nisiquiera eres de por aquí, jamás te vimos en la escuela y ahora sales con Isabella y ¿se supone que deba confiar en ti?—El enojo en Regulus era muy diferente al que vi en el comedor, no eran celos era algo mucho más grande

—Regi baja tu varita por favor—Pidió Isabella, Regulus aún no bajaba su varita y no paraba de mirar a Tom.

La verdad me sentía aterrado de estar en este lugar a pesar de que el bosque es hermoso, pero Remus anda suelto y es peligroso que estemos en este lugar

Regulus y Tom seguían peleando y gritando se sobre con quien se tendría que ir Isabella—¡¡Ella se ira conmigo a la escuela porque aquí no es seguro!!—Grito Regulus ya demaciado molesto y estresado

—¡Esta más segura conmigo que en esa escuela contigo!—Tom estaba a punto de lanzar un hechizo pero un gran lobo de más de cuatro metros apareció detrás de Regulus, Tom se colocó delante de Isabella y Regulus delante de mi, Tom lanzó una maldición y lo siguiente que se escucho eran alaridos y gritos.

Narra Sirius.
Cenabamos como era de costumbre, Isabelle y Harry habian salido del comedor y Regulus le hizo una seña rara a James pero el entendio y asintio, segundos despues el salio del comedor. Remus empezaba a sentir los efectos de la luna llena y no había comido nada

—Remus come algo—Ordene y el nego con la cabeza—Remus si no comes te pondras peor—Remus empezó a comer despacio pero al menos comía.

La cena había terminado y todos nos fuimos a la habitacion, nos colocamos nuestra pijama.

—Chicos ya esta sucediendo hay que irnos ya—Dijo James y voltee a ver a Remus el cual se veía muy mal

—Vamos lunático—Se levanto de la cama pero no tenía suficiente fuerza y lo cargué para llevarlo a la casa de los gritos, todos íbamos en silencio y Remus se estaba durmiendo, sabia que no es bueno dormirse cuando se transforme en lobo haci que trataba de mantenerlo despierto.

Llegamos a la casa de los gritos, Harry y Regulus nos seguían lo cual era normal ya que el se encargaba de que nadie nos siguiera—Sirius tengo miedo—Me susurro Remus mientras me abrazaba.

—Tranquilo, todo estará bien la luna llena pasara rápido y volverás a tu estado normal ya veras—Le devolvi el abrazo y acariciaba su cabello, James y Petter se transformaron en animales y yo aún seguía sosteniendo a Remus en mis brazos, lo acomode en el suelo y yo me aleje un poco para que se transformara en lobo y así fue, ya cuando el era un lobo por completo yo me transforme en un perro.

Regulus y Harry se fueron y nosotros salimos por una de las puertas de la casa, el plan de esta luna era vagar por el bosque y después dar un pequeño paseo por el castillo pero no contamos con el hecho de que Regulus, Isabelle, Harry y el novio de Isabelle estuvieran en el bosque discutiendo y los gritos llamaban las atención de Remus; James que también oía la pelea, trataba de distraer a Remus pero el termino llenado al lugar donde provenían los gritos.

Un chico de Cabello negro y ojos del mismo color estaba enfrente de Isabelle, Remus estaba apunto de atacar cuando quien parecía ser el novio de Isabelle ya que se veía igual al chico que ella había descrito, Levanto su varita y lanzó la maldición Cruciatus directamente a Remus el cual al resivir la maldición soltó un terrible alarido, James, Petter y yo habíamos vuelto a ser personas.