Harry era de las personas mas divertidas que Louis había conocido en su vida.
Desde que le habia dado su numero, las cosas habían cambiado de la mejor manera para ambos. Se mensajeaban todos los dias, incluso si no mantenían una conversacion solida, el hecho de que Harry le enviara un mensaje deseándole un buen dia, lo hacia sonreir.
Durante sus descansos, le contaba como iban las cosas en su universidad, la carrera de fotografia era demandante aquellos ultimos años, Louis estaba intentando poner su cerebro en orden ante la idea de que en cualquier momento, haria sus practicas profesionales.Harry, al igual que el, tenia escuela, sus clases de biologia eran algo que Louis vagamente comprendía, pero mientras leia lo que Harry le contaba que habia aprendido, mientras veia las fotos que él le enviaba desde la floreria presentándole cada una de las plantas con esos nombres cientificos... El tambien podia sentir toda esa pasion a traves de la pantalla.
Eso era entre semana, porque en sus dos dias de descanso, ambos se volvian personas diferentes que se enviaban imagenes o videos graciosos, que compartían hobbies que iban desde leer algun buen libro hasta el mini maraton que Harry hacia religiosamente cada domingo.
Fue en uno de esos maratones que, casualmente, volvieron a encontrarse.
🌻
Enero estaba arrasando con el clima, Louis tenia que recurrir a su calentador, pijamas gruesas, y por lo menos dos frazadas gruesas para soportarlo. Bruce y Cliff mantenían sus suéteres en sus cuerpos todo el dia, y por la noche, para comodidad de todos, dormían con el.
Aquel Domingo por la mañana, Louis maldijo cuando alguien toco su puerta, se acurrucó mas entre las frazadas y gruño cuando volvieron a tocar y Bruce y Clifford comenzaron a ladrar a quien estuviera afuera.
Asi que en su pijama azul oscuro, despeinado, y con pantuflas, fue a abrir.
La frescura de Harry lo golpeo igual que el frio de la mañana, y despertó todos sus sentidos.
Retrocedió cuando vio que los perros se lanzaban emocionados a el, y podrían derribarlo junto con las donas y charola de bebidas que cargaba. Louis prácticamente se les lanzo encima para sujetarlos y llevarlos adentro.
—¡Entra, mientras me ocupo de ellos, ponte comodo!
Harry sonrió y entro a la casa, dejando sus provisiones en la mesa de centro y cerrando la puerta despues. Se quito los guantes y dio un rapido vistazo al hogar de Louis mientras escuchaba sus apresurados pasos al fondo.
Estaba comenzando a mirar las fotografias cuando el castaño aparecio en el pasillo.
—Ire a cambiarme, no te esperaba y...
—Me disculpo, crei que seria una linda sorpresa.
—Lo es! Es solo que estoy en pijama.
—Estas perfecto para comer una dona con chocolate caliente, yo soy el que esta mal vestido para la ocasion, pero no crei ser bienvenido si venia sudado y en ropa deportiva
El sonrojo de Louis no paso desapercibido. Mas cedió y tomo asiento junto a el. Tomo el vaso de chocolate y le dio un sorbo, gimiendo por el sabor.
—Es exquisito... ¿Fuiste a Rita's?
Rita's era la cafeteria mas popular de su vecindario, Louis habia ido un par de veces y siempre se sentía flotar por sus sabores.
—Me quedaba de paso... Entonces ¿Me perdonas por perturbar tu sueño, Bella Durmiente?
—Claro, McQueen.
Harry soltó una carcajada y justo cuando Louis dejo su chocolate, lo golpeo con un cojín.
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El chico de las flores. |L.S|
Short StoryDónde Louis vive en Amsterdam, y en un día común, el destino, sus perros, y un penoso incidente lo hacen conocer al chico de las flores.