3. Akiko

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Izuku

Hemos seguido caminando por un cuarto de hora hasta llegar a una cafetería muy linda. Al entrar veo que se le puede añadir que es acogedora, parece la típica cafetería que está cerca de una universidad, a donde los estudiantes van para hacer los deberes tranquilos, o pasar un buen rato con amigos y estar cerca de la universidad.

Ya en el interior vemos a una chica que nos esta llamando con la mano. Al acercarme puedo ver mejor cada detalle de ella, tiene el cabello morado y una piel pálida tal y como la de su hermana, unos ojos gris ceniza claro con las pupilas rasgadas cual gato. Lleva unos vaqueros negros, con una camiseta negra con un personaje de anime que reconozco como Rengoku de Kimetsu no Yaiba, encima de la camiseta una chaqueta de cuero igual a la de su hermana.

-¡Hermanitaaa!- la chica que ahora estoy seguro es Akiko Suzumi, se abalanza sobre Mika, quien casi se cae al suelo.

-Akiko, ya basta. Estas formando una escena.

-Perdona, hermanita.

-Bueno Akiko él es Izuku Midoriya mi compañero de clase- me presenta con una sonrisa –Izuku ella es mi hermana mayor Akiko Suzumi.

-Encantado de conocerla Suzumi-san- le digo de la manera más amable y cordial que puedo.

-Lo mismo digo Izuku, aunque por favor no me llames así solo soy un año más mayor que tú, dime simplemente Akiko- me tiende una mano y yo la acepto gustoso.

-Bueno una vez ya estáis los dos presentados vamos a pedir algo.

Nos sentamos los tres y pedimos tal y como nos ha dicho Mika. La verdad es que salvo un par de rasgos Mika y su hermana no se parecen mucho en lo que se refiere en el aspecto físico y tampoco sé cuál es el don de Akiko, ¿se parecerá en algo al de Mika?

-Izuku pregunta lo que tengas de preguntar- miro a Mika sorprendido de que haya sido capaz de leerme con tanta facilidad.

-Pues veras me estaba preguntando qué, que don tiene tu hermana, porque bueno el tuyo es demonificación y me preguntaba si era algo parecido o algo así.

-Veras Izuku el don de mi hermana- empieza diciendo Akiko- es una anomalía, es decir que eso que ocurre una vez cada no sé cuántos dones. Bueno la cosa es que su don es especial, el mío sin embargo es una mezcla del don de nuestros padres.

-Y, ¿Cuál es?

-Mi don es dibujo.

-Y ¿en qué consiste?

-Como lo explico, ah ya se, veras Midoriya mi don consiste en traer a la realidad cualquier cosa que dibuje.

-Eso quiere decir que si dibujas una espada o una galleta...

-Se haría realidad, mi don no tiene límite por así decirlo lo malo es lo que tarde en dibujarlo y mis muñecas. Si dibujo comida la comida se puede comer, si dibujo un animal el animal cobrara vida, sin embargo, si dibujo una persona solo hago una copia.

-Vaya ese don es ¡increíble!

-Sí, si seguro, de todas formas, mi don es mejor y más alucinante- Mika se ha picado, me pregunto si se comportara así con los demás o solo con su hermana.

-No te pongas celosa, hermanita, nuestros dones son increíbles ya está- se ve que la más madura de las dos es Akiko.

-Akiko, ¿tú que estas estudiando?

-Yo me tome un año sabático y ya empezare a estudiar pronto.

-Bueno basta de hablar de eso, ahora el tema que nos concierne- Mika nos interrumpe y solo hasta ese momento me doy cuenta de que nos hemos ido por las ramas.

Las siguientes horas hablamos sobre mi problema amoroso, Akiko está de acuerdo con su hermana y me ha dicho que ella me ayudara haciendo copias de Todoroki para practicar, después intercambiamos números y seguimos hablando sobre trivialidades.

De camino a la UA hablamos sobre temas un poco más personales y al llegar a la residencia nos despedimos para ir a nuestros respectivos dormitorios a cambiarnos y acordamos vernos más tarde cuando vayamos a almorzar.

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Kirishima

Después de desayunar me dirijo al cuarto de Denki y cuando estoy a punto de llamar veo la puerta entreabierta y escucho cosas que me gustaría borrar pronto de mi cerebro, así que corro tan rápido como si Bakugou me estuviera persiguiendo.

Al llegar abajo me encuentro con Mina y Hanta, nos saludamos y me siento entre ellos.

-Eh Kiri, ¿de quién huías? -me pregunta Mina.

-Huía de lo que está sucediendo en el cuarto de Denki, como no sabía que venía Shinsou.

-¿No te lo contamos anoche? - me pregunta ahora Hanta.

-Nop.

-Pues eso que ha venido, y como la mayoría se han ido a sus respectivas casas han aprovechado y Shinsou se va a quedar al finde y por lo que oigo no malgastan el tiempo- Mina se frota las manos de forma perversa y ya tengo miedo.

-Cambiando de tema, ¿Dónde está Bakugou?

-Se fue a su habitación después de desayunar, murmuraba algo de adelantar un trabajo o algo así, ah y que no quería estar aquí soportándonos.

-¡Gracias Hanta, ahora iré a verlo!

Me despido de ellos con grito y subo a las escaleras hasta la cuarta planta donde se encuentran mi cuarto y el de Bakugou, bueno también hay más, pero eso no importa debo ver a Bakugou, y de camino hago ese trabajo que está adelantando.

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Al llegar entro sin siquiera llamar a la puerta, porque sé que si llamo me dirá que no me cerrara la puerta ya que ya me espera.

-¡Bakugouuuu!

-Eh, que mierda haces entrando así bastardo.

-Solo quería darte los buenos días y ver que hacías- hago un puchero y veo como Bakugou hace un chasquido con la lengua.

-Quieres que te diga que trabajo es y que te enseñe a hacerlo para quitártelo de encima, ¿verad?

-Si, Bakugou eso es justo lo que quería después de darte los buenos días y preguntarte como estas- le digo sonriente, y es que si quiero enamorarlo debo mostrarle siempre mis mejores sonrisas, aunque de todas formas solo salen con él.

-Sientate, extra y te lo explicare, pero solo dos veces como mucho y si no lo entiendes no es mi problema, ¿entendido?

-Si, Bakugou-sensei.

-Bien así me gusta.

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Después de un a rato haciendo el trabajo decidimos bajar a almorzar. Allí solo se encuentran Midoriya, Suzumi, Todoroki, Mina, Hanta, Denki con Shinsou, Ochako.

Entre todos, salvo los dos enamorados, nos metemos en la cocina para hacernos la comida entre todos. Y en una hora ya estamos dando las gracias por nuestros alimentos y comenzando a comer todos juntos.

La verdad me gustaría que fuera siempre así, Izuku está sentado entre Suzumi y Todoroki, luego al lado de Suzumi está Mina con la que está hablando animadamente, luego al lado de Mina está Hanta, quien está sentado a mi lado, Bakugo está a mi otro lado seguido de Shinsou y Denki, y por último Ochako.

Todos estamos tranquilos sin peleas y hablando entre nosotros, quizás fuera siempre así, por desgracia ni siquiera estamos todos.




Y hasta aquí el tercer capítulo, espero les haya gustado.

Sayonara.

Mírame, por favor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora