Disclaimer: The story I tell here about Hiruma Youichi and Agon Kongo is my own invention, and it is not purported or believed to be part of Riichiro Inagaki.'s story canon. This story is for entertainment only and is not part of the official storyline.
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El penúltimo fin, nos arreglamos; claro yo más guapo que el demonio. Nos habían comentando que el bar del conjunto hotelero abría hoy (con justa razón lo cerraron durante el 80% del tiempo de la concentración; nadie iba a controlar a pleno adulto vigoroso y no montarse una fiesta a escondidas de los organizadores). El clima permitía llevar camisas vaporosas y a la primera lista de mujeres que vi pasar el común denominado eran vestidos ceñidos o que en una vuelta podría alzarse hasta por arriba de la cintura.
Como siempre el demonio se rifaba por lo lugares obtenidos, en una de las esquinas vips elevada por unos 5 escalones te permitía cazar cualquier presa desde la entrada que desbocaba en la pista de baile. Las fui enumerando, la primera sería del vestido con lentejuela que solo tapaba lo necesario. Esos organizadores con descaro dejaban entrar mujeres que no había pisado alguna instalación del hotel desde que llegamos.
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Ambos las vimos descender de las escaleras de entrada, cada uno a su modo; yo con mas descaro. — Ahora entiendo que le viste.
Esquive con gracia el pisotón que el demonio me propinó pero ante el espacio reducido si tuve que morderme la lengua cuando la punta de uno de sus Oxford se impactó en mi espinilla.— No tienes porqué alarmarte, a ti te gusta la chica de los pechos grandes, yo voy por la de las piernas más largas. Son chicas de una noche, tomémoslo. —Algo se dislocó en la cara de Hiruma en una fracción de segundo surgiendo como una mentira una sonrisa de lado, prepotente y hasta su reputa madre de cínica. ¡Bien, el demonio había vuelto!
Fui por ellas, al acercarme tanto por toda la gente que nos rodeaba en la pista recordé que no habíamos estado a esta altura desde el incidente en el elevador, aun siendo japoneses aún a la mas alta le sacaba una cabeza por completo, quien me veía con una sonrisa traviesa camuflajeada en una vista despectiva hacía mi persona.
Conversación en inglés / Conversación en Español
— ¿Qué quieres? — la más chica solo soltó una risita pero la descubrí intentando ver por mi costado al demonio
— Solo invitarles un trago —la mayor busco aprobación en la mirada de su compañera, la cual asintió no sin antes volver a peinar el local buscando algo. Ahí me di cuenta que no era el demonio al cual buscaba y necesitaba información para picarle las costillas a este último— A menos que estén esperando a alguien más —la de cabello castaño dio un pequeño salto al sentirse descubierta pero la mayor bajo sin problemas ese balón. Se abrió paso entre el tumulto de gente y yo tomando de la mano a su par.
