Franklin dormía plácido con esos feos pantalones de pijama con estampado escocés, cuando el timbre sonó abruptamente, después golpes duros contra la madera.
Foggy no se preocuparía por sus padres, los Nelson dormían como roca, de echo, era un milagro que Foggy despertara cuando llamaron a la puerta, quizá aún estaba dormitando.Apresurado bajo, más llevado por el susto que por el detalle de que algún asesino serial estuviera pateando su entrada.
De milagro la mandíbula no se le cayó cuando abrió. Francis Castiglione echo un desastre, Foggy no recuerda haberlo visto así. Las mejillas tenían rastros de lágrimas secas, los puños estaban sucios, como si hubiera rascado en la tierra y Dios, no estaba limpio, el sujeto olía a desodorante y desgracia. Foggy hizo una mueca, nunca lo invitó a pasar... Ahora se lo estaba reconsiderando.—... Frank.— Asintió corto y conciso, Foggy casi podía adivinar el asentimiento siempre recto de vuelta.
Pero a cambio obtuvo un gemido, similar al lamento de un perro, con las comisuras tirando para el suelo y las cejas cargando casi el mes que llevaba sin dormir bien. —... Nelson.—
El rubio era blando, tenía corazón de pollo y no pudo evitar hacerse a un lado porque no iba a dejar a un pobre diablo parado en el frío de la noche. Frank entró arrastrando las botas.—Frank ¿Qué haces aquí?— Foggy preguntó cuándo cerró la puerta detrás de él.
El mayor negó la cabeza sin despegar la mirada del piso. —Max no puede dormir porque perdió su hueso.— Foggy casi se va para atrás, juraba que estaba a punto de confesarle un homicidio. Un hueso perdido, no inventes Frank.
—¿Qué?—
—Estaba en casa y Max comenzó a llorar porque perdió su hueso y lo busque y no estaba...—
Dudando de si acababa de decir una metáfora o literalmente estaba destrozado por un hueso, Foggs tanteó el terreno.
—... Y... ¿Quieres que te ayude a buscar ése hueso?—
—¡Olvida el estúpido hueso!—
Foggy sin duda de odio porque maldijo en voz baja, e iba a arremeter contra Castle. Pero Frank ya se había echo del sofá más grande y arrebataba contra los cojines hasta conseguir el más acolchonado... dónde... comenzó a llorar... Echo bola con las botas sucias en el forro del sofá... Mamá lo iba a matar. —¿Qué... Frank?... Rayos, Frank lamento lo que pasó con Matty pero...—
—¡Quiero volver con Matt!— Gritó amortiguado por el colchón.
—Pero si estuviste de acuerdo con cortar, ya hasta novia tienes y...—
—¡Nooo no tengo novia, ésa loca dice mierdas!— Tomó a Foggy desprevenido cuando levantó la cara mojada y tiró de su pijama con un puño firme y lo obligó a sentarse frente a él en la mesa de centro. — Yo- yo ni siquiera... Franklin ni siquiera puedo dejar de dormir con Max porque me da frío y no puedo descansar, rojo- el ... Él me abrazaba y me acariciaba el cabello porque me dan pesadillas y... Mierda... ¡ MIERDA MIERDA!— Y por cada "mierda" una patada iba contra el brazo del sofá debajo de su pesada bota. Foggy si se alarmó, no lo quiso demostrar... Bueno, no hasta que escuchó un "crack".
—¡Eey ey, tranquilo! Mierda me quedo sin sala!— . —Gordo TIENES QUE AYUDARME.— Se escuchó como una orden pero con la cara pegada al cojín, cualquier lamento pudo haberlo sido.
Foggy solo se exaltó más. Si Matty sabía que Frank Castle estaba en su sala llorando como un bebé en posición fetal gritando que lo quería y no podía dormir por eso, y él no se lo avisaba... Estaría relativamente muerto. —¡¿Y por qué yo?!— Las patadas de detuvieron pero los gritos continuaron contra el cojín. —¡Porque Rojo no me quiere ver!... y- y creo que si se da cuenta que soy bueno y tú estás de acuerdo, me va a dejar acercarme...— Foggy suspiró cuando Frank levantó el rostro arrugado en un gesto de desesperación.
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Quiero volver con Rojo
RomanceMattew y Frank están juntos desde hace 1 año y 9 meses, pero la relación se calienta de más por los celos de Franky y la incapacidad de Matty de soportar los gritos. Gracias a una última discusión, cortan. Pero... Un par de canciones, un Frank ebrio...