Me marcho 👋

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Le digo a lucero que jamás vuelva hace esto, así que le digo que hoy mismo me regreso a casa ella solo me dice que está bien. Así que le digo que por favor se salga de mi cuarto.

Me quedo en mi cuarto sola en el piso sentada mal pensando en todo lo que está pasando, cojo valor me visto y recojo mis maletas y me marcho.

Siento que todo esto fue una muy mala idea así que solo quiero llegar a casa y dormir en los brazos de vero. No le pienso decir nada porque sé que si le digo algo la perderé para siempre. Y no quiero eso.

Pasan horas y llego tomo un taxi y me dirigió hacia la casa. Cuando llegó vero estaba haciendo la comida. Y escuchando música.

Vero: amor que haces aquí ?

Yo solo me balanceo sobre ella y la comienzo a besar, la cargo y me dirigió así el cuarto le digo lo mucho que la amo. Subimos al cuarto. Y ya íbamos a tener sexo.

Cuando de pronto le digo que se detenga.

Vero: porque qué pasa ?

Estoy muy cansada, ahorita lo hacemos.

Vero: entonces porque llegas y me tratas así para después decir que no? Ay por Dios

La verdad es que no estaba cansada solo me sentía sucia y tenía temor de mencionar a lucero mientras ella y yo mantuviéramos sexo.

Pasan 2 meses y vero y yo no tenemos sexo no porque ella no quiera si no porque ya nada era como antes en mi todo había cambiado. Y no quiera seguir lastimando a vero.

         ~Narración Veronica-

No sé qué le está pasando a Ana pero ya no es la misma después de que se fue de viaje ya no me quiere tocar parece que le doy asco.

He comprando un millón de ropas sexy solo para ella y cuando me la pongo que pienso que pasaremos una noche hermosa, siempre me dice que está cansada, o que mañana pero nunca quiere la verdad siento que no doy más.

      ~Narración Ana Gabriel-

No sé qué hacer lucero no se cansa de llamar no quiero perder a vero. No sé qué carajos hijo la verdad siento que la voy a perder. 

Lucero estaba molesta porque yo no le contestaba las llamadas.  Decido no contestarle más.

En la noche vero está durmiendo y yo solo me quedo mirando lo hermosa que es y que ella no merece nada de lo que le estoy haciendo. Me acuesto a su lado y le abrazo.

A la mañana siguiente me despierto y veo a vero frente a la casa con lágrimas en su ojos y un sobre en la mano.

~𝐄𝐥 𝐚𝐦𝐨𝐫 𝐪𝐮𝐞 𝐧𝐮𝐧𝐜𝐚 𝐬𝐞 𝐚𝐜𝐚𝐛ó ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora