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Kakashi veia de reojo a Iruka mientras conducía, sabia que estaba nervioso, el mismo lo estaba por esta luna de miel, sin embargo, había algo más, parecía ido y triste, tal vez apenas lo conocía, pero sabía leer a las personas e Iruka no mostraba muestra de resistencia, decidió dejar de pensar en eso y seguir conduciendo, en una vuelta Iruka toca su brazo con cuidado llamando su atención

-Por favor entra en esa desviación, tengo que ver a alguien-

Kakashi siguió sus ordenes y dio media vuelta, condujo por unos minutos mas cuando pudo ver a lo lejos una casa realmente amplia, con un jardín hermosos, esa aun estaba iluminada y unas personas al parecer cenando fuera

- ¿Quiénes son? -

-Estudio para ser maestro y psicólogo, como servicio social me toco dar tutorías a niños con problemas, el es uno de ellos, se llama Naruto y tiene TDAH ademas de personalidad múltiple, tal vez dos ademas de él, así que vine a avisarle que no vendré por un tiempo-

Kakashi se asombro ante esto, aquel chico estaba lleno de talento y sorpresas, vio como el moreno bajo del carro acercándose al jardín, en cuanto el niño pequeño y rubio lo vio corrió hasta el lanzándose en brazos y sonriendo

-Iruka-Sensei usted vino, ¿Qué paso con la boda a la que iría?, no me digas que me llevaras para poder jugar con los otros niños-

-No Naru, yo me voy amm, a otra parte, solo quería avisarte que no podre venir por un tiempo, en cambio vendrá Kurenai a enseñarte sobre los colores, los animales, los números-

Naruto se quedo callado y las lagrimas empezaron a salir de sus ojos, un puchero se creo en su cara al saber que su maestro lo estaba abandonando

-Lo sabia usted no me quiere, solo soy un mounstro para ti-

Una mujer pelirroja se levantó de la mesa y se acercó al pequeño, pero este se alejo

-Usted me dijo que me quería y ahora me abandona-

-Naruto no me iré por mucho tiempo-

Iruka tomo a Naruto en brazos y lo acerco a su pecho calmando los sollozos del niño

-A mí también me duele dejarte, pero descuida regresare y te traeré algo, ya verás-

El pequeño se separo de su maestro recibiendo un beso en su frente, con dolor se encamino hacia su madre viendo como poco a poco Iruka se alejaba, este llego al carro y cerró la puerta, soltó un suspiro enorme por la situación

-Mil perdones Kakashi, era la última parada-

Kakashi miro a Iruka atentamente, la forma en la que trato al pequeño le recordó a su madre, y también recordó que la ultima vez que la vio sucedió lo mismo

-Tráelo-

- ¿Disculpa? -

-Ni el pequeño ni tu estarán felices, pídeles permiso a sus padres y tráelo-

A Iruka se le ilumino la cara de alegría, salió lo más rápido que pudo del auto hacia la casa, Kakashi sonrió ante la imagen de su esposo

Iruka termino de arropar a Naruto el cual ya estaba dormido en la parte trasera del coche ocupando la maleta del Hatake como almohada

-Realmente no puedo creer que si le dieran permiso de venir-

-Ya lo he tenido algunas veces en mi casa, sus padres confían en mi para cuidar a este pequeño- Iruka volteo a ver a Kakashi el cual manejaba por la carretera a oscuras- Y bien ¿A dónde vamos? -

- ¿Conoces el mar? -

-Si, de hecho, cuando era pequeño solía pasar las vacaciones en la casa de mi mejor amiga Anko, ella vive cerca de un puerto-

-Valla hablas con mucho cariño de ella, ¿Y dónde está ahora? -

-En su boda, hoy se casó, su fiesta fue en el salón Groaste-

-Valla, eso es algo curioso, pero bueno dejando de lado eso, ¿Qué hay del pequeño?, dijiste que eras su maestro-

-Así es, muchos no saben controlar niños, no entienden que son eso, niños, no adultos pequeños, ellos tienen energía porque quieren descubrir el mundo y sus posibilidades-

Kakashi sonrió ante esas palabras, todo en Iruka era como él había soñado a su pareja, guapo, modesto, amable, inteligente, y amaba los niños, sin duda no había nada más que desear

El sol del amanecer le pego directo en la cara, la música en sus audífonos aislaba todo ruido de afuera, a lo lejos miro la entrada de la mansión de verano que su padre le había regalado por su luna de miel, con cuidado estaciono el carro en la entrada apagándolo, se quitó los audífonos y volteo a su lado, en el asiento del copiloto su ahora esposo dormía profundamente ocupando como sabana el saco de su traje de boda, en la parte trasera Naruto chupaba su dedo pulgar mientras dormía abrazando su maleta, sonrió ante el pensamiento de ser una familia, una nueva y feliz, con precaución bajo del coche y abrió la cajuela bajando algunas maletas de el y el pequeño, ya que Iruka no tenia equipaje, cerro la cajuela y se dirigió a la casa abriendo la puerta y dejando las cosas en la sala, regreso afuera y abrió la puerta del copiloto, acerco sus labios al Oído de Iruka y susurro

-Oye despierta, no puedo cargarlos a ambos hasta la casa-

Iruka algo desorientado despertó viendo al hombre frente a él, con un ligero asentimiento de cabeza salió el carro, al sentir el frio se coloco el saco blanco completamente, mientras espero a Kakashi el cual abrió la puerta trasera del auto y cargo a Naruto en brazos

-Vamos entremos-

Iruka entro detrás de Kakashi a la casa, se dirigió a la sala donde el Hatake había puesto las maletas, se dirigió a los sillones de terciopelo rojo y se dejo caer como un costal de papas

-Solo hay una habitación preparada, creo que seria mejor que duerman allí ustedes dos, yo buscare donde dejar las otras cosas-

Iruka asintió levantándose del sofá para después acercarse al Kakashi y quitarle a Naruto de los brazos, lo cargo y arrullo, con cuidado empezó a subir las escaleras hasta la parte de arriba dirigiéndose a la habitación principal, abrió la puerta y entro, adentro había una cama enorme y realmente blanda, dejo a Naruto sobre esta y volteo hacia la puerta donde Kakashi se encontraba recargado

- ¿Por qué no vienes?, has conducido toda la noche-

-Creo que seria mejor si acomodo las cosas, ademas no quiero molestarlos-

- ¿Molestarnos?, vamos Kashi en esta cama podrían caber diez personas más, ademas estas cansado –

Sin poder negarse Kakashi camino por la habitación y se acostó sobre la cama, justo a lado de Naruto el cual dormía profundamente, Iruka se quito el saco del traje y se acostó al otro lado de la cama, poco a poco empezó a quedarse dormido

FamiliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora