Desde el fallecimiento de Jay y Fizzy, madre y hermana de Louis, entró en un cuadro depresivo en el que en ocasiones le ha insinuado a Harry sobre como sería su vida si el las volviera a ver en donde ellas se encuentran. Harry ha tratado que Louis tenga la mejor ayuda posible, hay días en los que todo parece normal, "Irreal" lo describe Harry, pero hay otros días en los que todo vuelve e inclusive peor. Harry no creía que Louis tuviera una depresión porque decía que no lo veía llorar, sin embargo, se dio cuenta que no necesariamente tiene que haber llanto para que te des cuenta que hay depresión.
Harry lo ha tratado de llevar con la mayor discreción, pues no quiere que sus familiares y amigos cercanos intervengan o empeoren las cosas.
Era un sábado por la noche cuando llegaron a casa después de un largo día de trabajo. Harry, como todas las noches, preparó un té para ambos y se sentaron en la mesa.
Louis se veía cansado, no porque lo estuviera, sino porque la vida no lo ha tratado bien.
Harry tomó su mano y le dio un pequeño beso -¿Cómo te fue hoy con la doctora?- preguntó con una voz suave
Louis se encogió de hombros e hizo una media sonrisa -Bien- respondió
Harry lo miró triste, pues sabía que la doctora le comentó que su obsesión por querer ver a su madre y hermana habían crecido más el último mes- Sabes...- dijo- te amo mucho y no se que haría sin ti, a pesar de nuestros defectos y diferencias, creo que eres el mejor chico con el que pude haber estado, y me siento tan feliz de que seamos solo uno
Louis miraba a la mesa y esbozó una pequeña pero triste sonrisa
-La vida no ha sido buena mucho menos justa, pero eres fuerte...-dijo Harry apretando la mano del chico- ¿sabes por qué?- Louis lo miró a los ojos y negó-... porque estás aquí... conmigo y eso es todo lo que yo quiero ahorita, que estemos juntos, queriéndonos tanto como siempre lo hemos hecho
Louis sonrió y a Harry se le escurrió una lágrima, pues, era la primera vez en días que veía una verdadera sonrisa
-Te amo- dijo Louis apretando la mano del chico
15 minutos después, ambos terminaron sus tazas de té y se dirigieron a su habitación para dormir. Harry tomó un baño como de costumbre mientras Louis solo se lavó su rostro y se quedó mirandose a sí mismo en el espejo, escena que Harry vio
-Oye..- dijo Harry haciendo que el chico volteara- ¿no quieres darte un baño?- Louis se negó pero se quedó viendo al chico de una forma tan dulce, una forma en la que ya tenía tiempo que no hacía y lentamente se fue quitando lo que traía puesto, haciendo que Harry sonriera
-El agua está muy fría- dijo Louis abrazandose a sí mismo
Harry sonrió- Ahora hago que se caliente- dijo y abrió la llave del lado derecho de la regadera- ¿así está mejor?
Louis dejó que el agua tocara su mano y asintió. Harry lo tomó de la mano y ambos comenzaron a ducharse. Hacía tiempo que no tenían un momento así y Harry se sentía el hombre más feliz del mundo. De un momento a otro Louis tomó agua con sus dos manos y la aventó al rostro de Harry, cosa que hizo que ambos rieran.
Harry siempre ha sido tan cuidadoso con Louis, realmente haría cualquier cosa por el con tal de que él esté bien. Harry tomó el estropajo de baño -¿Puedo?- Preguntó a Louis quien asintió
-Sabes que si- respondió
Harry comenzó a tallar la espalda del chico y lo hacia con tanta delicadeza que Louis solo cerraba los ojos. Harry prestaba atención a los lunares de la espalda de su chico mientras esbozaba pequeñas sonrisas- Eres tan hermoso- dijo
