Inefable.

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En la mañana temprano, la débil luz del amanecer se filtró por las ventanas y por las cortinas que ondeaban por la brisa mañanera, pegando justo por unos párpados que se encontraban ligeramente dormidos aunque no por mucho.

Shen Qingqiu arrugó la frente y los ojos, trató de cubrirse con las cobijas pero aún en su estado aturdido–medio dormido sintió que algo no estaba bien.

Su cintura se sintió ligera, algo faltaba.
Esos fuertes brazos que normalmente lo rodean toda la noche hasta el amanecer, no estaban.

Shen Qingqiu giró y efectivamente, Luo Binghe no estaba a su lado.

Frotándose los ojos, lentamente se sentó en la cama, su cabello desordenado deslizándose por sus hombros. Bostezó y con ojos entrecerrados se quedó unos segundos mirando a la nada mientras aún seguía tratando de levantar esos párpados pesados!.

Pensó que seguramente Luo Binghe se levantó primero para ir a preparar el desayuno, pero eso tampoco podía ser, no importa cuántas veces tratara de despegarlo, Luo Binghe se negaría y se aferraría a su espalda con tal de no levantarse y seguir abrazándolo.
Pero cuando sus ojos recorrieron hacia una esquina, pudo notar el desayuno en la mesa.

¿Cómo era posible? ¿Ese niño en serio se levantó tan temprano para preparar el desayuno?.

Aún viendo el té y la sopa en la mesa, podía ver algo ligeramente flotando sobre ella, claramente aún estaba caliente, por lo que no fue preparado hace mucho tiempo, pero aún así no había señales de Luo Binghe.

Después de cambiarse a su típica vestimenta verde, se sentó para desayunar, esperó un poco más pero el hambre lo ganó... Acabó la sopa rápidamente.
La calidez pasando por su garganta, el ligero sabor de las verduras en sus papilas gustativas, estómago lleno.

«¡Mierda! Realmente bueno! Tan bueno que quiero llorar!»

Luego de haberse acabado todo, reincorporándose, se puso a pensar ¿Por qué Binghe salió así? ¿Algo malo había pasado?.

No sabía con exactitud las respuestas ahora, pero supuso que tenía que ver algo en su palacio, que conociendolo, viéndolo dormir pacíficamente no lo despertaría solo para avisar que saldría un rato, o al menos después de que haya solucionado todo, le diría.

Shen Qingqiu pensó por mucho tiempo, hace días llegaron al pico Qing Jing, solo para que Luo Binghe pudiera descansar un poco en la apreciada cabaña de bambú y Shen Qingqiu pudiera encargarse de algunas cosas de la secta mientras tanto,  pero ahora que no tenía nada que hacer y Luo Binghe había vuelto a su palacio... No pensó más.
Tomando su abanico, se dirigió al lugar.

No le tomó mucho tiempo en llegar de todos modos.

Mientras subía por las escaleras con una mano en la espalda y abanicándose lentamente, mirando de manera discreta de aquí para allá, no había nada raro. Solo algunos demonios de bajo rango que pasaban por ahí y cuando se topaban con él, inclinaban ligeramente la cabeza como un saludo y Shen Qingqiu se los devolvía.

Lo normal.

–“¿Luo Binghe?"

Cuando entró al salón, inclinó un poco la cabeza y llamó su nombre. Pero no llamó precisamente para que Luo Binghe lo escuche, simplemente mencionó su nombre en un tono interrogatorio... ¿De acuerdo? Ah! Quién sabe!.

Para para la sorpresa del maestro inmortal, su discípulo no estaba ahí tampoco.

«¡A la mierda con esto! ¿Qué es? ¿El juego de las escondidas?Ese mocoso-»

–"¿Busca a nuestro Señor?"

La voz de un suborbidado de Luo Binghe lo tomó por sorpresa, demasiado por sorpresa, si no fuera porque estaba regañanado mentalmente a ese discípulo suyo y manteniendo su postura, realmente lo hubiera golpeado con el abanico.

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⏰ Última actualización: Jan 29, 2022 ⏰

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