Intelectual e Hiperactivo

1.1K 136 123
                                    

.

.

.

.

Nunca le había agradado consumir frutas o verduras, siempre prefirió las comidas rápidas como el ramen instantáneo o alguna que otra pizza comprada. Ese día, por pedido de su exasperante madre, comía una manzana verde sin muchas ganas sentado en las gradas del patio de su colegio. Estaban en el momento del recreo, y le relajaba bastante tomarse un tiempo a pesar de no estar disfrutando aquella fruta un tanto ácida.

A su lado, estaban sus compañeros de fútbol americano; Shikamaru, Lee, Shino, Kiba y Neji. Habían sido amigos desde que tenía memoria, eran inseparables desde la primaria. Todos vestían un jean azul oscuro y, sobre la camisa blanca, una campera en representación a su equipo de fútbol; color roja con franjas blancas en sus mangas y cuello, y una K en color azul que abrevia el nombre del colegio al que insistían, Konoha.

A lo lejos, veía a todas las personas a su alrededor. Algunas de las muchachas al hablar entre sí giraban a verlo con una media sonrisa en su rostro, Naruto siempre ha sido uno de los "populares" en el colegio, conocido por su buena estadía a la hora de representar a la institución en partidos y, además, por su evidente hiperactividad.

Parecía ser el sueño de cualquier persona cuyo gusto sea de hombres. Cabellos rubios, que casi siempre estaban húmedos puesto que se duchaba antes de ir al colegio, y notablemente despeinados que le daban un toque atractivo, ojos claros color celeste cielo que iluminaba a cualquier persona que pasaba por su lado y una sonrisa perfecta cada vez que alguien lo hacía morirse de la risa y lanzaba una sonora carcajada. Sí, básicamente un Adonis.

Quizás todos pensaban que era algo distraído al no notar los evidentes coqueteos que le enviaban las chicas más guapas del colegio. Pero la realidad es que, a pesar de saber del comportamiento de ellas, tenía a una persona especial en el corazón que ocupaba todos sus pensamientos día y noche.

¿Para qué quería a alguien más cuando tenía a la persona más hermosa, tierna, cariñosa, amable y compañera a su lado? Ya lo tenía todo, no necesitaba a alguien más. Su corazón ya le pertenecía a alguien más.

Una pelinegra con reflejos azules en sus cabellos se acercó a él. Le sonrió, él le devolvió la sonrisa, y escondió un mechón detrás de su oreja luego de ver a aquel rubio de sueños.

Naruto bajó de las gradas luego de saludar a sus amigos y se acercó a ella. Comenzaron a caminar por el patio ganándose la atención de todos los yentes y observadores de aquella escena. El chico popular que todos admiraban y elogiaban, caminando tranquilamente con las manos en los bolsillos de su campera junto a la chica bonita y adorable que se ganaba el corazón de cualquiera.

—Hinata, me quiero ir a casa ttebayo. Estoy cansado y todavía tengo entrenamiento cuando terminemos las clases. —Hizo un puchero. La mujer rió en tono bajo luego de ver su gesto.

—Tranquilo, Naruto, una vez que llegues a tu casa te ducharas y descansaras como te lo mereces. —Le alentó una vez que caminaban por los pasillos de la institución.

Los recreos en su colegio duraban unos veinte minutos de los cuales todos los disfrutaban como si serían los únicos momentos libres antes de volver a la prisión. Y, a pesar de que Naruto amaba los recreos, prefería volver a su salón unos momentos antes de que el timbre suene y los alumnos causen alboroto.

Cuando doblaron en uno de los pasillos, Naruto veía el techo de la institución con fatiga, realmente estaba cansado ese día puesto que se quedó hasta tarde chateando con su pareja y no pudo dormir mas que tres miserables horas. Odiaba ir al colegio por las mañanas.

Naruto Y Sasuke [One-shots]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora