Meditó la situación, y habló con su familia. Su madre fue clara.
-Conejito no te voy a dejar solo en casa, jamás, iremos ahí contigo o vendrás aquí, es más debemos decorar la habitación de mi nieto -
-Eso es obvio Win, Mesa y yo estamos buscando colores lindos para la habitación - su hermana Mintra le mostró la enorme colección de hojas de colores de pintura que ya tenía planeado -
-¿Desde cuándo tienen eso? - señaló la paleta de colores -
-Cuando dijiste que nuestro bebé es niño - no pudo evitar sonreír -
-Tu fiesta de despedida es mañana y el lunes tu cumpleaños, y tendrás un día para ti, te organizamos un día en un spa especial para gestantes así que no tendrás que sentite raro, te darán masaje con manicura y pedicura, mascarillas para el rostro y para tu vientre, debes cuidarte y tratar de humectar tu piel -
-Pero ¿Y si mi esposo planeó algo? - sabía que Bright tenía algo para él, lo conocía -
-No te preocupes Winnie, todo eso será por la mañana así que estarás libre en la tarde - en verdad estaban planeando todo -
-Entonces está bien - Mick puso sobre la mesa una caja - ¿Y eso qué es? -
-Vamos a pasar más tiempo juntos, como antes, así que conseguí mascarillas coreanas de todo tipo, se que la piel se te puede secar en esa etapa, así que conseguí lo mejor además de parches para ojos, te va a encantar - a veces amaba a sus hermanos -
Win había aceptado el trato de dos semanas más de trabajo, y ese plazo se cumplía el viernes, no iba a ir a la junta al edifico de Bright, habían enviado todo a media semana y mientras el no estuviera sería así, habría un mensajero. Además su cumpleaños estaba tan próximo, ahora ya tendría veintisiete, aun recordaba el cumpleaños de su esposo hacia casi dos meses, habían tenido una noche mágica de las pocas que habían disfrutado cuando aún podían hacerlo sin que Win sintiera que iba a parir. Ambos eran hombres maduros, o lo intentaban. Bright tenía planeado algo pequeño para su esposo, solo con familiares y amigos muy cercanos, y eso ya significaba mucha gente.
-Baii - quería ir con pantuflas a su despedida - Quiero ir con tenis -
El nombrado asintió y le ayudó a ponerse los zapatos.
Bright se encargaba de ayudar a Win con todo eso que ya no le era tan fácil, como atarse los cordones.
-No te preocupes, debes de sentirte cómodo - el seguía vistiendo tan bien como le gustaba pero, de vez en cuando se daba un respiro -
-Voy a salir a las tres y volveré a casa - era su último día de despertar temprano y eso lo hacía sentir bien - Puedo llevarte al trabajo y pasar por ti -
-Si tu quieres, sabes que no me molesta pero tendrías que cruzar media ciudad hasta el trabajo -
-No me molesta, vamos, no todos los días puedo llevar a mi esposo al trabajo - ahora que todos sabían de su matrimonio y de su hijo, no tenía que esconderse -
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