When My World Wakes Up Today You'll Be In Another Town

Capitulo XII

Narra Luisa: 

Estabamos sentados en la mesa, no parabamos de platicar, era imposible no sentirse cómoda con este par de mujeres. Podría decirse que todo era perfecto de no ser porque Harry se mantenía serio, no emitía sonido y cada tanto cruzábamos miradas, pero no duraban más que dos segundos ya que ambos la desviábamos. Anne era muy dulce, cada tanto acariciaba mi mejilla.- ¿Quieres mas cariño?- Gemma y yo reímos.-Ma, es la cuarta vez que le preguntas.- Anne sonrió. -Es que no quiero que en su primer cena aquí se quedes insatisfecha.- dijo ella.-Como crees Anne, si la comida estuvo exquisita, tanto que me serví dos veces. Algo raro en mi.- Anne volvió a acariciarme la mejilla. -Gracias cariño, me alegro que te haya gustado.- En ese momento sonó mi celular, era mi madre. Anne me pidió el teléfono para ella atender y así poder convencer a mi madre para que me dejase quedarme a dormir, puse el altavoz y se lo pase. Harry miraba extrañado la escena -¿Alo?- dijo Anne. -... ¿Quien habla?- dijo mi madre. -¿Que ya te olvidaste de mi?.- dijo Anne riendo. -¡Anneeeeeee!- dijo alegre Daysi- por un momento creí que habían secuestrado a mi hija- volvió a hablar ella riendo. -¿Por que se ríe de eso?- le dije a Gemma y ambas comenzamos a reír. Luego me mantuve atenta a la cara que pondría Harry al escuchar lo que su madre le diría a la mía. -Bueno querida, queríamos saber si dejas a Lu quedarse a dormir...- dijo Anne mirándonos esperando ansiosa. Yo solo miraba a Harry, su cara se mantenía neutral. Creí que se sorprendería o haría algún gesto, pero sin embargo siguió comiendo como si nada. -No- dijo mi madre y automáticamente todos nos sorprendimos, hasta Harry. -Oigan es una broma, claro que la dejo- Dile que ya llegamos a casa, por si quiere venir a buscar sus cosas, compre helado, se lo daré para que lo compartan.- Anne sonrió -Claro, tendrías que estar viendo la cara de estos chicos cuando dijiste helado, aquí lo aman. Ahora acompaño a tu hija y de paso voy a saludarte. Besos- se despidieron ambas madres. Salimos de casa de los Styles con Gemma y Anne, buscamos mis cosas, nuestras madres se quedaron charlando y luego volvimos. Entramos a la casa y Gemma se quedo abajo buscando una película de terror mientras que yo subía a colocarme el pijama. Estaba por quitarme la remera, mi abdomen ya estaba descubierto. Cuando de repente.. -Oye Gemma... Yo, lo... siento- dijo Harry quien había abierto la puerta de par en par sin tocar primero. Me clavo la mirada para luego cerrar rápido la puerta. Automáticamente mis mejillas tomaron un tono rosado. Es decir tengo buen cuerpo, pero soy muy vergonzosa. Luego seguí cambiándome, y la puerta se volvió ser a abierta de par en par. Esta vez era Gemma quien había entrado. ¿Acaso nadie golpea antes de entrar?, pensé. - Lo siento- dijo Gemma, y fue ella quien comenzó a cambiarse como si no le molestara mi presencia. -Mama hizo palomitas de maíz- dijo ella. -¡Genial!, ¿que peli veremos?- pregunte curiosa. -El Grito- oh no, pensé. No me quedo otra que aceptar verla. Bajamos a la sala, y allí se encontraban Harry y Anne. La mesa que se encontraba en el centro tenia las palomitas y también había alguna clase de golosinas de marcas que en mi país no existían. Anne comenzó a servirnos el helado y luego puso playa a la película. Estábamos sentados en esa clase de sillón que forman una "L". El orden de como estábamos sentados era el siguiente: Harry- yo- Gemma y Anne. Si las mas miedosas en el medio. Y si, Harry al lado mío. Comenzó la película y no paso mucho tiempo que ya empecé a sentir miedo, cuando la chica subió al ático, comenzó a girar alumbrando con su encendedor buscando a alguien ya que había sentido un ruido. Cuando de repente- AAAAAAAAAH- Gritamos con Gemma. Luego me percate de la posición en la que me encontraba, mis piernas estaban sobre las de Harry y mi cabeza escondida en su pecho. Volví a mirar hacia arriba y allí estaba otra vez su mirada clavada en mi, el comenzó a largar carcajadas junto con Anne. Luego me gire para abrazar a Gemma, ambas seguíamos muy asustadas. Seguían las escenas terroríficas, fue en un momento de la película en el que un personaje se encontraba acostada en su cama cuando comienza a sentir que algo se mueve dentro de las sabanas, estaba muy asustada y tome la mano de Harry sin darme cuenta. El comenzó a acariciarla, cubri mis ojos dejando una pequeña abertura entre mis dedos para poder ver y fue alli que se encontraba la terrorífica cara de la chica, volvi a posicionar mi cabeza en el pecho de Harry, podía sentir sus latidos y su pacifica respiración. Lo cual no podía entender ya que mis latidos estaban acelerados por la película y mi respiración se encontraba agitada. De apoco los latidos de su corazón comenzaron a ser música para mis oídos y el comenzó a acariciar delicadamente mi cabello. Luego me percate de que estaban Gemma y Anne y no sé lo que pensarían así que me volví a aislar, el bufo. Termino la película y prendimos las luces, comenzamos a hablar sobre la película, y sobre otras que también habíamos visto. En algunos momentos ellos me miraban estañados por que no conocían las películas que yo les contaba, y luego recordaba que aun no existían, así que debía mentir diciendo que solo eran conocidas en mi país. No pude evitar alegrarme ya que Harry comenzó a participar de la conversación, la cual se había tornado muy divertida y sin darnos cuenta se hicieron las cuatro a.m. Todos nos fuimos a dormir a nuestros respectivos cuartos, yo decidí dormir en el de Gemma en lugar de el de huéspedes ya que aun tenía miedo, -Gemma, iré a tomar algo de agua-, ella asintió sonriendo y subió las escaleras. Estaba tomando un vaso de agua mirando hacia la puerta que separaba la cocina de la sala de estar, estaba todo oscuro lo cual me dio miedo. De repente sentí que alguien se acercaba y cerré mis ojos, tenía miedo. -¿Que te sucede?- dijo Harry extrañado. Levante la vista, y allí estaba él, su pecho estaba al descubierto y llevaba un pantalón escocés, el cual creo, era su pijama. -Me asustaste- dije riendo, el también lo hizo, camino hacia la heladera y se sirvió un poco de leche en un vaso, me miro y sonrió. Yo largue una carcajada y él me miro extrañado, era muy gracioso el pequeño bigote que le había quedado al beber. Me acerque como lo había hecho en Starbucks pero esta vez con una servilleta. Lo limpie y él se sonrojo. -Ay Styles...- el me miro, levanto su ceja y comenzó a acercarse otra vez, esta vez quede acorralada junto a la mesada de la cocina. El poso su mano en mi cuello y la otra en mi cintura. Comenzó acercarse, nuestras miradas se mantenían juntas, nuestras narices se rozaban, su aliento chocaba con el mío, mire sus labios, en verdad se veían tentadores, húmedos y perfectos, cerré mis ojos pero de repente sentí que su respiración se encontraba en mi oído. -¿Que se siente que te dejen así?- dejo el vaso y se fue, lo perseguí molesta, estaba subiendo la escalera, lo choque sutilmente y seguí caminando adelantándome. Fue en ese momento que sentí que me tomaban del brazo, me tropecé quedando sentada en la escalera y el arrodillado en el siguiente escalón justo en frente de mi. Su aliento nuevamente chocaba junto al mío. -¿Quieres saber algo?-dijo mirándome fijo a los ojos. Yo asentí con la cabeza. Su cuerpo no se despegaba del mío aun, y si bien la posición era incomoda, no quería moverme si eso implicaba alejarme de él. -Me vuelves loco, y es increíble solo te conozco hace unos días y has permanecido en mis pensamientos todo el día desde aquel momento- yo le sonreí. Luego de decir esto, el comenzó a pararse tomo mi mano para ayudarme a hacer lo mismo -Si que te gustan los silencios- dijo al notar que no recibió una respuesta. -No sé que esperas que te diga Hazza, no se cuáles son tus intenciones conmigo, apenas te conozco y no quiero encariñarme y un día...- Me quede callada. -Un día...- dijo Harry alentándome a seguir hablando. -No importa, no quiero que me lastimen, no quiero que si tengo ganas de ver a Gemma estes tu y ver que estas con otra chica, o que me usaste, no quiero.- Harry quedo anonadado.- Entiendo que no me conozcas, pero de verdad crees que tengo malas intenciones contigo?. Ojala me conocieras como soy con las otras chicas para darte cuenta, que como te miro a ti, o como te trato a ti, o como rompo mi orgullo por acercarme a ti, es como nunca lo había hecho antes con nadie.- Sonaban tan leales las palabras de Harry, la forma en que movía sus labios para pronunciarlas...-No lo se Ha- No me dejo terminar que sus labios se posaron en los míos, el hacia un tipo de rose, movía su cabeza y sus labios se movían de un lado al otro, luego comenzó a presionarlos, yo solo me dejaba llevar. pellizcaba mi labio inferior con los suyos. luego yo empecé a hacer lo mismo. Su lengua comenzó a rozar mis labios, cada extremo de mis labios había sido saboreado dulcemente por él, para luego pedir algún tipo de permiso para entrar fue así que hice lo mismo, abrí mis labios aun mas y deje que su lengua entrara para que juntas empezaran un sin fin de juegos, era increíble la coordinación, era increíble lo suaves que eran sus labios, lo dulces que eran sus besos, lo fresco que era su aliento. Luego de unos minutos, el mordió suavemente mi labio superior. -¿Me das oportunidad de demostrarte que no te fallare?- Yo solo sonreí y volví a besar sus labios. Me acerque a su oído y susurre -No me lastimes por favor- el me abrazo y luego ambos escuchamos pasos acercarse, nos separamos rápidamente. -¡Oye aquí estabas!- dijo Gemma feliz.