"¿Por qué?"

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Julie:

— ¡Pero, Hanna, esta en las historias de tú Instagram!

— ¡Imposible, te juró que yo no lo subí!

— Diablos, Hanna... — talle mí cara con frustración. Cuando llegué a mí casa me había dado cuenta de que el video que Hanna había grabado de mí y Rory en la piscina se había subió, así que la llamé de inmediato y comenzamos a discutir por eso.

— Seguro se subió sólo cuando cayó al agua — tranquila, Julie, no es tan grave, eso se borrará, tranquila.

— Tienes razón, lo siento, Hanna... te llamó después — colgué la llamada. Esto era demasiado; el beso con Rory y Anthony, tener que ensayar diario Karate, ya que la competencia estaba demasiado cerca y yo tenía que entrenar mucho si quería ganar, o al menos internarlo. El tener que tratar de mantenerme de pie por mí madre... todo esto... me tenía muy estresada, no lo sé, sentía que en cualquier momento yo colapsaría, y mí mayor miedo era que si eso pasaba yo ya no me pudiera volver a levantar.

Los días fueron pasando, y Anthony no me había dirigido la palabra en la escuela, ni mucho en su casa, era raro, como si algo hubiera cambiado y eso me aterraba.

Ridícula, nunca sintió nada por ti.

Pero él había dicho que me amaba, lo había dicho en mí cara, ¿qué cambió?. Tal vez dije algo o hice algo que no debí. O tal vez él nunca me miró como yo a él, creó que esa era la respuesta correcta. Traté de dejar a un lado lo de Anthony y yo, y me dispuse a entrenar duró para la competencia. Daniel y mis compañeros siempre me felicitaban, porque cada día mejoraba más, cosa que me alegraba. Sam fue la que me ayudó bastante aparté de Daniel. Ella me enseñó algunas de sus tácticas que también le había enseñado Johnny, él ex novio de mamá.

[...]

— Estuviste muy bien, Juls — Eli me dió un abrazo felicitándome.

— ¡Nos vemos mañana para entrar! — gritó él Señor LaRusso a los chicos. Sam y yo entramos a casa y nos quedamos en la cocina tomando agua.

— Oye... Sam, ahm... ¿Anthony está aquí?

— Si, últimamente no ha salido de su habitación — hizo una mueca.

— ¿Yo puedo ir a?...

— Julie, no necesitas preguntarme, pasa — asentí y me dirigí a la habitación de Anthony. Estaba nerviosa, no sabía como empezar la conversación sin que sea incómodo. Quería hablar de nosotros... de que pasaba con nosotros dos o que iba a pasar. Justo cuando iba a tocar la puerta se abrió de golpe, encontrándome a Anthony quien se había quedado paralizado con mí presencia.

— Anthony... — sonreí. Alzó ambas cejas y rodó los ojos.

— ¿Que haces aquí, Julie? — preguntó fríamente. Fruncí el ceño. Auch.

— Vine hablar — se hizo a un lado y yo pase, pero me quede parada viendo como cerraba la puerta y él se quedaba al frente de esta.

— No hay nada de que hablar — dijo con tono de burla.

— ¿Y qué hay de nosotros? — nos señalé. Él cruzó los brazos y me miró sin ninguna expresión en su rostro.

¿Por qué eres tan difícil de descifrar?

— No hay, ni hubo un nosotros, Julie — abrí la boca quedándome sin airé. ¿Qué le iba a decir?, no quería sonar intensa, ni como si me importara, aunque si me importe y mucho.

— Yo pensé que el beso había significado algo para... para ti — tragué grueso. Traté de mantener una sonrisa, "tranquila", para evitar llorar frente a él.

— ¿Qué dices Julie? — sonrió grandemente, como si le estuviera contando un buen chiste, como si no le importara ni una pizca —. Sólo te bese porque estaba aburrido, ¿de acuerdo?, esto — me señaló a mí y después se señaló él — no debió pasar, fue un error, que no se volvera a cometer — dirigí mí mirada al techó, cuando sentí un nudo en mí garganta formarse, que no me permitía hablar.

— No quiero... — apretó su mandíbula — no quiero que nos volvamos a ver, ¿de acuerdo? — me acerqué a él y traté de tomarlo de la mano, pero él se alejó bruscamente —. Vete, Julie — abrió la puerta y yo negué sin decir nada.

— Po-por favor... no, quédate con-conmigo... — rogué con lágrimas en los ojos. Sus ojos se cristalizaron y por unos segundos pareció mirarme con tristeza.

— No hagas esto más difícil... por favor, Julie — habló sosteniendo la puerta con una mano, pero sin mirarme a la cara.

— Lo siento... s-si yo dije —
me pare en medio de la puerta, mirándolo, pero al ver que no me contestaba, ni miraba, decidí que era mejor que me fuera —... algo m-malo, lo sie-siento — dije para después salir por la puerta. Limpie mis lágrimas antes de asomarme con Sam y puse mí mejor sonrisa.

— ¿Puedo entrar al baño, S-Sam? — dije apenas con un hilo de voz.

— ¡Claro! — dijo con su vista en la pantalla del celular. En cuanto entré al baño cerré la puerta con seguro, dejando que las lágrimas salieran a floté. ¿Por qué me hacía esto?, ¿por qué me pasaba esto?, ¿qué hice mal?. Dios, que idiota fui al creer que Anthony se iba a enamorar de mí mágicamente.

"Fue un error"

Error.

Error.

Anthony era la única persona con la que me sentía completamente segura, él era la única persona que podía unir mis piezas y la única persona que me podía romper. Y él ahora me estaba rompiendo por completo. Era como si mí corazón se hiciera de cristal frente a él y con un sólo golpe, pum, se rompía en mil pedazos. Mis ojos ardían por la las lágrimas que No paraban de rodar por mis mejillas. Y yo aún me sigo preguntando; ¿por qué?. Llevé ambas manos a mí boca para callar los sollozos que salían. Con una mano busque mí celular entré uno de los bolsillos de mí pantalón y busqué el chat de mí madre.

Mamá:

Mamá, ven por mí, por
favor.      

Claro, cielo, ahora voy.

Suspiré aliviada y me miré al espejo.

— Ingenua... — miré como las lágrimas caían sin parar.

Ingenua.

¡Fin!

JAISISKSKAJS

Mentira, perdón. 😿💐

Ya casi se acerca el final. 😭😭💗

Les amo y nos leemos después. 🤎📚

 🤎📚

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𝗝𝗨𝗟𝗜𝗘, 𝗪𝗜𝗧𝗛 "𝗜" [𝗖𝗢𝗕𝗥𝗔 𝗞𝗔𝗜] ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora