¿Cuántas veces había entrado al chat, el contacto o la foto de perfil de Darwin esa noche? Había perdido la cuenta. Le ardían los ojos, parecía un bebé lloriqueando todo el día en su habitación a oscuras o bueno... Iluminada por la pantalla de su celular.
No podía decidirse si escribirle al pez o no, también pensó en llamarlo, pero no podía ¿Por qué? Es que ¿Que iba a decir? ¿Lo siento? ¿Estás bien? ¿Cómo te sientes? ¿Me odias?... ¿Me gustas también? No, estaba tan confundido.
Siempre había visto a Darwin como alguien especial y... ¡Es que lo era! Era un chico dulce, inteligente, amable, pero con un lado picante que le encantaba. ¡Mierda! Era exactamente lo que necesitaba en su vida y lo sabía, pero ¿Cómo podía responder a lo que Darwin siente?
Realmente pensó que podía ser una broma, pero cuando le vio llorar... ¿Realmente le gustaba? ¿De verdad? ¿Por qué alguien como él? Joder, si era todo lo contrario a un chico perfecto a diferencia de Darwin que era un chico adorable, aunque algo ingenuo.
Mierda...Que desesperante. ¿Cómo iba a poder verle a la cara luego de hacerlo llorar así?Escuchó la puerta abrirse y no quiso voltear a ver, pero por la sombra supuso que era su mamá. Suspiró y se dió la vuelta en su cama al lado contrario de la puerta para que no le viera o siquiera supiera que quería estar solo.
La mujer sabía que su lindo hijito Julius no estaba muy bien, si solía ser algo rebelde, encerrándose en su habitación a veces, cosas de adolescentes. Pero esa vez podía notarse que estaba destrozado. ¿Qué podía hacer?
— Corazón...— Dijo la mujer con suavidad y tacto, dejando la puerta entrejuntada que apenas algo de luz entraba antes de sentarse en la cama junto a su hijo. — ¿Quieres hablar de cómo te sientes?
— No. — dijo cortante el chico bomba.
— Hmmm... — La mujer se acarició suavemente el regazo.— ¿Es porqué te hemos estado presionando, cierto? Lo siento, sé que aún te cuesta tomar una decisión, pero... Bueno, sé que siempre te ha costado un poco tomar ciertas decisiones importantes.— Umg... No, no es eso y sé que debo tomarla.
— La universidad será un gran paso, Julius, pero si necesitas un poco de tiempo más...— No. — dijo el peliblanco, sentándose y secándose un poco los ojos.— Iré, decidiré apenas pueda, pero pronto, lo prometo. — esnifó por la nariz.— Estoy triste porque no sé cómo disculparme con alguien, es todo.
— Oh... Debe ser alguien muy importante para ti, mi polvorita...— Julius Asintió con lentitud.— Entonces sé sincero, si sabes porque te sientes mal puedes dar una disculpa fácilmente sólo siendo sincero.— Eso... No es realmente fácil.
— Sólo espera a estar listo, pero no descuides una amistad, uno nunca sabe cuándo necesitará de un amigo — La mujer se acercó a la frente de su hijo para dejar un pequeño beso y seguidamente se levantó.— Si necesitas hablar puedes decirme.— La mujer empezó a caminar hacia la puerta.
— Gracias...— susurro el peliblanco, aún eso era complicado. Miró a su mamá sonreirle suave antes de salir de la habitación.
Disculparse siendo sincero... Sonaba como algo imposible para él, pero debía intentarlo, por Darwin.

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Geoda [ Julius X Darwin ] Tawog
FanfictionJulius es como una Geoda O eso notó Darwin. Arte por Lopalu The Amazing World Of Gumball es una serie creada por Ben Bocquelet Inspirado en Barbie osi