𝙻𝚘𝚟𝚎 𝚢𝚘𝚞 𝙻𝚒𝚔𝚎 𝚖𝚎

𝙰𝚙𝚘𝚕𝚘𝚐𝚒𝚣𝚎

Jaemin

¿Le digo o no a Jeno?, ¿Qué pasa si se enoja?, De enojarse es obvio, lo estaría dejando cuando claramente dije que quería estar con él, estoy confundido, muy confundido, no se que hacer...

Salí de casa de Renjun a clases, maldita sea, veré a Jeno, no se con que cara lo veré, ni como le diré que tengo que dejarlo, ni siquiera duramos un mes, Por Dios Jaemin, estás mal.

- ¿Que pasa Jae? - dijo Haechan.

- Hyuck, necesito confesarte algo - voltee a ver a Mark, quería que se fuera.

- Mark, nos vemos luego ¿Si? - le dijo Haechan y mark asintió y se fue - ¿Pasó algo malo con Jeno? - me senté al lado de él.

- Yo...estoy...le dí una oportunidad a Renjun - agaché mi cabeza.

- ¡¿QUÉ?! - gritó Haechan - Lo siento, ¿De verdad?, ¿Y Jeno? -

- No lo sé, Renjun estaba muy triste y yo también, ambos terminamos besándonos y...eso - suspiré - No sé que hacer Haechan, solo quería diversión, no esto - apoyé mi rostro en mis manos.

- Jaemin, no se cómo aconsejarte, lo siento - dió palmaditas en mi espalda.

- No te preocupes, es mi culpa por ser tan estúpido - sonreí.

- Nana, no quiero dañar el momento, pero ahí viene Jeno - dijo golpeando más fuerte mi espalda.

- ¿Quién? - dije levantando mi cabeza.

- Hola Nana - dijo Jeno besándome.

- Creo que, hablamos luego Nana - sonrió Haechan y se fue en busca de Mark.

¿La vida no me quiere?,¿Alguien me deseó el mal o que?, No puede estar pasando, no quiero decirle esto a Jeno tan anticipadamente.

No tenía planeado decirle de todos modos, quería estar en un momento...relajante, y decirle esto, no ahora, unos minutos antes de las clases.

- Hola Jeno - dije carisbajo.

- ¿Que pasa Nana?, ¿Te sientes mal?, ¿Que tienes?, ¿Te duele algo? - dijo preocupado.

Me duele el corazón...

- No es nada, estrés supongo - sonreí.

- ¿Seguro? - acarició mi cabello - Me preocupa que estés mal, si algo te pasa puedes decirme Nana, yo estoy para tí - besó mi mejilla.

- Lo sé, Jeno, yo tengo algo importante que decirte - tomé sus manos - Jeno, yo...

- Espera Cariño, me está llamando mi padre - se levantó y se fue a hablar por teléfono, me levanté y caminé hasta mi salón.

No se cómo decirle, no se cómo reaccionará, ¿Y si lo dejo en secreto?, Sería menos doloroso, pero aún tendría esa incomodidad al no decirle, se que está mal dejarlo en secreto, estoy con Renjun y con Jeno, Dios no se que hacer en este momento.

- Jaemin, ¡Jaemin! - dijo el profesor.

- ¿Si? - respondí.

- ¿De que estamos hablando? - se cruzó de brazos.

- Yo - voltee a todos lados, me había quedado pensando y no puse atención - Lo siento, no presté atención - agaché mi cabeza.

- Presta más atención por favor - asentí y el profesor siguió dando la clase.

Las horas pasaron, y llegó el almuerzo, ese día me quedaba en clases hasta las tres; necesitaba comer, aunque no lo quería, me tenía muy intrigado esto de Renjun y Jeno, no quería lastimar a ninguno de ellos, si seguía así, terminaríamos mal los tres.