KING ~ [JJK]

Capítulo 16: Un paseo

Amelia no entendía el rey, él era severo, pero tan dulce, eso hacía que ella se sintiera confundida. Jungkook le regresó el libro y le dijo.

_ Cuando te hable no me ignores, no me gusta.

_ Sí.

Jungkook se puso cómodo, y se metió en la cama, él sintió algo extraño que se movía debajo de las mantas, él lo atrapó, lo saco de debajo de las sábanas, era un pequeño lobo, él le preguntó.

_ ¿Qué es esto?

_ Es mi pequeño lobo, Koda, mi mascota.

_ ¿Y qué está haciendo esta bola de pelos en mi cama?

_ Antes dormía conmigo, es la costumbre.

_ No lo quiero en mi cama.

_ ¿Pero se puede quedar?

_ Si, pero no lo dejes que suba a mi cama.

_ Esta bien.

_ Es tarde, vamos a dormir.

Amelia acomodó su cabeza en la almohada y le dijo.

_ Gracias.

_ ¿Por qué me estás dando las gracias?

_ Por dejar que Koda se quede conmigo.

_ Te dije que te daría lo que quisieras.

_ Si, pero puedo preguntar, ¿Por qué?

_ ¿A qué te refieres?

_ ¿Por qué su majestad desea complacer mis deseos?, no lo entiendo.

_ No necesito una razón para hacerlo.

_ Jungkook.

_ ¿Qué?

Jungkook estiro su mano y acaricio su cabello suavemente y le dijo.

_ ¿Por qué no puedes aceptar lo que te doy sin cuestionarlo?

_ Porque nunca he recibido amabilidad de nadie.

Jungkook la beso y le dijo.

_ Cualquiera en tu lugar tomaría lo que doy sin cuestionarlo todo.

_ A mí también me gustaría hacerlo, pero no puedo dejar de pensar que todo esto tendrá un coste y creo que me da miedo acostumbrarme a lo que me da, por que no se cuánto tiempo durara esto, yo he estado sola toda mi vida y me he acostumbrado a la soledad, no quiero acostumbrarme a esto, a los cuidados de su majestad, a su preocupación y que llegue el día en el que vuelva a estar como al principio, olvidada en algún rincón del palacio.

_ Eso no sucederá, ya te lo he dicho muchas veces.

Jungkook la abrazo y le dijo.

_ Deja de pensar en el pasado y vive el ahora, ya que es solo lo que tenemos en estos momentos.

Aunque el rey le dijera eso, Amelia no podía evitar tener miedo de lo que vendría.

Un mes después la herida de Amelia había mejorado mucho y con la llegada del verano su deseo de salir se había vuelto mayor. Esa noche cuando Jungkook volvió a la habitación Amelia lo espero de pie en el balcón disfrutando de la suave y fresca brisa veraniega que aliviaba el calor sofocante de la habitación.

Desde que había comenzado el calor Amelia hacia eso cada noche. Lo primero que hizo Jungkook al entrar fue.

_ ¿Qué haces en el balcón otra vez?

_ Hace calor, me estaba refrescando.

_ Entra, dejaremos las puertas y ventanas abiertas para que la habitación se mantenga fresca.