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El cielo sobre aquel desolado campo de guerra se había comenzado a nublar. El soplar del viento en medio de aquel destruido espacio junto al choque de las pequeñas olas de agua contra las orillas de los islotes era lo único que se podía escuchar. Aun así, el silencio era absoluto.
En medio de ese campo destruido que alguna vez había sido parte de una gran isla y que ahora solo eran pequeños islotes de tierra, dos contrincantes se encontraban a escasos metros de distancia, viéndose fijamente y atentos uno del otro por ver sus movimientos.
Por las mentes de ambos sujetos varias cosas pasaban, uno estaba impaciente por pelear para probar sus nuevas habilidades mientras que el otro se mantenía inexpresivo, pues no estaba tan seguro de si este combate seria fácil de ganar, pues el oponente actual no era cualquier tipo que pudiese ser tomado a la ligera.
Breves fueron los cruces de miradas y el poco silencio que había alrededor suyo cuando finalmente uno de ellos se dispuso a dar el primer movimiento.
Kyabe: ¡¡Aaah!! -el saiyajin lanzo un grito de guerra al tiempo que se lanzaba al ataque-
Transformado en su forma de súper saiyajin nivel dos, el saiyajin de Sadala se lanzo en contra de Eirian. El xenomorfo se puso en guardia, recibiendo al guerrero con un puñetazo que fue esquivado al instante.
Kyabe aprovecho el momento para barrer con uno de sus pies los contrarios de Eirian, logrando derribarlo y de inmediato lanzo un golpe que logro impactar en la mejilla del guerrero espacial.
Eirian fue arrojado varios metros hacia atrás pero pudo reponerse solo para ver al saiyajin mientras esbozaba una ligera sonrisa. Kyabe gruño y sin perder el tiempo salio volando en su dirección.
Una lucha cuerpo a cuerpo dio inicio en aquel lugar, cada golpe que ambos trataban de darse era rápidamente bloqueado por sus puños, ninguno lograba dar en el blanco, podría decirse que estaban parejos.
En uno de esos ataques, Eirian ejecuto un puñetazo hacia Kyabe el cual se cruzo de brazos, recibiendo el impacto en su defensa. Sin embargo la potencia a la que iba el golpe genero una ligera perturbación en el suelo pues una ligera ventisca de aire acompañada por una grieta en el suelo detrás del saiyajin se produjo, siguiendo su curso y deteniéndose en donde el cuerpo inconsciente de Shinra se hallaba tumbado, hundiéndolo ligeramente en el suelo.
El saiyajin se dio cuenta de eso por lo que en un movimiento rápido logró alejar a su oponente y rápidamente salio volando hacia el cielo. Eirian sin dudar también se elevo al aire, siguiendo al saiyajin.
Ya en lo alto el combate comenzó de nuevo. Ambos eran muy veloces, solo el sonido de sus puños chocar con fuerza se escuchaban en el cielo, haciendo retumbar cielo y tierra sin cesar.
[...]
Kale poco a poco fue abriendo los ojos los cuales estaban algo empañados, sin embargo apenas despertó su vista se posó en la pequeña cuna donde para su alivio se encontraba la pequeña bebé de su hermana, quien permanecía dormida sin ninguna preocupación.
