𝖈𝖎𝖓𝖈𝖔: 𝔦𝔫𝔱𝔢𝔫𝔠𝔦𝔬𝔫𝔢𝔰 𝔶 𝔳𝔢𝔯𝔡𝔞𝔡𝔢𝔰

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ㅡ¿Por fin terminarás con el sufrimiento de Sooyoung? ㅡla naturalmente atractiva voz de Joohyun se puede escuchar desde el teléfono.

ㅡNo planeo quedarme aquí mucho más tiempo y no podré pedirle ayuda en mi forma animal.

Esa es una voz que las paredes del salón no habían escuchado antes, habían visto el cuerpo propietario de ella bailar tanto como persona como perro, algunas veces destrozando juguetes y otras modelando la ropa de Sooyoung, pero nunca llegaron a escuchar algo más que murmullos acompañantes de las canciones que el híbrido disfruta tanto.

Ha pasado un poco más de un mes, pero la humanidad de Wannie todavía sigue siendo un misterio en esta casa.

ㅡNo quiero ser aguafiestas, pero Wan, ㅡJoohyun vacila un poco en escoger las palabras correctas. ㅡ¿Estás segura que Soo podrá ser de ayuda?

ㅡElla no es una de ello. Eso es más que seguro y para mí es suficiente para al menos intentarlo. ㅡhace su mejor esfuerzo pero Wannie puede sentir las grietas de su hablar. ㅡY no es que Sooyoung pueda negarse de todas formas. Regresaremos a casa pronto, Hyunnie.

El altavoz llena la habitación con el chillido que la híbrida mayor hace, por poco hace que Wannie deje caer el remoto del equipo de sonido (es su mayor diversión pero todavía no sabe cómo manejarlo apropiadamente). Joohyun olvidó que es parte de los planes de Wannie y también olvidó decirle que había hecho los suyos propios.

Sabe que la samoyedo no se va a enojar ni la hará menos por abandonar el barco, pero tener que explicarse es algo que la felino desearía poder evitar.

ㅡHablando de eso... Tú sabes que te amo y que hasta pondría mi mano sobre una biblia por ti, pero... Yo quisiera quedarme con Seulgi.

Vivir una vida normal junto a la chica que las salvó no suena mal y Wannie lo entiende, de hecho, lo esperaba desde que Joohyun ganó todo el peso que había perdido por años de malnutrición y Seulgi se volvió más lenta de lo que es por naturaleza.

Sin embargo, haber pasado eternidades juntas le da permiso a Wannie de presionar todos los botones de su mayor.

ㅡMis condolencias a Kang, vas a secar a la pobre.

ㅡ¡Yah, Seung-

El grito de la mayor queda a medias cuando Wannie corta la llamada al escucha la puerta abrirse y la lejana despedida de Chanyeol.

La híbrido se levanta rápido para chequearse en el reflejo del televisor, las primeras impresiones son importantes y en especial cuando son para con una mujer independiente, atractiva y con potencial de ser una sugar mommy exitosa como lo es Sooyoung.

Aún así los miedos y dudas comienzan a subirse por su piel; tal vez Soo no le crea, tal vez la delate, o no quiera ayudarla y la eche a la calle después de esto. Hay mucho que Wannie podría perder por su necedad de querer regresar, pero no quiere seguir estando en un lugar donde ha sido tan lastimada. Además, extraña las diversiones del oficio.

Y más importante que eso, ha puesto su confianza en Sooyoung y ella ha hecho lo mismo de regreso. Eso es lo que Wannie más teme perder. Aunque quiere regresar a su propio hogar no le agrada la idea de hacerlo con una imagen rota de Sooyoung.

ㅡ¿Wannie?

Allí está la razón por la cual la híbrida se queda despierta toda la noche.

Sooyoung luce más sorprendida de lo que Wannie esperaba, sus grandes ojos luciendo aún más grandes y su boca ligeramente abierta en espera de algo que la haga reaccionar, es una imagen que la samoyedo espero fuera distinta. Wannie tenía en mente que Sooyoung lo tomaría como algo normal y se acercaría para rascarle dónde se supone tendría sus orejas de perro.

❝¡𝐁𝐔𝐄𝐍𝐀 𝐂𝐇𝐈𝐂𝐀!❞ ─ wenjoy [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora