❝¡𝐁𝐔𝐄𝐍𝐀 𝐂𝐇𝐈𝐂𝐀!❞ ─ wenjoy [FINALIZADA]

𝖔𝖈𝖍𝖔: 𝔠𝔬𝔪𝔦𝔡𝔞 𝔶 𝔠𝔢𝔩𝔬𝔰

Sooyoung y Seulgi están sentadas viendo a sus ¿híbridas? haciendo su acostumbrado saludo cada vez que la menor viene de visita. Sin embargo, ver a Hyun y a Wendy hacerlo en sus formas humanas es interesante para las mortales.

La forma en que los tríceps de Seungwan se definen al levantar a Hyun del suelo roba más de una mirada del par sentado, al igual que la habilidad que Joohyun tiene para besar cada porción del rostro de la rubia.

ㅡNunca pensé que Copito pudiera lucir así. ㅡSeulgi se permite navegar por cada músculo que se puede ver a través de la ropa del demonio. ㅡSi no conociera a mi híbrida estaría celosa, incluso estaría celosa de ti por poder vivir con alguien así. Pero tengo a Hyunnie así que no hay nada que pueda envidiarte.

Seulgi entiende la intimidad que hay entre Joohyun y Seungwan, además de que la naturaleza de Hyun que lleva a ser un poco más cariñosa de lo adecuado con las personas que quiere. Pero por otra mano... Sooyoung no piensa del todo igual.

Está bien con la relación entre las demonios y como actúan, pero una parte de ella siente celos. No de Joohyun directamente, sino de las libertades que ella tiene sobre Seungwan. Tal vez la pelinegra le gustará algo más que cabezazos en sus piernas al llegar a casa.

ㅡ¿Se irán pronto, Sooyoung? ㅡla híbrida de gato habla aún en brazos de la rubia.

ㅡNo lo sé, eso dependerá de Seungwan.

Desde el incidente del parque, las horas de salida son controladas por Wendy. Ella es quien decide cuándo volver a casa, mientras Sooyoung es la que elige el lugar y los días.

La respuesta de la más alta de todas ilumina el rostro de la sucubo, el anochecer está lejos todavía y es domingo. Hoy no hay mucho peligro.

ㅡEso nos dará tiempo suficiente. ㅡJoohyun se baja de Seungwan y la empuja hasta la habitación. ㅡNo vengan por nosotras hasta que yo salga a buscarlas ¿De acuerdo?

Un silencio espeso se forma en el salón mientras Sooyoung y Seulgi intentan procesar lo que acaba de ocurrir frente a sus ojos. Aún así, hay algo que no deja a la menor en paz desde que todo este desastre comenzó.

ㅡUnnie... ㅡSooyoung tantea terreno esperando el acostumbrado "eung" de Seulgi, el cual llega con más atención de la debida. ㅡUn pajarito me dijo que te están chupando hasta la vida, ¿Es eso cierto?

Seulgi sabía que tuvo que haber abandonado a Seungwan y llevarse solo a Joohyun.

ㅡTe dije que no te entrometieras en mi privacidad, ahora ayúdame a preparar la cena.

ㅡNo hay nada de que avergonzarse, Seul. Si una sucubo como Hyun me dice para ayudarla a alimentarse, yo tampoco me negaría. ㅡla pelinegra sigue a la mayor hasta la cocina.

ㅡ¿Y que tal si fuera una como Seungwan?

Eso fue un golpe bajo y Kang Seulgi lleva la delantera.

Sooyoung se convierte en un arcoiris de sonrojos e intenta verbalizar una explicación, excusa o mentira. Pero lo único que sale de su boca son palabras a media que ni siquiera pueden formar una oración completa.

Bueno... En favor a Sooyoung: no hay forma de negarse a un demonio.

ㅡ¿Y que vamos a cocinar entonces?

El tema es cambiado con rapidez por otro en el mismo contexto.

Seulgi le explica sobre como Joohyun le contó sobre ser una demonio y que Seungwan también era una, además del porqué se quedaron atascadas con mortales. Todo lo que la rubia le había dicho a Sooyoung solo que con un poco más detalle.

Mientras la cocina está ocupada, aquellas en la habitación ven el pequeño desastre que han causado e imaginan la rabia de Seulgi por las manchas de tinte en las sabanas y en la ropa de Joohyun. Será gratificante para ambas, mientras Seungwan disfrutará de la frustración de la castaña, Joohyun tendrá una razón para tomar cuidado de su Seullie y alimentarse en el proceso.

Ellas hacen que ser un jodido demonio parezca divertido.

ㅡLa última vez que luciste así de bien el promedio de vida era de treinta y dos años. ㅡla pelirroja no oculta su deseo cuando Seungwan sale del baño.

Aquel espeso cabello rubio casi platinado ha sido reemplazado por una aún más corta melena oscura. Hyun hizo un excelente trabajo pintando y cortando el cabello de Wendy. La menor quería un cambio de look ahora que está en un mejor lugar y un paso más cerca a casa, además de que la ayudara a mezclarse mejor entre los mortales.

ㅡEso fue porque no me viste durante la revolución francesa, cariño. ㅡSeungwan bufa haciendo a la contraria reír. ㅡ¿Crees que a Sooyoung le guste?

ㅡ¿Por qué te importa que le guste? ㅡJoohyun se dispone a ayudar a Wendy a secar su cabello. ㅡLo importante es que a mí me gusta.

Un segundo bufido pero está vez acompañado de una expresión inconforme por parte de la ahora castaña hace que todas las alarmas de Joohyun se disparen. Esta es su oportunidad. ㅡNo me digas que la señorita piernas perfectas por fin se metió debajo de tu piel.

ㅡSolo fue una pregunta, no es para tanto.

De hecho no lo es, pero a Seungwan le gustaría creer que a Sooyoung le va a gustar. Aunque el hecho de que la más alta ya haya conseguido a esa persona que la regresará a su plano, hace que el demonio centre cabeza en lo que es importante.

Joohyun termina de hacer los últimos arreglos a su cabello justo antes de que Seulgi las llame para comer.

Cuando el par se une al otro en la mesa Sooyoung siente como si la persona sentada frente a ella no es la misma con la que llegó. El cabello oscuro le sienta a Seungwan mucho mejor que el rubio, y el corte lobo por encima de sus hombros enmarca su rostro con más gracia.

Es ahora que Sooyoung está comenzando a lamentarse haber encontrado a Yerim.

ㅡTomaré tu reacción como un "convertirme en la comida de Seungwan hubiese sido mi sueño". ㅡSeulgi susurra al oído de Sooyoung.

La repentina sensación de adrenalina que la castaña más bajita experimenta la hace voltear de inmediato hacia su mortal. No le gusta para nada el ceño fruncido de Sooyoung y la forma en que se muerde el interior de su mejilla.

Esas no son buenas señales, ni el estrés de Sooyoung o el cambio de humor de Seungwan. Así como tampoco lo es el pensamiento que llega en un momento de vacío.

Maldita sea... He perdido la cabeza si...

Bais, se la lavan.