Narra Hermione
Percy nos localiza con la mirada y sonríe feliz antes de acercarse a paso rápido y sentarse con nosotros. Me alegra bastante que le haya tocado con nosotros, tiene una vibra muy...muy cálida, confortante.
-He escuchado que las escuelas que vendrán serán Academia Beauxbatons y el Instituto Durmstrang, competidores complicados.
Justo cuando acabo de decirlo, se comenzó a anunciar la llegada de ambas escuelas a Hogwarts.
-¿Por qué todo el mundo quiere participar en esa trampa mortal?- nos pregunta con curiosidad Percy, del todo confuso.
-El premio son 1000 galeones y el gran título de ganador del torneo de los 3 magos- explica Ron, como si aquello ya fuera motivo suficiente.
-Magnífico si el título no va en la lápida- dice de forma sarcástica, negando con la cabeza.
Harry sonríe.
-Estoy de acuerdo, yo no pienso participar. ¿Vais a poner vuestros nombres?- le pregunta, yo tenía esa misma duda en mente.
-Los 3, así podremos vigilar las pruebas y que no ataquen o algo por ahí- en verdad era algo inteligente, pero sin duda también muy arriesgado.
-Tened cuidado- murmuré, algo preocupada- el torneo no es para tomárselo a la ligera- él asintió, de acuerdo, pero sin cambiar de opinión ni de plan.
-No te preocupes.
Dejamos el tema de lado y decidimos comentar las diferentes asignaturas que vamos a cursar esté año, aunque de reojo puede ver a Thalía y Nico hablando con Dumbledore. Una mujer pelirroja muy hermosa está con ellos, al igual que un chico de unos 17 de pelo negro que lleva una chaqueta de cuero. Ambos desprenden un aura poco común, muy notoria y bastante potente.
-Chicos- los llamó- mirad- señaló al grupo de al lado, en referencia a los dos desconocidos.
Cuando el azabache los ve, abre mucho los ojos, parece entre sorprendido, entumecido y casi se le escucha maldecir por lo bajo. No sé quienes serán, pero está claro que Percy los conoce y no acaba de tenerles simpatía.
-¿Qué Hades...?- comienza a decir, pero es interrumpido por una voz grave:
-Hola mocoso- saluda el chico que, a penas unos segundos antes había estado lejos, se encuentras justo detrás de Percy, con una sonrisa socarrona.
-¿De todos solo podrías venir tú?- cuestiona el aludido-¿Qué broma cruel es está?- pregunta mirando al techo con el ceño fruncido y un puchero realmente adorable.
-Además de Artemisa que vigilará a los otros dos, a mi me han dejado cómo tu niñera- explica, como si eso ya lo aclarase todo, para Percy parece tener sentido, pero para nosotros es como si hablará en otra lengua.
-Genial, es maravilloso. Voy a llorar de felicidad- murmura Percy, haciendo uso de su sarcasmo y suspirando dramáticamente.
El chico parece divertido con la reacción de Percy, más cuando esté vuelve a suspirar cuando el desconocido se sienta a su lado y nos mira.
-Me presento, Ares, dios de la guerra y encargado de evitar que el hijo de mi tío muera mientras él evita que vosotros muráis- he leído montones de mitos sobre esté dios, por lo que me deja sorprendida su aspecto tan común, si no fuera por su aura de poder, podría pasar por un adolescente con los humos muy subidos.
Narra Ares
A Perseo no le ha hecho ninguna gracia, tal y como ya predije, si es que podría quitarle el puesto de dios de las profecías a Apolo. Tampoco es como si yo quisiera estar aquí, estaría mil veces mejor en mi templo o disfrutando de algún programa de televisión de deportes, pero las amenazas del dios del mar, alías papá ausente, pero sobreprotector, de la diosa de la caza, ¿Cómo Perseo se ganó un mínimo de su respeto? No lo sé; y de la diosa del hogar, que decía que el chico tenía el espíritu del hogar en su interior y no sé que más. Bueno, todas las amenazas ya mencionadas me hicieron cambiar de idea y venir como niñero.
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El torneo de los 3 magos...¿y el semidiós?
Fanfiction¿Qué pasa cuando uno da todo de sí mismo para salvar a otros y aún así el destino no lo quiere dejar descansar? Podéis preguntarle a Percy Jackson, quien tras dos guerras, dos profecías, haber atravesado el infierno literalmente y perder a su amada...