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» hoy es el día.

Taehyung respiró hondo mientras se miraba a sí mismo por última vez en el espejo.

"Finalmente es el día ... " murmuró para sí mismo mientras revisaba la linda ropa de noche que eligió usar para este día especial. Todo iba perfectamente planeado. Sus padres junto con su hermana se fueron al viaje que Taehyung había organizado para el fin de semana.

Les dijo que no podía ir por cuestiones de trabajo, y sabía que Jungkook tampoco iría por cierto cliente que llamó para una reunión durante ese mismo fin de semana.

Así que ahora tienen la casa para ellos solos durante dos días. El pensamiento hace que Tae se estremezca de emoción, su parte baja palpita y sus bragas se humedecen sin parar cuanto más piensa en toda la diversión que pueden tener si la última parte de su plan funciona. Tomó una bola giratoria, eligiendo la herramienta de hipnosis menos sospechosa para este plan y así poder engañar a su cuñado.

No es como si lo estuviera obligando a nada, sabía que Jungkook lo quería tanto como él. La hipnosis sólo sería para engañarlo, para que tuviera el coraje de actuar.

Salió de su habitación y cruzó el pasillo hasta donde su hermana compartía un dormitorio con el hombre que Taehyung amaba.

No se podía ocultar que Jungkook solo se casó con la hermana del rubio por los deseos de sus padres. Tae se equivocó al presentar a su "mejor amigo" a su familia. A sus padres inmediatamente les agradó el peli negro y lo siguiente que supo fue que sus intereses compartidos y coqueteo discreto debían detenerse, porque Jungkook iba a ser su cuñado.

El menor se aclaró la garganta antes de llamar débilmente a la puerta y entrar antes de obtener el permiso de este último. Jungkook, estaba acostado y se sentó rápidamente levantándose como si lo hubieran pillado haciendo algo imperdonable.

—¡H-Hey Tae! ¿Qué pasa-wah... — deteniéndose a mitad de la oración para mirar boquiabierto el delicado cuerpo del más pequeño cubierto con pequeñas piezas de ropa.

—T-Te vez hermoso... — no pudo ocultarlo, lo que estaba en su mente se escapó inmediatamente de sus labios entreabiertos.

Taehyung sonrió tímidamente, con la cabeza baja para ocultar el enrojecimiento de sus mejillas.

—Gracias— murmuró en voz baja antes de volver a mirar a este último que todavía lo miraba de arriba abajo -Oye, ¿Quieres hacer algo divertido?- Se acercó a la cama donde yacía el mayor, habló con su voz deliberadamente baja y aterciopelada como parte del proceso de hipnosis.

Le lanzó casualmente la bola giratoria a Jungkook quien la atrapó con éxito.

—¿Divertido? ¿Cómo qué?— preguntó el peli negro, apartando lentamente la mirada de Taehyung para ver la pelota atrapada en sus manos.

Si le preguntas a Tae, Jungkook ya parecía estar en trance con sólo mirarlo.

—No lo sé... — el rubio murmuró suavemente, uniéndose al mayor en la cama y ganándose una mirada sospechosa del mencionado.

—¿Por qué hablas así?— se río nerviosamente y Taehyung sonrió con cariño. Recuerda como Jungkook le había dicho que no le gustaba la torcedura de voz del menor.

—¿Por qué? ¿Cómo estoy hablando?— preguntó, en el mismo tono suave.

—No sé... Raro, ¿tranquilizador?— el peli negro parecía confundido y Tae río suavemente.

—¿Sabes qué es más relajante? Está pelota... — mencionó tomando las manos de Jungkook que sostenían la pelota.

—Dicen que si lo pasas de una mano a otra mientras lo miras, te dará una increíble sensación a paz ¿Quieres intentar?— sugirió el menor astutamente.

Jungkook simplemente lo miró antes de obedecer sin tener idea. Lanzó la bola giratoria de una mano a otra y enfocándose en el liquido reluciente dentro de ella mientras esta giraba de forma satisfactoria.

—Sí, así... — Tae animó con esa voz asertiva pero suave.

"Sigue tirándolo... "

"izquierda, derecha, izquierda, derecha... "

"Mira el brillo dorado, que hermoso se arremolina"

"izquierda, derecha, vacía tu linda cabecita de todo"

"Siente como te hundes en él"

Esas fueron algunas de las frases que Taehyung le decía, sonrió al ver cómo los párpados de Jungkook se volvían pesados, sus movimientos se hacían torpes y parecía estar luchando por mantener la cabeza erguida. Estaba funcionando.

—Perfecto, izquierda, derecha, izquierda, derecha... Y suelta— con un chasquido de su dedo, la cabeza del peli negro cayó sobre su regazo.

—Dulce... — murmuró Taehyung mientras acariciaba su suave rostro y su fuerte mandíbula. Si tan sólo su hermana estuviera fuera todo el día, podría hacer esto, tocar y observar a Jeon Jungkook como quisiera.

—Ahora eres todo mío— Movió el cuerpo de este último para llamar su atención pero no como para sacarlo por completo de su trance.

—¿Jungkook? ¿Puedes escucharme? Asiente con la cabeza si puedes— Jungkook hipnotizado y completamente fuera de sí, asintió aún con la cabeza descansando en el regazo de Taehyung.

—Está bien, ahora siéntate y mírame— el menor ordenó una vez más, y el hipnotizado se apresuró a obedecer, aunque sus movimientos eran lentos y pesados.

—Jungkook, dime honestamente... Me quieres tanto como yo te quiero a ti, ¿verdad?— cuestionó con esperanza el rubio, sus ojos brillantes miraba directamente a los ojos desenfocados de su amor.

𝓎𝓉𝓃_𝓀𝓉𝒽 •ଓ.°