𝙃𝙚𝙧

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Ya en Canterlot, toda la adrenalina de Twilight se desvaneció al ver a todos los ponis que conocía encerrados en jaulas, incluso Songbird Serenade, que aunque su copete tapara sus ojos, podía notar su mirada en ella.

Tempestad dirigía el recorrido, mirando fijamente el castillo frente suyo, (T/N) a su lado, quien volteó su mirada notando la pose fatal de la princesa. Lograron entrar a tiempo, dejando la jaula de la alicornio en su lugar correspondiente. Twilight abrió sus ojos al ver las estatuas de las princesas, sus expresiones en un eterno temor.

La alicornio volteó a ver a la unicornio, －Tempestad, no lo hagas. No le des al rey Tormenta-－ Tempestad interrumpió, －¿tu magia? ¿Te la querías quedar toda para ti sola? Es hora de compartir.－ Rió con un tono pícaro, －Me encantaría que todo el mundo supiera lo que puedo llegar a hacer.－ Tempestad miró directamente a (T/N), quien abrio sus ojos e hizo una reverencia. Tempestad parpadeó confundida, pero una voz detrás suya la hizo congelarse, －¡Oooh, fascinante! ¿Qué es lo que puedes hacer en realidad?－

Tempestad volteó y abrió sus ojos, inmediatamente poniéndose derecha.

－Su voluntad desde luego, poderosisimo.－ Grubber se arrodilló. Pero como acto de cobardía corrió hacia las puertas y salió del lugar.

－Eso está bien, suena excelente.－ El rey Tormenta miró a Twilight y alzó una ceja, －Eh, ¿qué se supone que eres?－ －Soy la princesa de la amistad.－ Twilight mantuvo una postura firme ante su enemigo.

Sin embargo, éste rió a carcajadas, －¡JAJAJAJA! ¡Qué cosa, qué tierna!－ Se acercó a Tempestad y (T/N),  －¿Y por qué aún se mueve?－ Tempestad explicó, －Ella y sus amigos se resistieron un poco pero ahora está sola, no será un problema.－ La pegaso dio un paso adelante y le sonrió, －¡Sí! Y yo me aseguré de que no fueran más lejos de aquí.－ Añadió (T/N) con orgullo, esperando un halago de parte del rey.

Más lo único que recibió fue un bufido, y cómo revolvía su pelo. －Sí bien, hablando de problemas.－ El rey señaló al lugar, －Este lugar me parece un poco, emm no lo sé, ¡LINDO! No me gusta eso, nunca me gustó lo lindo. Eso no va con mi estilo de tipo poderoso, grande, ¡mágico y cruel! ¿Cierto?－

El rey Tormenta alzó su vara, －Ya cuéntenme el chiste chicas, ¡porque esto parece una BROMA!－

Al conectar la punta con el orificio, varias chispas salieron de este, pero pronto los cuerpos de las princesas brillaron. Toda su magia fue exprimida, y fue robada por la vara del rey. －¡AH, NOOO!－ Gritó Twilight sintiendo un enorme dolor recorrer su cuerpo. Tempestad miraba algo sorprendida, y (T/N) hizo una mueca viendo preocupada a la alicornio. －¡JAJAJA, mira el show de luces!－

Al terminar, Twilight lentamente cayó al suelo sacando un gemido de dolor.

Tormenta observó su nuevo juguete con emoción, －¿Por qué tan lenta la tormenta? Oh sí, suena bien me registraré la idea.－

Volteó a ver a Twilight y sonrió, Twilight no se esperaba que él lanzara un rayo a su dirección, haciendo que chocara con la pared y saliera hacia el balcón gimiendo de dolor.

－¡Twilight!－ (T/N) salio corriendo del orificio que el choque provocó, deslizándose sobre el suelo de manera desesperada. Alzó su tembloroso casco y tocó la mejilla de la contraria, quién solo tosió, －E-estoy bien, enserio.－

－¡Nada mal! De hecho casi de primera, ¿qué más sabe hacer?－ Tempestad miró a las dos ponis en el suelo pero negó la cabeza tratando de olvidarlo, acercándose inmediatamente al rey Tormenta, －Uh excelencia, usted prometió restaurar mi cuerno y-－ －¡Tatatata! Ok espera.－ Interrumpió el contrario, usando su arma tratando de experimentar con el cielo, y tal como esperó, movió el sol y la luna. －¡Esto no es posible, puedo mover el sol! Esto sí es lo que me gusta.－ Se posicionó frente al cielo, －A jugar, ¡martes miércoles jueves viernes! ¡Día, noche, día, noche, día, noche!－

Mientras jugaba, no notó como las amigas de Twilight llegaron frente al castillo, Capper usando a Spike como un exprimidor de fuego, y las chicas corriendo hacia la entrada.

(T/N) al ver esto sonrió, orgullosa de que Spike lograra avisarles, －¡Sí!－ Chilló triunfante. －¿Qué? ¡¿cómo?!－ Tempestad exclamó molesta. Twilight se alzó del suelo y miró orgullosa a sus amigas, －Es... ¡la magia de la-!－ El rey Tormenta interrumpió abrazando a todas sobre los hombros, －Sí sí, ¡amistad y flores, y ponis, y blargh!－ Soltó a las ponis y se alzó del suelo claramente molesto, －¡Ya estoy harto de la ternura pony! ¡Esto, acaba, ahora!－

El rey Tormenta alzó su arma y lanzó un enorme rayo que chocó contra el cielo, haciendo que las nubes oscuras formaran un enorme tornado que rodeó el castillo.

－¡Ahora si que soy realmente el rey Tormenta!－ Sin embargo, Tempestad se acercó a su líder en un intento desesperado de hacer cumplir su parte, －¡Sí sí! Usted es absolutamente poderoso como le prometí señor. Restaure mi cuerno, y juro que usaré mi magia para servirle.－ La pony se inclinó, pero el contrario solamente se rió en su cara. －¡Jajaja! ¿A quién le importa tu diminuto cuernito de unicornio?－ Dijo burlón mientras la empujaba, pero no contaba con que una pony se avalanzara a él, －¡A mí!－

(T/N) aferró sus cascos alrededor del bastón tratando de quitárselo, al no poder conseguirlo alzó su casco y golpeó varias veces su rostro.

－¡Ugh, quitate, basta!－ Exclamó molesto tratando de quitarla de encima. El bastón se salio de sus garras y cayó cerca de Twilight, quien al notar que los dos seguían peleando lo iba a tomar pero un rayo salió de éste, el cual cayó sobre los pies de Tempestad.

Esto hizo que la unicornio se tropezara y casi fuera consumida por la tormenta de no ser por Twilight, quien rápidamente sujetó su casco.

－¡Sujetate!－ Tempestad alzó su mirada asombrada y frunció el ceño, －¿Por qué me quieres salvar?－ Twilight suavizó su mirada y le dio una sonrisa, －Porque eso, es lo que hacen las amigas.－

Tempestad abrió ligeramente sus ojos, mirando al suelo por unos momentos hasta que le sonrió a la princesa. Twilight logró llevarla al suelo y sujetarla firmemente, las dos se miraron por un momento.

－Aww, pero qué escena tan bella.－

Ambas alzaron sus miradas, las cuales se toparon con el rey Tormenta quien sujetaba firmemente de su bastón, y su otra garra sujetaba el cuello de (T/N).

－¡(T/N)!－ Ambas exclamaron. La pegaso trató de moverse, pero el contrario apretó su agarre, －Chicas- ¡ngh!－

Twilight abrió sus ojos con temor al ver al rey Tormenta dirigir su arma frente a ellas, －Bueno, adiós.－

Las dos cerraron sus ojos, pero escucharon el sonido de un cañón... ¡el cañón de Pinkie! Twilight abrió sus ojos a tiempo para observar cómo seis figuras chocaron con el cuerpo de Tormenta, quien por sorpresa dejó caer a la pegaso de sus garras.

Tempestad se alzó del suelo, la alicornio yendó a ayudar a (T/N). A lo lejos escuchó la voz de su querida amiga, lo cual le hizo sonreír, －D-di en el blanco.－