Capitulo I: D.... de dolor

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Me había ido a dormir después de trabajar en la construcción y soldadura de un armazón para reforzar un muro de contención, y para mí era ya de por sí un trabajo muy agotador, pero el pago por el sacrificio que hacía lo valía más.

Era habitual para mí volver a mí hogar y dejarme caer en mi cama, esa era siempre mi rutina los días de semana en que laboraba, ya que tenía solo un día de descanso y eran solo los sábados. Pero no era del todo puntual, ya que estudiaba en ese día. Mi meta era conseguir mí licenciatura en Enfermería, pues mi sueño es ser enfermero. Estoy esperando a que amanezca para por fin conseguir mí diploma, y de esa manera por fin decir que todo el sacrificio que he hecho a valido la pena.

Pobre de mí al pensar eso...

El sueño se tornó casi suspendido cuando un dolor recorrió mi cuerpo quemandolo... Inmediatamente intento abrir mis ojos pero por instinto no lograba abrirlos, entonces con mi voluntad seguí presionandome a abrir al menos uno.

En el momento en que lo abrí, me sorprendió el saber que en donde estaba no era mi hogar y que por alguna razón me duele mi pierna y mi hombro izquierdo. Pero lo más aterrador era que en mi hombro izquierdo había un cuchillo incrustado. Lo peor es que yo estaba tirado en un lugar boscoso con unos troncos ardiendo, pero eso era lo de menos lo que me aterraba eran las dos heridas que tenía.

“ok, si puedo... solo tengo que sacarme el cuchillo del hombro, no es tan difícil; es como cuando hacías tus prácticas en los hospitales... Solo sácal... ¡¡¡ Ahhhh!!!... Ok, ok... Una vez más ¡¡Ahhhh!!... fuu, fuu... Pudo ser peor. No, ésto es peor.”

Cuando saque el cuchillo mi dolor solo se multiplicó por 10, entonces me retorcía y lloraba del dolor. Nunca esperaba que fuera a pasar por algo así. Esto es horrible, lo odió, lo odió tanto que quiero vomitar.

El dolor no me permitía pensar con claridad y de paso por las heridas se empiezan desprender un olor a oxido...

“oh mierda”

Las heridas solo huelen a oxido cuando son tan profundas que aunque no sangres te puedes morir por una infección séptica.

Rápidamente me pongo a pensar en una solución para esta situación, no quiero morir no ahora.

Los minutos se vuelven lejanas como las horas, y me mato pensando que hago. Las heridas se vuelven con cada minuto en un peligro a largo plazo.

Miro a  mi alrededor y solo hay unas bolsas que no se qué contiene, basura, chatarra y troncos de leños quemándose.

“Leños quemándose, Leños quemándose, Leños quemándose... !”

En ese momento me di cuenta de que podía hacer, pero esto no lo quiero hacer, no me queda de otra que aguantar un poco más. Primero atenderé la herida de mi pierna y luego mi hombro.

Me acerco a las bolsas y solo hay trapos , una lata y 2 botellas de agua potable.

Acerco la lata hacia el fuego; vierto la botella de agua y unos trapos con los que intento esterilizar, todo para evitar contagiar el área afectada con alguna bacteria desconocida. Revisó el lugar y unas pocas bolsas que solo contienen basura, todas menos una en especial ya  que lleva un pequeño rollo de hilo y una aguja.

También Heche la aguja al agua hirviendo para esterilizar. Y unos minutos después estaba todo listo para dar tratamiento limpié mi pierna derecha y con unos ramas lisas hice unas muletas.

Primero vendé mi pierna, ya que era lo único que puedo hacer, pero para mí hombro izquierdo no queda de otra que coser la herida.

“Vamos que si se puede... ¡¡¡Ahhhh, jaa haa haa!!... Vamos un poco ¡¡¡maaaaass!!... Sí puedo, si puedo... Ya casiiiiii jii jiii.... ...Ahuuu huu ju huu”

El dolor me doblegó y me puse a llorar por el intenso solo que me agobia y me atormenta. Lo odio, no sé por qué es que me está pasando esto a mi, yo un simple hombre casero el cual no tiene nada que envidiar, alguien que vive día a día sin pena ni gloria... Entonces ¿Por qué?

“uuhh... Sniff... Sniff

Lloró de dolor, siento mucho miedo e ira. Esos sentimientos se mezcla en mi cabeza que se desvanece poco a poco, en una espiral de cansancio físico y mental, con la poca fuerza que me queda miró al cielo y miró el sol al Zenit pero no duro mucho, hasta que ya no puedo más y me duermo.

Abro los ojos una vez más, y aunque el dolor sigue presente ya es menor a como estaba en un principio,  observo las vendas y están teñidas en sangre, pero para mí suerte parece que el sangrado logro detenerse.

Lo malo es la debilidad física, todo mi cuerpo está muy debilitado por la falta de sangre. Aún así siento que puedo hacer algo básico como caminar.

“muy bien entonces... ¡¡Ahhhh, mi cabeza!!”

Un dolor recorrió toda mi cabeza y fragmentos de imágenes son presentados... Lentamente veo y recuerdo algunas de las imágenes como memorias propias. No, no son mías... Son del dueño original. ¿Original, pero yo soy el original? Acaso no es este mi cuerpo... ¡Un momento! ¿Por que tengo un tatuaje de dos rifles en mi brazo izquierdo?... Además, ¿Mis dedos son más gruesos? No, no, no... Esto es solo una alusinación, además de que es imposible que pueda pasar en la realidad. Pero, a no ser qué, ¿Y sí morí y mi Alma tomara posesión de éste cuerpo? Eso significa que él, el dueño original también murió y porque razón no pudo sobrevivir como yo.

¿Por qué si él murió, yo sigo con vida? Muy probablemente él se sugestiono a si mismo ante una situación irremediable. Hace mucho tiempo investigué que una persona puede engañarse a si misma con el poder de la sugestión, en la narración decían que un prisionero fue condenado a muerte en la silla eléctrica pero un científico le dijo que si hacía un experimento en él le juraba que moriría sin dolor o lograría sobrevivir y así pagar su condena. En la sugestión el científico le dijo que le inyectaria una aguja para abrir una vena en uno de sus dedos, si se lograba curar la herida se le daría libertad pero sino moriría lentamente y sin dolor, lo que el criminal no sabía es que bajo su cama había una  bolsa con agua que se le hizo una pequeña abertura para que imitará a un desangrado. Al final el prisionero murió de un paro cardíaco y sin perder más que solo una sola gota de sangre.

Bajo ese concepto eh de suponer que el dueño original de este cuerpo murió. Todo por que él creyó que ya había muerto, sugestionandose a sí mismo y pensando que su hora ya había llegado; muriendo de una manera muy tonta si me lo preguntan.

No rezaré por su alma, puedo ver en sus recuerdos que él, el tipo, era de persona que hacían fechorías hasta durmiendo, y siendo sincero no me importa a dónde valla a parar después de todo, robarle los artículos vitales a los más indefensos es de criminal, además una cosa es que sea para sobrevivir y otra es ser un desalmado ladrón.

No era de extrañar por qué querían asesinarlo, y en pleno bosque, pero no entiendo porque no lo remataron. Es algo muy estúpido el dejar a la intemperie a un hombre mal muerto, solo dense cuenta de que sigo vivo, ese tipo de métodos es para haraganes. Aún que gradezco su inutilidad, pero me enoja su falta de compromiso para con la misión encomendada.

Dejando de lado los datos innecesarios, puede ser que este cuerpo no sea el mio, pero como soy yo el nuevo controlador, no le queda de otra que fingir ser el sujeto original osea que ahora me llamo Nikita Alexandrovich, pero para mí mala suerte es que suena a nombre de mujer, lastimosamente soy latino por lo que nombres con tonos femeninos no son de mi agrado. Ni modo, así tendrá que ser.

No hay vuelta atrás, pues ahora yo soy Nikita Alexandrovich y haré hasta lo imposible para sobrevivir en este maquiavélico lugar, este mundo caótico en el que ahora tengo que vivir.

Sobreviviendo en Day R Survival (En Proceso De Ediciones)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora